Fanfic adaptado de @La_Rosa_De_Felix_ muchas gracias ♥ por permitirme delulear un rato con mis personajes fav.
Intro:
-Hey, acaban de correrme de casa. ¿Tienes espacio para dos?-
-¿Dos...?
-Tu hijo y yo.- oh mierda.
《ADVERTENCIA》
**Contenido +18
**...
Quizás la situación de estrés le hizo entrar en labor de parto, no lo sé, pero estoy en desesperación absoluta preparto.
Tomé el bolso y él sujetó su vientre bajo jadeando de dolor.
-Llevame rapido al hospital por favor Macao ¡Joder! -chilló lo alcé en brazos yendo hacia el auto rápidamente.
Llamé a Bas mientras lo subía al asiento trasero.
-Bas joder ¡Tay entro en labor de parto! - grite encendiendo el auto partiendo como un animal.
-¿Qué? Pero si tiene ocho meses, acaban de salir de aquí... ¡Tráelo en seguida!
-Estoy yendo, nosotros bueno...
-¿Estaban discutiendo no es así?- preguntó, suspiré dándole a entender que sí - avisaré en recepción tu sólo llega aquí- dijo, sentí y colgué mandando mensaje a todos en cuanto había luz roja - Oficial, a la clínica, ahora - mande los mensajes, sudando frío mientras Tay se quejaba atrás.
-Odio esto - jadeó sus ojos estaban llenos de lágrimas de dolor - ¿¡Puedes apresurarte por favor!? - grito.
Tragué saliva.
-¿Quieres llegar a parir o a urgencias eh?
-¡Lo que sea! y espero hijo de puta ¡Que al menos hayas tenido la decencia de pedir una cesárea, porque ni en un millón de años cagaré a este mocoso! - gritó con la vena marcada en su frente, abrí mis ojos con miedo, nunca lo había visto así, me estacione lo mas GTA que sabia y salí del auto, abriendo su puerta y tomándolo en mis brazos para adentrarse en la clínica, Bas estaba esperándome con una silla de ruedas en la entrada.
-Corre corre corre corre -murmuró.
-¡Mierda duele, los odio hijos de puta! - gritó sosteniendo su abdomen jadeando de dolor - Macao te voy a matar maldita sea! - vi sus ojos llenos de lágrimas, me extendieron varias cosas y yo sólo me las coloqué, observando en todo momento a Tay.
Fue rarísimo estar ahí, no podía ver cómo operaban a Tay, pero él estaba despierto, mirándome sus ojos semi bailaban por la anestesia, yo acariciaba su rostro y cabello.
-Amor... Espero ahora cambies de parecer - dije besando su frente, él sonrió tan dulcemente.
-Tienes una cara muy linda Macaoo - dijo acariciando mi rostro - ojalá el bebé solo se parezca a tí y quizás así le quiera un poco - dijo y rió. suspiré dando una mirada hacia mi lado.
OH SANTO DIOS
Ya veo porque estudié finanzas y no medicina.
Inserte sonidos de vomito
Es demasiado, más porque era Tay.
Espera, espera.
-Tay... - murmuré viendo cómo le abrían sacando al bebé, mis ojos se llenaron de lágrimas, me acerqué a Tay besando su frente,él solo estaba adormecido mirando el techo.
No sé cuanto pasó, basically mi persona llorando de emoción, felicidad, tristeza, euforia, muchas cosas.
Ellos cerrando a Tay, mientras la enfermera limpia al bebé que había pegado el característico llanto que saludaba al mundo nuevo.
Me di cuenta de todo, cuando ubicaron al niño en el pecho de Tay y este miró a otro lado llorando a mares silenciosamente.
-No quiero verlo Macao, por favor - pidió con voz ahogada - No quiero - dijo, la enfermera se vio incómoda y los demás asistentes igual, excepto Bas y yo, lo tomé acunandolo contra mí.
-Hola mi amor - murmuré viendo su pequeña carita roja, sus ojos cerrados formando una línea, sus manos y brazos tan diminutos, parecía un pequeño garbanzo de todo lo arrugado que estaba - Hola cariño... -murmuré sujetándolo con cuidado, era tan hermoso que no pude evitar llorar de pena, pena por Tay.
-Soy tu papá Macao - dije, con una sonrisa llena de lágrimas - mi bebé mi pequeñito...
-Yah mira este chico tan lindo - dijo Bas mirando al bebé - Serás igual de guapo que tu tío Bas, tenlo por seguro - dijo - felicidades bro - dijo palmeando mi hombro.
-Debo llevar al bebé a la sala de al lado señor, si no les molesta - dijo la enfermera, Tay se mantuvo en silencio y yo sólo le sonreí y se lo entregué, otro doctor estaba acabando el procedimiento terminando de coser la herida, El de piel de seda seguía llorando, mordiendo su labio inferior con fuerza, me acerqué a él.
-No me toques - murmuró - y dile a la enfermera que no lo lleve junto a mí - dijo - Puedes irte.
Fruncí mis labios, sabía que no era culpa suya y las lágrimas acudieron nuevamente a mis ojos.
-Yibo Theerapanyakul - dije - Por si al menos te interesa saber su nombre.
Me miró por el rabillo del ojo y volvió a voltear su mirada.
《En sala de espera》
-¡Felicidades! - exclamó Pete abrazándome con fuerza mientras Vegas ponía los ojos en branco sonriendo de lado, correspondía el abrazo, llorando por enésima vez.
-Ok espera no llores así - dijo Time abrazándome.
-Es que es ta-an... es tan hermoso y pequeño - lloriquieé en su hombro a mares y todos me consolaron con burla.
Hijos de puta.
Cuando tengan un hijo tan lindo como el mío los quiero ver.
Limpié mis lágrimas.
-¿Y Tay? - preguntó Porshcay, suspiré alzando los hombros.
-Me dijo que no quería verlo, ni siquiera una mirada le dió al bebé - dije - Bueno vamos a ver a mi niño - dije y les señalé con la cabeza hacia donde me señaló la enfermera, ya me había quitado las cosas y las había desechado, yo y mi gang partimos en búsqueda de la sala de los bebés.
Buscamos con las narices pegadas al vidrio.
-Es tu hijo, ve donde está - dijo Arm, busqué con mi mirada hasta dar con él.
-¡Ahí está, en la fila de allá, el cuarto! - dije señalando, todos miraron en aquella dirección.
Y a que no adivinan.
No fuí el único en llorar.
-Es tan chiquito - murmuró Arm abrazados a Porschay, este asintió llorando con él.
Time me abrazo.
-Es tan lindo, ojalá no se parezca a tí - dijo llorando en mi hombro, palmer su nuca.
《En Casa, cuatro días después》
Tay entró en silencio, un silencio realmente incómodo.
Subió enseguida yendo a cambiarse de ropa, abracé a Yibo contra mi pecho.
-Ignora a papi Tay, ya se le pasará - dije besando su mejilla, sus ojitos seguían cerrados - Vamos a la habitación amor - dije llevándolo a su cuarto, hizo ruiditos de bebé y sonreí de ternura, vi a Tay mirarnos desde su habitación - En cuanto se duerma me haré un café ¿Quieres uno? - pregunté, él asintió y miró su cama - Ya verás que papá Tay va a amarte de nuevo amor - le dije besando su frente suavemente.
Lo recosté en la cuna y la mecí un poco, esperando que se durmiese.
(terminamos maratón♥)
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