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La bestia
Se mueve solo en la oscuridad
Es un depredador, sabe que siempre va a ganar, no va en manada, no la necesita
es silenciosa
Ha visto a la mujer caminar nerviosa, sabe que ella se cree observada, pero también sabe que ella se cree paranoica
y aguarda pacientemente.
Su presa se cree a salvo cuando sale a las entradas de la ciudad, pero él le mostrará que nunca se está salvo de la bestia
La cacería comienza
La joven corre y grita al escuchar el crujido de las ramas y el gruñir de una gran bestia. Huye tan rápido como puede, pero aunque los conejos son rápidos la bestia lo es más
Y él ya se sabe vencedor.
Juega con ella, corretean hasta llegar nuevamente a la entrada del bosque, allí donde sabe que nadie les escuchará
La sangre se derrama
La joven sólo servirá ahora para alimentar a la bestia, su cuerpo hecho pedazos se muestra destrozado ante él.
Y él no solo ha devorado su cuerpo
También ha devorado su alma
Y ha hecho con los sucios retazos de un cuerpo de humana
una obra de arte al alma.
...

El péndulo se balancea nuevamente, y la luz que muerta se había tragado a Will al abismo lo ha devuelto ahora con conocimiento. Abre los ojos y el poder que antes sentía se ha ido, ahora solo se siente sucio por disfrutar del asesinato de una pobre dama.
Su mirada se desvía a la mujer despedazada en el suelo, los miembros que la bestia había separado los había vuelto a unir con ramas de árboles y dentro de su torso rebanado depositaron una gran cantidad de hojas ya secas; aquella mujer con los ojos bien abiertos mira hacia el abismo, buscando la salvación que nunca llegaría, porque nadie le había escuchado gritar.

-¿has terminado?- le había preguntado Jack Crawford. El jefe investigación de los recientes casos de asesinato de la ciudad y por rumores que rondaban, también era un cazador de vampiros y otros seres sobrenaturales; era también quien lo había arrastrado al lugar para "ver".

-No es un animal salvaje Jack, pero tampoco es un hombre.

-Estamos buscando a una bestia- se dirigió a Will con el tono inquisidor que siempre usaba "da más detalles muchacho, eso ya lo sabía" le ha dicho con la mirada, pero Will no le mira, no puede, ya no quiere ver más.

-Estás buscando un monstruo, esta no es cualquiera bestia. No es solo salvaje, es calculadora y sádica, es un "come gente" no es cualquier monstruo.

-Graham tiene razón- Interrumpió Beverly, una de las ayudantes de Jack y la única mujer que trabajaba en el cuerpo de investigación. Intrépida como siempre, Will aún se preguntaba cómo aquella mujer les acompañaba- Debajo de todo el teatro que ha hecho vuestro monstruo, también se ha llevado los pulmones de la mujer y - dudó por un momento, pero continuó- creo que uno de sus riñones.

-¿Tiene o no los dos riñones?

-Es que todo dentro de ella parece un puré de patatas. No es mi culpa.

-Su interior refleja su mente, ella no es más que un cerdo- Le miró Will.

Jack y Beverly le miraron, también los otros dos hombres que acompañaban a Jack. Brian y Zeller tenían tanta madera de cazadores como Will de noble.

-Creo que debo irme-

-No hemos terminado aquí, Will-

-Yo si terminé. Dejé a los perros sueltos, tengo que cuidar que no se pierdan- Se despidió Will mientras empezaba a caminar de regreso a su casa. El arroyo de su hogar le daba tranquilidad, solo debía echar la cabeza hacia atrás, cerrar los ojos y sumergirse en la tranquilidad del arroyo; era como quedarse ciego, solo entonces dejaba de observar y podía empezar a vivir.

_Sempiterno_ [Hannigram]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora