3.

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Foolish se detuvo justo frente a la puerta de la gran e imponente torre del sabio para repasar su plan de tres simples pasos para pedirle a Vegetta ser su cita de San Valentín.

Primer paso: Foolish toca la campana encima de la puerta con las manos sin ninguna flor o regalo, y cuando Vegetta abra la puerta le pedirá un poco de pólvora o TNT.

Paso dos: Cuando Vegetta entre a su casa para buscar en sus cofres la pólvora, Foolish sacará la flor y le dirá una de las frases que aprendió de un viejo cuento de romance español.

Paso tres: Cuando Vegetta esté embelesado por la frase, Foolish le entregara la cajita de regalo que le dio BadBoy y le dirá en su español mas fluido "¿Quieres ser mi Valentín?", y entonces... entonces Vegetta dirá su respuesta. Sea cual sea.

Foolish se dio unos últimos ánimos antes de tocar la campana para llamar a Vegetta. El sonido de la campana resonó por la torre y después de unos segundos la puerta frente al semidios se empezó a abrir lentamente.

Foolish abrió su boca para saludar al ojimorado una vez la puerta estuvo completamente abierta, pero las palabras se atascaron en su garganta por la vista frente a él.

Vegetta abrió la puerta con el cabello húmedo, pantalones holgados y sin camisa. No había nada que le impidiera a Foolish ver el gran pecho o el trabajado abdomen del ojimorado.

La mirada de Foolish se atascó en el cinturón de Adonis que descendía desde las caderas de Vegetta hasta mas allá de sus pantalones e inconscientemente tragó saliva ante la vista.

-¡Hello Foolish! - saludó animadamente el pelinegro - Estas bien, my little friend? Pareces haber visto un fantasma.

Foolish tuvo que invocar toda la fuerza de voluntad que reunió en todos sus años de constructor para apartar la vista del abdomen de Vegetta y mirar su alegre cara. El paso uno de su plan se abrió paso en la mente calenturienta de Foolish hasta tomar prioridad por encima de los pensamientos indecentes.

- I'm completely fine, Vegeta - dijo Foolish entrecortado -. Do you have gunpowder? Tu tener polveora?

- ¿Pólvora? Creo que tengo un poco en casa... tu no has visto mi casa remodelada, o sí Foolish?

- No, I haven't seen your house...

- Pues entonces pasa y mírala - Foolish entró a la torre y admiró la antigua casa del ojimorado -. Reformé la casa y ahora este es el recibidor y donde tengo los carteles para teletransportarme.

- This looks nice.

- Thank you my friend. Para subir a mi casa oficial tienes que ponerte sobre este bloque blanco y saltar tres veces. Así.

Vegetta saltó tres veces sobre el ascensor y Foolish lo vio irse, después se puso sobre el ascensor pero esperó unos segundos para calmar a su cerebro y a su cuerpo de la sorpresa de ver a Vegetta lucir tan bien en simples pantalones holgados y sin camisa.

Al subir a la casa de Vegetta, lo que llamó la atención de Foolish, no fue la infraestructura perfectamente simétrica, tampoco fue la decoración, ni tampoco la organización de los cofres.

Lo que llamó la atención del semidiós fue la linda sonrisa que lucia Vegetta, ahora con camisa obviamente morada, mientras sostenía un stack de pólvora. Cómo le dio tiempo para subir, tomar la pólvora y vestirse tan rápido sería la pregunta cuya respuesta nunca obtendría.

La parte racional de su cabeza le señaló que el paso dos de su plan se había arruinado, pero la parte irracional y la parte que quería a Vegetta como mas que un amigo se pusieron de acuerdo y tomaron el control del cuerpo de Foolish, haciendo que éste tomara la pólvora pero que no escuchara lo que decía Vegetta.

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