S E G E N 《MacaoTay 》 Mpreg

32 Tay Por Favor

《MACAO》

Fue difícil, muy difícil.

No supe cómo reaccionar en aquel momento, nadie supo, solo Bas y York, pero bueno es profesional tenía que hacerlo, me sacaron de la sala porque estaba muy alterado, tuvieron que desarme pues estaba asustando a Yibo.

No entendía nada, absolutamente nada.

¿Cómo? ¿Por qué? ¿Cuándo? Sentía un calor tan fuerte en mi mano y su agarre tan firme ¿Cómo podía ser posible que haya pasado?

Mi pobre hijo no entendía mucho más que yo, y exigía respuestas que nadie podía darle, porque nadie sabía que estaba pasando.

Cuando desperté, él seguía en el quirófano, o eso supuse al ver que nadie se había movido de allí, no quería alterar me nuevamente para no asustar a Yibo, quería ver a mi bebé, a Tay pero nadie decía nada.

Yibo me abrazó con fuerza.

-Todo va a etar bien papá -dijo con un tono desgraciadamente tan lastimoso para un niño tan pequeño, que temía lo peor.

Bas al fin salió de la sala, apoyándose en la pared, con los ojos llenos de lágrimas…

No.

-Yo…

Por favor no.

Te pido que no.

A quien sea de lo más algo en el cielo.

-Tuve que inducirle a un coma -dijo larga dose a llorar luciendo exhausto- pero está bien, maldita sea está vivo -lloré también con una mezcla de susto y alivio.

-Gracias Bas -dije abrazándolo.

-Debemos esperar a que responda bien, a que su situación sea más estable, recuerda que no es la primera vez que pasamos algo así -dijo haciéndome entender a lo que había pasado con Vegas hace un tiempo- deberías ir a ver a tu hija.

-¿Es una niña? -pregunté, él asintió, Yibo se aferraba a mi cuerpo, escuchando con atención, lo tomé en brazos.

-Si… muy linda y sana, le pusieron unos signos de pregunta y sus apellidos -dijo y limpió su rostro, Arm se puso de pie y se acercó a su esposo para consolarlo, Tay era como su hermano pequeño y lo entendía, fuí con mi hijo en brazos a la salita, buscando la cuna que tuviera aquella etiqueta.

-Mira Yi, allí está tu hermanita -dije acariciando el cabello de mi hijo, aguantando las ganas de largarme a llorar, porque no sé cuándo despertará Tay o si es que lo hará, no quería pasar por esta situación familiar de nuevo, pasar por la misma oscuridad que me tomó mucho tiempo librarme cuando Vegas estaba entre la cuerda floja.

Miré la incubadora, viendo a mi niña llorar a gritos, sacudiendo sus manitos pequeñas, me escondí en el cuello de Yibo y lloré, no quería estar en esta situación, Pete y Vegas estaban conmigo pero es diferente Tay es todo mi mundo y sin él no tengo el valor y la voluntad de tener fuerza, creo que perderé la poca cordura que tengo.

-Papi no llores… mira, mi hemanita está bien -dijo acariciando mi cabello.

-No sé por qué a sido tan difícil Yi -dije limpiando mi cara.

-Todo va a etar bien papá -dijo- tenemos que ponele un nombre a mi hemanita… pero papi Tay no está -dijo con un suspiro.

-Habíamos hablado de ello ¿No te acuerdas de algún nombre? -pregunté, él pensó un rato.

-Oh, papi Tay decía que le gustaba Meiying y el otro Jade -dijo asentí y sonreí un poco, sentí una mano en mi hombro y me giré viendo a Time, se veía tan  o más destrozado que yo.