El regreso de Beetlejuice

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No había vuelto a pensar en aquel fantasma que tantos problemas causo, aunque tenía que admitir que en cierta forma fue algo divertido aunque aterrador pero le había servido para que su padre y la esposa de este al fin le creyeran y dejaran de tratarla como a un bicho raro así que se podría decir que le agradecía a ese loco lo que había hecho por ella aunque ella nunca cumplió con su parte del trato en la cual debía casarse con él, ciertamente la idea no le atraía entonces ni ahora pero aquel ser era sumamente interesante para ella y le hubiera gustado conocerlo más a fondo.

Sin más siguió su camino llegando en poco tiempo a su casa sin saber si contar lo que había visto o no pues sabía que reacción tendrían sus amigos si se los decía, aunque poco podrían hacer esta vez pues el cementerio estaba en el pueblo y ellos no podían salir de su casa.

Al entrar los saludo como siempre, les entrego fotografías del pueblo y otras cosas que había comprado para la casa, luego subió a su habitación para dejar sus cosas aun pensando en lo que vio, decidió subir al ático donde se encontraba la maqueta del pueblo que tanto cuidaba Adam y aprovechando que ninguno de los fantasmas estaba cerca la observo con detalle hasta llegar a la parte del cementerio y para su alivio no vio la tumba de aquel fantasma, talvez solo se la había imaginado, ya más tranquila bajo para ayudar a preparar la comida.

Pasaron un par de días tranquilos hasta que Lydia no pudo contener más su curiosidad y decidió volver al cementerio esta vez un poco más tarde para ver si la tumba seguía ahí, al llegar confirmo lo que ya sabía, la tumba estaba ahí, aunque la pregunta era ¿por qué? ¿acaso alguien la había puesto allí? ¿era su castigo? ¿o una señal de que seguía ahí y que podría salir en cualquier momento?, se sentó junto a la tumba contemplándola con una mezcla de sentimientos hasta que una voz interrumpió sus pensamientos.

-Nos vemos de nuevo nena- Lydia se estremeció un poco pues no esperaba encontrárselo tan pronto, pero al buscar con la mirada no logro ubicarlo

- ¿Dónde estás? - Pregunto la chica pensando si se había vuelto loca

-aquí abajo- respondió el fantasma, esta miro hacia la lápida y lo vio sentado sobre la roca con su apariencia diminuta tal y como aquella vez que lo había visto en la maqueta

-Bee... ¿Qué haces aquí? - pregunto mordiéndose los labios pues casi decía su nombre por la impresión

-jajaja veo que eres más lista que antes muñeca y también estas más guapa- le guiño un ojo el fantasma -pues ni yo sé por qué estoy aquí solo aparecí y ya, pero si puedo volver a verte no creo que sea un castigo, dime ¿ya te has casado? Porque si no es así podríamos continuar donde lo dejamos y hacer realidad nuestros deseos ¿Qué dices? - la joven mujer lo observo con incredulidad por sus palabras

-no soy la misma de antes ya no me interesa ir al otro mundo...- Beetlejuice la miro divertido pues no le creía una sola palabra

- ¿ah sí? Y dime si ya no eres como antes ¿Cómo es que aun puedes verme y hablarme? Imagino que también hablas y sigues viviendo con ese par de tontos ¿no?, sabes bien que la gente común y corriente no puede verlos y tú y yo sabemos que tú eres especial, tú y yo siempre nos hemos entendido, ¿de verdad no quieres casarte? - este la miro coqueto y ella lo observo con detalle lucia casi igual que antes, pero esta vez más delgado y se preguntó cómo era posible si era un fantasma, si bien sabía que no era uno normal.

-no gracias tengo mejores cosas que hacer- le respondió levantándose, el fantasma se molestó mucho ante su actitud y le dijo antes de que se marchara

- ¡¡ya volverás Lydia!! ¡¡ya lo veras!! - ella se marchó del lugar sin saber que pensar pues no le agradaba la idea de que aquel fantasma anduviera rondando por ahí

Pero tampoco le desagradaba del todo pues como bien había dicho el mismo a ella seguían gustándole las cosas paranormales y debía admitir que aparte de sus amigos fantasmas Beetlejuice era lo más interesante que le había pasado además le causaba mucha curiosidad todo sobre él, le encantaría preguntarle sobre todo lo que sabia pero dudaba que este aceptara sin recibir algo a cambio cosa que aceptaría de no ser porque sabía lo extremista que era en todo lo que hacía o quería, si fuera más razonable no tendría ningún problema en aceptar