au | en un reino moderno, el gran rey y alfa pura sangre Jeon Jungkook, se ve obligado a realizar un baile real para elegir a un omega y contraer matrimonio, y que así esta persona sea la que le dara su primer hijo y futuro heredero al trono real.
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Respira e intenta no desmayarte.
Respira e intenta no desmayarte.
Era esa la frase que Jungkook llevaba repitiendose en su mente desde hacía ya más de 3 horas. Eran las 2 de la mañana y él se encontraba en un cuarto de hospital ya vestido con su traje quirúrgico y dando vueltas a la habitación, a la espera de que llegaran las enfermeras para llevarlo al quirofano donde el amor de su vida estaba apunto de convertirlo en papá. Así es, Taehyung en este momento se encontraba en medio de una cesárea para poder traer al primer hijo o hija del Rey Jeon Jungkook al mundo. El pequeño frutito de amor entre el gran rey de corea y el repostero y rey consorte, Kim Taehyung.
Él omega había entrado en trabajo de parto mientras ambos dormían, fue todo una escena caótica el como ambos entraron en pánico cuando Taehyung comenzo con las contracciones, pero ambos se calmaron y actuaron de la mejor forma posible hasta llegar al hospital, siempre siendo ayudados y apoyados por la reina SoMin, quien al ser omega y ya haber pasado por aquello, fue quien se encargo de ayudar al omega en su trabajo de parto y a conciliar algo de paz en lo que llegaban al hospital y le colocaban los calmantes. Por Jungkook realmente no pudieron hacer mucho, el rey estaba que se comía las uñas de los nervios por que no estaba pasando cualquier cosa, si no que, ¡estaba apunto de convertirse en papá! También estaba la incertidumbre de que por fin sabrían si su bebé era un niño o una niña.
Volviendo al presente, Jungkook detuvo sus pasos nerviosos y suspiro mientras se llevaba su mano a su pecho, su corazón estaba latiendo demasiado fuerte y juraba que podría salirse de su pecho, por lo que intento tranquilizarse para una vez entre al quirofano, poder apoyar de la mejor manera posible a su hermoso omega.
—Su majestad —la voz de una enfermera omega entrando a la habitación lo saco de sus pensamientos, se giro con rapidez para verla y vio como esta le hizo una reverencia y sonrió—. Todo listo, su omega lo esta esperando. Su bebé esta apunto de nacer, acompáñeme —le dijo, Jungkook sonrió en grande y salió de la habitación para dirigirse a donde viviría una de las mayores alegrías de su vida.
Yendo detrás de la enfermera, pronto llegaron al quirofano donde Jungkook entro a paso rápido sin prestar demasiada atención a las reverencias de las y los enfermeros. Sus ojos se llenaron de lagrimas al llegar junto a su omega quien estaba acostado en aquella camilla de hospital; y tan pronto como llego lo primero que hizo fue dejar un beso en su frente para después juntarla con la suya.
—Te amo tanto, bonito —le susurró, escuchando los mini sollozos de su esposo quien se encontraba hecho un mar de emociones ante la idea de que pronto tendría a su bebé en brazos—. Gracias mi amor, gracias por este bebé, gracias por concederme la dicha de ser padre y gracias por ser el padre de mi bebé —le decía, Taehyung sonrió mientras asentía.
