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Las semanas y los meses pasaron rápido en isla quesadilla. Las estaciones cambiaban rápidamente, y con su cambio también llegaron las fechas importantes.

San Valentín. Aquel día tan amado por unos y odiado por otros llegó rápidamente a la isla quesadilla, y mientras que unos la esperaban con ansias y se alegraban por su significado, otros, cómo Foolish, esperaban que nadie la mencionara y que fuera olvidada por el resto del año.

El motivo de su desagrado por la festividad no era otro que su más reciente ruptura con su ex novio, Mariana. El muy cabron lo había dejado por mensaje, después lo ignoro todas y cada una de las veces que intentó hablar con el y por último lo cambio por Slime no bien pasada una semana de su ruptura.

Ahora estaba solo, y mañana, cuando llegara la odiosa fecha y fuera a ver los fuegos artificiales que había organizado Quackity, tendría que aguantarse y ver a su ex con su nuevo novio desde la distancia.

Foolish, que desde hacía días se había refugiado en el interior de su dragón para evitar ver a cualquier persona, se vio obligado a salir al exterior debido a una llamada urgente de BadBoyHalo. Su amigo no le había dicho porque estaba alterado, por lo que una parte de él quiso solo ignorarlo y seguir en su dragón hasta el día después de San Valentín, pero la presión auto impuesta de ser un buen amigo le pudo más.

El semidios suspiro, y con una última revisión a su mochila salió del dragón. El camino hasta la casa de BadBoyhalo era relativamente corto, pero el verdadero temor en ir hasta ella era el peligro a encontrarse con ex. No quería ver a Mariana ni en pintura.

Foolish empezó a caminar lentamente en dirección a la casa de su amigo dando un rodea masivo para evitar la casa de Mariana, y justo cuando estaba vigilando donde ponía sus pies al bajar por una montaña, una llamada lo sobresalto.

- What the...? ¡Shit! - gritó el semidios al dar un paso en falso al intentar tomar su teléfono de su mochila. Su pie derrapó en la tierra y se doblo ligeramente al chocar contra una roca. Foolish puso sus brazos frente a su rostro para evitar lastimarse la cara, pero al hacer esto no pudo aligerar el impacto de su cuerpo rodando por la montaña.

Pequeños insultos y maldiciones hacia San Valentín salieron de la boca del totem una vez su cuerpo terminó por completo a los pies de la montaña. Aún después de haber caído diez metros desde la cima de una montaña, su teléfono seguía sonando. Era BadBoyhalo.

- What do you want now? - preguntó el semidios a su amigo. Al otro lado de la línea se escuchó un gemido de pura frustración.

- Where are you Foolish? ¡You should be here!

-I fell from a ten meter mountain - dijo Foolish con enojo. Se levantó del suelo tierroso y examinó su cuerpo y su ropa. Por fortuna nada se había roto.

- Really? Are you ok?... You know what? it doesn't matter. Go to Vegetta's house NOW.

- Why?

- I'll tell you when you are there.

Foolish suspiró pero no intentó decirle algo más a su amigo. No sabía porque BadBoy le dijo que fuera allá, pero por lo menos la casa de Vegetta estaba lejos de la de Mariana. Tal vez incluso pueda ver a Vegetta después de tantos días e inspirarse para otra construcción.

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Algo corto pero con cariño. Quería contribuir algo a este barco y esto surgió de imprevisto.

San Valentín Donde viven las historias. Descúbrelo ahora