My baby, Quacks

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-¡Papá, date prisa! -Grito un pequeño Quackity de 6 años, dando saltitos desesperados en la puerta.

Sería su primer día en una escuela, exactamente primer año de primaria. Habia recibido educación basica en casa, ya que a su edad ya debería saber números y letras y otras cosas más, pero cuando llegó a brazos del búho, el pequeño no sabía nada, así que se encargo de enseñarle lo más posible, estudiando libros de educación preescolar para darle una buena educación antes de que entrara a primaria.

Fue fácil, ya que el menor aprendía demasiado rápido y era muy inteligente.

-Quacky... ¿Seguro que quieres ir? -Dijo Fargan, caminando hacia el pequeño pato, acariciando sus cabellos.

-¡Sii! ¡Quiero hacer amigos! Y... Y muchas cosas más. -Dijo emocionado, agitando sus pequeñas alitas con emoción, a la par que su colita de pato se meneaba frenéticamente.

Fargan no quería, el estudiaría para enseñarle al menor pero sabía que eso no era una excusa, ya que Quackity también debía socializar y gastar su energía con niños de su edad. Suspiro, debía empezar a soltar a Quackity, eso era más que seguro, pero... Le daba miedo que el mundo le hiciera daño.

Tomó de la manita al pequeño, y salieron de casa en camino a la escuela.

(...)

-¿D-De verdad quieres ir? -Se agachó quedando a la altura del patito, acunando su rostro con sus manos, mirandolo como una pequeña sonrisa pero sus ojos estaban cristalizados por las lágrimas retenidas.

Estaban enfrente de la escuela, muchos niños estaban llorando por no querer entrar y quedarse con sus padres, pero al final eran obligados a adentrarse a las instalaciones.

Lo contrario a la situación de Fargan y Quackity, Fargan empezó a llorar, abrazando a Quackity sin querer dejarlo ir, diciéndole que se quedara con el.

-¡Papaá! -El pequeño trato de separarse de su figura paterna, lográndolo poco después. Con sus pequeñas manitas tomó ahora el rostro de su padre. -Estaré bien, ¿si? -Le sonrió, causando que Fargan volviera a llorar.

Los padres de familia y tutores que aún estaban ahí, veían la escena enternecidos, era muy poco común ver este tipo de situaciones.

Después de que Fargan se tranquilizara, de levantó, revolviendo los cabellos rebeldes de Quackity.

-Ve... Si sucede algo malo le dices a la maestra para que me avise y vendré rápidamente, ¿de acuerdo? No te metas en problemas, cuidate mucho, por favor. Vendré por ti en la salida, no te vayas a ir con nadie que no sea yo. -Habló el búho, empezando a caminar a la entrada, una maestra estaba esperando, ya que Quackity y otro niño eran los únicos que faltaban por entrar.

-¡Sipi! Te quiero mucho, papá. Nos vemos al rato. -Le sonrió, jalo de la playera a Fargan haciendo que este se inclinará y le dio un beso en la mejilla para después correr emocionado hacia la escuela.

Fargan soltó un suspiro, mirando como su pequeño se adentraba en el edificio. Se quedó esperando a que cerrarán la puerta, y cuando lo hicieron volvió a su casa, ahora esperaría al rededor de 6 horas a que llegará, en lo mientras se dispondría a asear el hogar.

(...)

Un emocionado Quackity estuvo contándole a Fargan todo lo que hicieron, haciendo tiernos ademanes con sus manitas.

Después de todo, no fue tan malo dejarlo ir.

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—552 palabras.

HOLAAA, lamento la
tardanza, pero he estado
sumamente ocupado
estas semanas.

Aun que espero poder
actualizar más seguido.

¿Que tal les pareció
el capítulo?

Lo escribí en la escuela xd,
la inspiración te agarra en
los momentos y lugares
menos indicados jajdjsjdj.

¿Ya tomaron agua? Espero
que si. 💗

Muchas gracias a iludream
por darme esta idea para
el capítulo. :D

Eso sería todo el día de hoy.

Baiiii.