Leyendas Urbanas

Corazones Congelados II

El caballero dió varias bocanadas de aire antes de ponerse de pie, y con piernas temblorosas logró llegar hasta su cama.

Camus: Por Atena

Se pasó una mano por el rostro y cerró los ojos, su mente lo transportó a un recuerdo en el que no había pensado en un tiempo, no es como si fuera un recuerdo agradable. Fue en su primera misión, bueno, la primera en la que su maestro le permitió participar

Flash Back

Recordó el frío que le calaba hasta los huesos, aquella figura femenina que se deslizaba por la habitación oscura cual espectro y se inclinaba sobre la cama de su maestro, ponía sus esqueléticas manos en el pecho del caballero y lentamente le arrebataba las fuerzas. Fue cuando un lloriqueo llamó su atención que la entidad se percato del pequeño niño asustado en la cama contigua, las comisuras de sus labios pálidos se curvearon en una sonrisa torcida y flotando se acercó al niño tembloroso.

- ¿Pero qué tenemos aquí? Un pequeño aprendiz de caballero, te daré un consejo, cariño, no le cuentes de esto a nadie o la próxima vez que nos encontremos no seré tan amistosa

La mujer se acercó más al niño, al punto en que su aliento helado le provocó un escalofrío.

- Eres tan dulce e inocente, Cami, tan joven que alimentarme de ti seria bellamente pecaminoso

La Dama soltó una aguda risa que resonó en el cuarto antes de desaparecer,  mientras la risa aún continuaba oyendose.

Como desearía poder olvidarlo o atribuirlo a la imaginación de un niño asustado como había hecho su maestro en el momento.

Degel: Solo tuviste una pesadilla, muchacho, eso pasa cuando prestas las atención a los cuentos fantasiosos de l9s aldeanos que al objetivo de la misión

Camus...

Degel: Se que eres muy joven para entenderlo, Camus, pero no debes involucrarte en nada más que cumplir con tu deber

Nunca culpó a su maestro por no creerle, balbuseó tanto por el miedo que seguramente ni logró transmitir la idea. Además, ¿Quién va a creer que un niño ve fantasmas? El mismo Camus habría llegado a la misma conclusión que su predecesor, si no hubiera visto la cicatriz que quedó en el pecho de Degel, justo donde la esquelética mano de la mujer se había posado.
El antiguo caballero de acuario nunca había tenid9 esa marca antes de esa noche, y nunca desapareció, pero nadie más que el joven aprendiz pareció darse cuenta...

Fin del Flash Back

El caballero se pasó una mano por el cabello mientras empezaba a sentir lo que pronto sería una fuerte jaqueca.
Ni siquiera intentó volver a dormir, se vistió con sus ropas de entrenamiento y salió de la alcoba, dejaría dormir a su pupilo unas horas más antes de despertarlo para entrenar.

Arya: ¿Todos los caballeros se despiertan tan temprano?

Camum intentó no sorprenderse al oír la voz de la joven en la cocina, cuando estaba por salir. En cambio, se apoyo en la encimera y vio a Arya tomando una taza de té.

Camus: ¿Qué hora es?

Arya: Las 4:00 AM

Camus: No suelo dormir mucho ¿Y tú?

Arya: Bueno, me dió algo de frío, la ventana de mi cuarto se abrió de par en par y tuve que correr a cerrarla para evitar congelarme

Camus: Si, me paso lo mismo