Fingió ser gay para tener la atención de las porristas, su objetivo es Verónica la Sexy rubia y capitana del equipo, no es como si Lu sintiera que tuviera oportunidad con ella, menos fingiendo ser gay, solo quería los privilegios que tiene los hombres gais con las mujeres, por ejemplo entrar al vestidor de las chica mientras se cambian porque necesitan la opinión de un especialista, los abrazos y besos en la mejilla, ellas creen que no hay atracción sexual, incluso por accidente beso a verónica en los labios y ella solo se rio.
Le gusta estar con los chicas, era un perdedor antes de que fingiera ser Gay, ahora tiene amigas, se siente bien ser parte de ellas y ser abrazado por su amistad, hasta que las mentiras fueron demasiado lejos, en una Pijamada, donde los chicas confesaban los chicos de quien estaban enamoradas, Lu para hacer mas creíble su fechada se gay dijo que “Dylan Fiore “ si el hermano de “Verónica Fiore” esa noche verónica emocionada cubrió sus labios y empezó a gritar como loca “El esta enamorado de ti, hace dos años, solo no quiso interponerse porque eres mi mejor amigo” las demás chicas empezaron a gritar y Luciano quería que se lo tragara la tierra, Dylan es el idiota violento del equipo del boxeo, un mujeriego, se ve demasiado heterosexual era la cuartada perfecta, el podría ser el estereotipó de chico homofóbico, jamás pensó que verónica saldría con algo así, les dijo a las chicas que era solo una broma, aun así no termino ahí, justo llegamos a este momento hay una carta en su casillero que dice “Tenemos que hablar” de Dylan
—¿Es de mi hermano?—Pregunta verónica apareciendo detrás de el—¿Ya la viste Lu? Vi que la puso en tu casillero
—¿Eres una maldita Ninja? No te me aparezcas así—Mete la carta en su bolsillo
—No me importa, en serio—Verónica toma las manos de Lu—Supe que le gustabas a mi hermano por los rumores del club de boxeo, le hice un berrinche horrible entre a su habitación y empecé a romper cosas, mi hermano no puede enamorarse de mi mejor amigo, pensé, es una locura, no puede hacerme esto, incluso aceptar el hecho de que fuera bisexual fue complicado para Mamá
—¡Tienes razón!—Dice Lu, tratando de escapar del aprieto donde se metió—¡No puedo hacerle esto a tu madre y a tu! Soy muy egoísta
—No, yo soy la egoísta, somos los egoístas, ustedes no son malos, tiene permitido amarse, les doy mi bendición, podemos ir con mi hermano ahora y explicárselo
—¡¿Ahora?! ¡¿Con Dylan?! ¡No debe estar ocupado en el club de boxeo!
—Ya termino, vamos—Toma la mano de Lu y le sonríe—Vas a ser parte de mi familia, no podría estar mas emocionada, te imaginas el día de su boda, esteremos todas ahí
—¿Casarme con Dylan?—¿Va a vivir esta farsa toda su vida? ¡Y si llega a casarse con el de verdad! No, No, No, debe haber una manera de salir de esto, debe decir la verdad, aunque eso seria perder su valiosa amistad con las chicas, y por supuesto Dylan va a molerlo a golpes, decir la verdad no es una opción, le queda la segunda opción, será el poder novio del mundo, así Dylan le terminara, es lo mejor.
Lu muerde sus labios, tiene miedo a matar, nunca se había metido en el vestidor de los hombres, no practica deporte, y ese lugar es una jungla de primates, verónica insiste y no tiene otra opción, que entrar, adentro esta casi vacío, solo esta Dylan para mala suerte de su destino, Lu, suspira trata de no parecer muy asustado
—Hola ¿Querías hablar?
Dylan se quita la playera sudada, sus cabello rubio esta empapado en sudor, ni si quiera se molesta en ver a Lu—Se que no eres Gay
