La Chica Con Alma De Dragón

Capítulo 9

Eres Increíble

Despues de contar mi historia, todos me abrazaron y consolaron. Esa noche me quede con los Jorgenson, Freda se hizo cargo de mi, dejándome en el cuarto de Patán, haciendolo quedarse con Bocón.

El silencio reinaba en la habitación, como lo solia hacer en mi Isla unas semanas atrás. Recorrí lentamente el cuarto, Patán no tenia muchas cosas, unos buros, baúles con ropa, muchas armas y cosas para hacer ejercicio regadas en el piso, su cama con una linda mata con muchos cuadros a colores y un escrito lleno de dibujos.

Me acerque para mirarlos mejor, eran muy lindos, en todos él era "El Héroe" adorado por todos. Los Jinetes decían que el debía ser el Líder, Estoico deseaba qué fuera su hijo y el futuro Jefe, las chicas querían salir con el, su papá decía que estaba orgulloso. Y el más divertido, una estatua dorada de él y Dientepúa cargando la "Superarma". Qué vikingo tan curioso, se nota que sueña en grande. Reí un poco y me acosté.

*****
- ¿Como te sientes?- dijo con interés Eskol.

- Ya mejor, mañana estaré como nueva- dije feliz - ¿Que hay de ti?- le pregunté.

- De lo mejor, Berk es asombroso- dijo contento.

- Pensé que dirás que me extrañabas, esta es la primera vez que hablamos en tres días- dije resentida.

- Claro que te extraño, nunca habíamos estado separados- dejo caer su cabeza en mi cuerpo.

- ¿Que haces? ¡Quitate, pesas mucho!- me queje y me dio un ataque de lamidas haciendome reir.

- No estes enojada, es solo que al ver a esos vikingos, supe que estarias bien- dijo poniendo unos grandes ojos. No puedo enojarme cuando pone esa carita.

- Bueno, esta bien- dije empujandolo, el se quito - Sabes que es difícil quitar tu saliva de la ropa- me queje señalandome completa y se rio.

- Hola Tn- interrumpió Patapez al entrar a los establos.

- Patapez ¿Que haces aquí?- dijo sorprendida sacudiendome la saliva.

- Vine a recabar información para mi escuela, Los Exploradores de Dragones- dijo feliz sacando su libreta y lápiz.

- Ha venido todos los días, solo se sienta a verme y a escribir, es muy raro- me susurro Eskol incomodo.

- Se nota que te gustan los dragones- dije con un poco de sarcasmo.

- Asi es, son criaturas magníficas, cada una es completamente diferente a las otras- dijo con una gran sonrisa - Por ejemplo, ese es un Pisarrocas, pertenece a la Clase Fogonera, al igual que los Pesadilla Moustrosa pueden encender ciertas partes de su cuerpo- dijo señalandolo lo cual me sorprendió, llevaba tiempo sin ver uno.

- ¿Sabias que son de los pocos dragones con su propio lenguaje? Se basa en resonancia, es por eso que tienen muchos cuernos- dije alegre mirándolo de lejos - Aunque se ve muy delgado ¿Cuanta carne le dan?- agregue con curiosidad.

- Le damos pescado como a los demas- dijo confundido.

- Estos dragones son deserticos, por eso tienen una vision aguda qué les permite cazar... cazar animales terrestres- dije con un tono enfatico.

- Ahora que lo dices parece tan obvio- dijo anotando con rapidez en su libreta -¿Como sabes tanto?- agrego sin despegar los ojos del cuaderno.

- Recuerda que puedo hablarles, hace como unos cinco años rescatamos algunos, aprendi un poco de su idioma pero no todo- cruce los brazos - Pero no vas mal, en mi Isla tengo varias libretas con información de muchos dragones, te las puedo prestar - le sugerí.