Soy feliz. Sería hipócrita decir lo contrario, estoy casado con un buen hombre, con dinero, guapo, me ama, y yo lo amó, lo adoró tanto maldita sea, mi amado Toni es la clases de hombre qué se parte el lomo trabajando para que si esposo no lo haga, la clases de hombre que te trae flores una vez a la semana y te lleva a un lugar caro todos los fines de semana, porque cree que su esposo se merece eso y más, su único gran defecto el único, es que es...precoz, dura menos de un minuto
Conocí a Toni en un bar gay, si era extraño ver a un hombre vestido tan elegante y de portafolios, un hombre que está cerca de los cuarenta y se ve como si valiera mas de mil millones de euros, cuando me acerque a el sabia que estaba fuera de mi alcance, un actor porno gay, quien había follado tantos culos y aun así quería romper su anterior récord en descargas de semen y orgasmos. Toni fue dulce, sigue siéndolo, me sonrío y me invito una copa y no porque quería ligarme o tener sexo conmigo, lo hizo solo porque tenia demasiado dinero en los bolsillos, me confeso que se había divorciado de su esposa y sus hijos estaban lejos de casa y se sentían tan solo que entro por curiosidad, que no estaba seguro de ser 100%heterosexual, que nunca la estuvo desde muy joven, pero jamás se le dio la oportunidad, de experimentar, le conté sobre mi, un actor porno qué gana dinero fácil haciendo lo que mas le gusta con hermosos pasivos afeminados, a el no le importo en lo absoluto pensé que me miraría con asco, pero no lo hizo, se vio demasiado interesado, no por perversión si no por curiosidad, eso fue la luz verde, me lancé a el como una maldita abeja a la miel.
Cinco largos años, me tomo conquistarlo o al menos que me tomara en serio, deje mi trabajo de actor porno, mi vida de promiscuidad y le dije que si debía castrarme para estar seguro, lo haría delante de sus ojos, le advertí que no me importaba su edad que lo amaría hasta la muerte, y después de insistir, bueno también use mis encantos como actor porno para que cayera
En la primera cita me lance, quería follarlo, quería meter mi enorme verga en su perfecto trasero, demasiado perfecto para un hombre de su edad, ¡Joder su culo es precioso! La cuestión es que el señor bisexual sigue siendo demasiado heterosexual para que un veinteañero le diera por el culo.
Por amor por primera vez en mi vida fui el pasivo, ya que había dejado todo por amor, lo haría hasta el final, aunque ser pasivo nunca fue lo mío, mi culo no es sensible, duele y para mi es asqueroso, pero logre acostumbrarme por el, después de ocho polvos me di cuenta que este señor es un maldito precoz.
Estos son pensamientos intrusivos que tengo mientras me folla mi marido, después de ocho años de perfecto matrimonio feliz, mirando el techo de mi habitación, se siente mal, pocas veces me vengó y tampoco es que el señor sea muy bueno haciéndolo
—¿Porque no gimes?—Me pregunta jadeando extasiado en mi odio—¿Joe?—Gruñe mi nombre—¿No te gusta?
—Perdón.....joder si, que rico papito, mas duro—Sobre actuó como actriz porno barata, procaz burlándome de su patético pené, porque para colmo mide solo el promedio estándar y eso esta mas que bien, pero solía ser un actor porno de categoría, incluso si no era pasivo, merezco una buena verga—Ya vente maldita sea, se que te duele no sacarlo antes de los 30 segundos
Toni detiene mis caderas son romper el coito, me mira finalmente—Cariño—Dice hostil—Creo que estas siendo grosero
—No duras ni dos segundos Tony y tu técnica es mala, ¿Que te estas follando una sandia?
—Bien, voy a la ducha a bajármela, ya que no tienes humor
—No—Envuelvo mis piernas en sus caderas—Córrete—Le ordenó. Es mi amado esposo, no voy a dejar al pobre con las ganas
—No. Eres cruel conmigo—Trata de apartarse pero lo detengo
—Ya. Perdón—Colocó sus manos encima de mis pectorales, se lo mucho que le gusta mi cuerpo duro y masculino—Vamos se que te duele la verga y sácalo se que lo estas conteniendo, vamos adentro como siempre
