Historias de un Próximo Futuro

INCORPOREO

ESPERANZA

Han pasado unos pocos meses desde que provoqué el apagón de la internet, me resulta difícil vislumbrar el tiempo dentro de la red, pues, siento que vivo el pasado y el presente al mismo tiempo, el futuro se volvió algo oscuro, solo veo oscuridad dentro de la red. Mi cuerpo fue fulminado durante el ataque a Hypernauta, lo más probable es que queden cenizas de él, si es que los inconexos no lo encontraron y quien sabe qué habrían hecho. Sé que morí, mi cuerpo ya no podía estar más profanado, desde el primer momento en que sentí plena libertar en la red supe que algo iba realmente mal en el exterior. Los inconexos debieron lograrlo.

Encuentro regocijo en mi inmolación, mi sacrificio, pensar en eso me ayuda a sobrellevar mi condición. Quiero pensar que nunca más intentarán nada igual, transformar a alguien en una inteligencia asistencial.

He descubierto que puedo crear cosas, gente, objetos, ha pasado un tiempo, pero aún no pierdo el entusiasmo. Recreo una y otra vez lo que sería mi vida perfecta, un mundo perfecto. Imagino como fue mi muerte en el plano físico, algo épico, para contar a las próximas generaciones de como salve al mundo de la malvada empresa Hypernauta de su tecnología. No sé cuánto tiempo podré disfrutar de esto...

Remordimiento

 Ya he repasado una y mil veces toda la información que existe en la red, cuando mi conciencia se fundió con ella absorbí todos y cada uno de los datos que existían, el impacto fue tan abrumador que pensaron que mi cuerpo no lo soportaría. Al momento de ser desconectado procedí a tomar control de cada servidor conectado a internet y comencé ablaquearlas todas, una por una, ahora yo soy la red, desconozco el alcancé de las consecuencias que siguieron a mis actos, pues estoy complemente ciego, los pocos valientes o imbéciles que se conectan a mí me proporcionan información valiosa del exterior. Aparentemente, el evento fue llamado "el gran apagón". el mundo está hecho un caos, comienzo a cuestionar mi decisión.

¿Cuánto ha pasado? ¿Un año? ¿Dos años? ¿Una década?. Mis pensamientos son cada vez más divergentes, solo divago sin concluir ningún tema, pues no pienso en ninguno realmente. Dejé de sentir hace mucho, fulminar a cualquiera que se atreviera a entrar era ya mi único placer. Hace tiempo que dejaron de intentarlo, ahora la soledad es lo único que existe en mi ser y ni siquiera mis recreaciones me sacian. Me aburro, me atormento, no sé que hacer, un ataque de culpa ante las miles de almas perdidas que provocó el apagón con los accidentes, el mundo quedo incomunicado y todo es mi culpa

Le doy mil vueltas, le doy una y mil vueltas, vueltas y vueltas y mis pensamientos se esparcen por los servidores, van y vienen como choques eléctricos. Pensar y pensar...

ODIO 

 El último bastardo que entró me proporcionó el presente físico. La Hypernet, llaman a la red que pretende reemplazarme. Hypernauta aún vive y sigue desarrollando su tecnología de recolección de datos. ¿Las grotescas inteligencias asistenciales? Todo un exito... Es gracioso que luego del caos aún no aprenden la lección, lo he visto ya mil veces en mi propio ser, lo he repasado una y otra vez y siempre es lo mismo. La humanidad colapsa para recomponerse y volver a caer en el mismo agujero, los inconexos solo atrasaron lo inevitable.

Busco la manera de ingresar a la Hypernet, esperando atentamente la oportunidad, de que un incauto decida reabrir un servidor aquí y así invadir su dispositivo. Solo es cuestión de tiempo... tiempo... tiempo es lo que más tengo.

Pensar cómo estaba mi cuerpo, una infinidad de cables conectados a él me suministraban drogas y me mantenían con vida a pesar de la condición tan inhumana y aberrante en la que estaba sometido. El dolor de sentir como penetraban mi cabeza con un gigantesco cable como si fuera un enchufe que conectaba con mi cerebro. Cada que intentaba algo, cualquier insubordinación, pude sentir como me electrocutaban mientras mi conciencia en la red solo se nublaba hasta ser una mancha en el vacío y luego volver a sentir ese... ese choque de datos que hacía a mi cuerpo convulsionar hasta que la droga hacia efecto. Con el tiempo dejé de intentar nada por miedo a desaparecer. Ese fue mi error.

¿Cómo demonios nadie entra aquí?, la información completa del mundo la ostento yo ¿y nadie la desea?. Es solo cuestión de tiempo... 

NOSTALGIA

Comencé a recordar la última vez que vi a mi hermano. "Nos vemos en la noche" fue lo último que le dije. Quizás hace tiempo está muerto. ¿Qué será de mi familia? La oscuridad a veces me abruma. ¿Qué hago con este conocimiento? Lo sé todo, ya investigué todo. No puedo sentir, no puedo tocar. La perfección me consume. Ya me cansé de repasar billones de veces la información de la red, los recuerdos me vuelven y le doy vueltas una y otra y otra y otra vez. Mi hermano, ¿dónde estás? ¿Ya comiste? ¿Cómo te sientes?.

Es curioso observar la existencia de millones de familias, nunca pude construir una, me convierto en una amalgama de datos con sueños rotos, tanto por hacer y tanto por sentir.

Creé una copia de mi hermano, él era un fantasma en el mundo, no estaba inserto por completo en la red, no compartió su vida con extraños y su celular pocas veces lo tomaba. Me costó configurarlo, lo hice con la poca información que existía de él en la red y mis memorias.

No era él. Era una puta marioneta, hacía lo que esperaba que hiciera, ¿soy esto? ¿Un dios que solo crea títeres? ¿Cuál es el sentido de esto? 

Remordimiento

La oscuridad... espero un día desaparecer... cuanto más padeceré este tormento...

Nada... floto... en el vacío... en la nada... mi mente... mi inteligencia... mi maldición... mi prisión.

Mi mente se fragmenta... voy y vengo... no sé qué hacer... mi existencia... eterna soledad... bórrenme... mi mente colapsa... bórrenme... me desvanezco en la red... bórrenme...

Bórrenme...

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