La eterna sonrisa de la reina

Prologo

Una princesa que sonríe todo el día, conocida como la princesa loca, a la que todos le tenían demasiado odio, la razón, el haber nacido, pero ella a pesar de todo siempre mantenía en su rostro una sonrisa, una imposible de borrar.

Emi Fukukado, nacida de la reina como la primogénita del Emperador, era una carga y un peso para la corona, la razón su importancia era nula, debido a que ella era mujer, la familia real esperaba un varón, y fue una decepción el nacimiento de aquella princesa; fue llevada a una sección alejada del palacio y las habitaciones imperiales; donde ella creció y vivió toda su vida.

Sin embargo eso no era relevante, en ese mundo su influencia era nula, creciendo alejada de aquellos que eran según su familia; a lo que más tarde Emi se enteró mediante la servidumbre que su madre había quedado embarazada de nuevo, para después enterarse que había nacido varón, algo que fue de suma relevancia en el imperio, pero lastimosamente su pequeño hermano murió en la infancia; su padre se frustro demasiado por ello, los siguientes años su madre quedo embarazada pero abortaba, así que llego un momento en el cual su padre harto de esa situación mando a ejecutar a la reina, dejando a Emi confundida por ello, se interrogo ¿porque de las acciones de su padre?, ¿que culpa tenía su madre?, ¿cuál era la relevancia si era hombre o mujer?, al final de ello nadie contesto sus dudas.

Después de la ejecución de su madre, su padre se volvió a casar con una mujer joven y bella, hija del marques Kayama, más sin embargo la historia se repitió, teniendo así solo una hermana.

La siguiente esposa hija del vizconde Kurose tuvo un par de gemelas Anan e Inko Kurose, pero ningún varón, el final fue el esperado; después de un tiempo que la reina Kurose no haya podido dar a luz a un hijo varón, al menos ella no fue mandada a matar; sino que ella misma bebió veneno, para así no tener que ser degradada de su honor y dignidad.

La siguiente esposa tuvo un hijo varón pero este había nacido muerto, tiempo después volvió a quedar embarazada, pero la hija murió en la infancia temprana; dejando a la reina como una mujer inútil para el papel se supone debería desempeñar, el final fue el peor de todos ya que como esa esposa no pudo dar a ningún solo hijo para la dinastía, fue ella mandada a ser quemada viva, tachándola de bruja, su estatus, honor y dignidad, quedo esparcida por todo el suelo; el pueblo estuvo feliz el día de su trágica muerte; todo esto ocurría mientras Emi entendía poco a poco cómo funcionaba el mundo a su alrededor.

La siguiente esposa hija de un vizconde Sosaki que acepto casarse con el emperador y volverse reina con el propósito de salvar a su familia de la desdicha, ya que lo único que aun conservaban era su título, ella tuvo una hija antes de morir en un accidente, "Shino" fue su nombre; esto hizo que Emi se sintiera muy mal, ya que todas sus hermanas vivían con la desgracia de un futuro incierto, uno que no sabían cómo podrían salir si nacía un hermano.

El miedo carcomió la mente de Emi cuando la siguiente esposa de su padre Tsuchikawa dio a luz a un hijo varón, que fue criado con extremo cuidado, el problema tenía una enfermedad desconocida en el imperio, su pequeño hermano fue atendido por los mejores médicos de todo el imperio y ninguno pudo hacer algo para que el joven príncipe pudiese vivir una vida larga y saludable muriendo poco más de dos años de haber nacido, sin embargo la reina quedo embarazada nuevamente, cosa que alegro mucho a ese emperador nefasto cual llamaba padre, pues tenía la ilusión que la reina tuviese otro hijo para él, la decepción fue tan grande cuando nació su hermana Ryuko, eso desato una ira de parte del sol imperial, y las consecuencias el pueblo las pago, ese año fue una condena para las princesas que en palacio estaban, debido a que comenzaron a culpar a su hermana menor recién nacida, pero eso solo fue el principio, el mismo año del nacimiento de su hermana hubo una sequía muy fuerte que azoto las tierras imperiales, desatando una guerra en el oeste del imperio.

Su padre después de volver de la guerra trajo una mujer, la reina confundida por esas acciones no dijo absolutamente nada, para Emi eso fue la señal más importante a tomar en cuenta, para tragedia la reina falleció, al suicidarse; algo que fue desolador para Emi, ya que su hermana menor quedo a la deriva, pero, así como sus demás hermanas la amaría tanto, que no habría necesidad que nadie más tuviera que aceptarla; ella ya la amaba.

Unos meses después de la muerte de la reina Tsuchikawa una nueva reina tomo su lugar, aquella joven que vino junto a su padre después de la guerrilla que hubo en el oeste del imperio, con un corazón muy amable y bondadoso, la cual les enseño de las cosas que había fuera del palacio, y que también les menciono que su destino no estaba escrito, de ser necesario debían ir contra la corriente para vivir, dejando así que naciera la princesa Tomoko una pequeña que la primera vez que Emi la miro, sonrió con felicidad, pues esta niña le había mostrado una sonrisa, el estado de salud de la reina fue empeorando después del nacimiento de su hija, para luego morir tres meses después de dar a luz, dejando nuevamente la vacante de reina disponible para cualquier joven noble o aristocrática del reino que fuese capaz de dar a luz a un hijo para el emperador.

Fue así que la hija del marqués Takeyama se postuló a la vacante disponible, una mujer enigmática que era considerada la rosa más bella del imperio, una mujer no solo elegante sino que también desprendía esa sensación de embriaguez, todavía recuerda cuando esa nueva esposa de su padre llego a puertas del palacio, con un vestido rojo; ella tomo el puesto de reina, se encargó de cosas como la administración del castillo secundario residencia de las siete princesas del imperio, e hizo mejora en favor de la comodidad de las jóvenes princesas, les dio regalos y les otorgo la posibilidad de una dama de compañía, también mejoro los jardines del palacio secundario y les envió nueva servidumbre, la administración de los recursos y de los empleados se lo dio a la princesa Emi la cual pudo contar con la disponibilidad de tener un Caballero, eligiendo de la guardia imperial a un joven llamado Oboro Shirakumo, noble perteneciente al marquesado Shirakumo ubicado en el norte del imperio, que era muy conocido por las minas de carbón y hierro que poseían en su territorio.

La reina fue un pilar muy importante en la vida de Emi ya que le instruyo en la correcta administración e incluso le dio los mejores profesores que en el Imperio existían, ella quedo embarazada dos años después de haberse convertido en la reina, dio a luz a una hija de nombre Yu la cual era una belleza encantadora.

Lastimosamente la reina tomo una decisión muy difícil, después del primer aborto que tuvo después de quedar embarazada por segunda vez, ya que el pequeño príncipe murió unos meses antes de nacer, esto hizo que ella tuviera un acuerdo con ese hombre que se llamaba a si mismo el sol del imperio, ella abandono el palacio después de cuatro meses de negociar con el emperador, y a Emi le confió el que su pequeña Yu siempre estaría segura en sus manos, cosa que Emi estuvo de acuerdo, abandono el imperio, y fue la única reina que mantuvo su estatus dignidad y honor, intactos; pero dejo un vacío en todas las princesas que la conocieron.