| ¡Sunday! | CANCELADA.

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— ¡Mira Sunday, ella es tu prima Mia Tanaka! — Decía la rubia acercando a su hijo que tenía en brazos, a la pequeña niña de un año.

Enid miraba con ternura a la pequeña Mia. Su primer sobrina, sería interesante ver cómo sus amigos empiezan a tener hijos.

— Dios Enid, ¿Podrías dejarla de ver aún que sea dos segundos? — Comento Yoko, todos claramente habían notado a como Enid no dejaba de ver a Mia.

— ¡Es una ternurita, está tan pequeña!

Hizo que su esposa abrazara a su hijo, para de inmediato abrazarla a la pequeña niña.

Una niña con cabello demasiado lindo en la opinión de Enid.

A la abrazaba como si nunca la fuera a soltar en su vida, no podía creer que esa niña llamaría “mamá” a Yoko. Simplemente aún no lo procesaba.

— Está mujer va matar a su hija asfixiándola. — Comento Wednesday hacia la pareja que solo miraban con gracia.

Enid intentaba hacer de todo para hacer reír a Mia, pero ella solo la miraba, sin ningún tipo de expresión o reacción.

— ¿Por qué los niños de hoy en día son demasiado serios? — Susurro, pero todos la escucharon. — Sunday también nunca se ríe.

— Pero Sunday es hijo de tu emo sin emociónes. — Rio Yoko, ganándose una mirada de enojo por parte de Wednesday.

— Nos dijieron que Mía taraba mucho en agarrar ese tipo de confianza. — Dijo Divina, acercándose hacia Enid para retirarle a Mia y ahora ella cargarla en brazos.

— ¿Con eso a qué se refieren? — Pregunto la rubia.

— Que tendrá cara de que odia a todos hasta que les agarre confianza, ahora está seria, pero en el avión no se quedaba en paz.

— Me gustaría que Sunday fuera así. — Miro al niño. — El simplemente duerme y cuándo está despierto no hace nada, parece que nos mostrará ninguna emoción.

Todos se quedaron en silencio, era cierto, el joven Addams casi nunca parecía un bebé, mayormente dormia, algo que le preocupo a Enid, pero Morticia le dijo que Sunday era como una copia exacta de Wednesday.

— Muy bien. — Wednesday se levantó del sillón donde se mantuvo sentada desde que habían llegado. — Vámonos a casa. — Se acercó a Enid, obligándola a caminar hasta la puerta. — Yoko y Divina están cansadas del viaje.

— Pero amor... — Caminaron hasta la puerta, saliendo la de casa, sin siquiera despedirse.

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— ¿Quieres que cuide a tu hijo por una noche? — Pregunto el pelinegro, mirando fijamente a su hermana. — ¿Wednesday Addams me está pidiendo un favor?

— No es un favor, te voy a obligar a hacerlo, necesito que cuides de Sunday una noche. — Se intentaba tapar su cara de vergüenza. — Se lo pidiera a Yoko, pero ahora ella estaba ocupada con su hija.

— Está bien, solo si me dices “por favor.” — Cruzo los brazos, con sonrisa burlona.

— Sabes muy bien que nunca te diré eso.
— Fruncio el ceño. — Prefiero morir que a pedirte un miserable favor.

— Entonces lo siento mucho, dile a mamá que cuide al enano. — Se volteo para retirarse. Sintió una mano ponerse en su hombro para ser jalaron bruscamente, quedando de enfrente con su hermana mayor, lo miraba con una cara que nadie se quiere imaginar.