king of disaster

cabello

Sapnap miraba fijamente al británico tratando de encontrar el motivo o señal del cual su repentina indiferencia. Era normal, si, pero sus ataques verbales eran más agresivos de lo que solían ser en señal de respuesta.

George estaba jodidamente consumido por sus celos e intentaba no hacer que sus pensamientos intrusivos hicieran que Sapnap le pusiera 7 órdenes de alejamiento.

Aunque el británico era experto en eso, no por algo siempre se creía que él también correspondía los sentimientos de Dream, cosa que, honestamente no lo hacía. Estaba aburrido y ver cómo se volvían loco por el era encantador.

Aunque ahora los papeles se voltearon completamente. Y ahora el que se arrodillaba por amor era George a Sapnap.

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George arreglo su cabello, sentía la mirada de Sapnap encima, algo incómodo debido a ello pero sabía porque la insistencia de ser mirado de aquella manera.

- ¿has peinado tu cabello? Veo muchas hojas ahí - Sapnap comentó

- ¿Eh? No, no lo he hecho..que yo recuerde -

Sapnap se acercó al británico, con la excusa de ayudar a quitarle hojas de su cabello. Aunque solamente quería estar cerca del más bajo.

El moreno comenzó a quitar hojas enredadas en el cabello castaño, evitando jalar algún cabello en el proceso y molestar al otro.

George en cambio, estaba rojo a más no poder. Sentía el olor corporal de Sapnap, oliendo a sudor y por supuesto su perfume masculino que también podía oler. George estaba imaginando cosas que hasta XD se asustaría por los pensamientos ajenos. Sin embargo el británico quería sentir ese olor solamente para él. Sabía que tipo de perfume usaba Sapnap, y también que tipo de productos corporales también usaba. Lo sabía todo en realidad.

Pero era cosa de entretenimiento nada más. Todas las madrugadas se la pasaba revisando las cosas de Sapnap para tener cálculo de todo y cada objeto y saber si realmente faltaba algo de la habitación de Sapnap.

Y eso indicaba bastante varios factores en George. Sapnap sólo disfrutaba tocar el cabello ajeno, porque él, a comparación de George, no se la pasaba como adolescente caliente todos los días.

—" creo que es suficiente, no crees? "—

George hablo, ya bastante nervioso y sonrojado por sus pensamientos con Sapnap.

—" lo que diga mi rey "—

Sapnap reiria un poco mientras besaba la frente del británico, agarrando toda las hojas del cabello de George y las quemaba instantáneamente con su mano.

George miraba al otro completamente avergonzado y a la vez con ganas de asesinarlo por simplemente existir siendo sexy y guapo. Lo odiaba pero lo amaba.

Odiaba amar a Sapnap, odiaba todo lo perfecto del demonio. Pero amaba amar a Sapnap, amaba su calidez y manera delicada pero a la vez ruda en la que lo trataba. Dream jamás le habría hecho sentir estás cosas, porque Dream no era su tipo, sus verdaderos gustos se llamaban Sapnap.

Fuertes, ardientes, rudos, con problemas de ira pero a la vez apegados, cariñosos y sumamente amorosos. Amaba a su Sapnap. Pero odiaba que Sapnap tuviera ojos en sus comprometidos .

Y Sapnap amaba a George, era aquel amanecer que iluminaba su ciudad. Aquel atardecer que hacía que todas las estrellas en sus ojos brillarán para que George ilumine la noche oscura de su ser. Pensar de aquella forma le hacía sentirse raro. Después de todo George era su mejor amigo, casi un hermano. O así lo veía antes.

De igual forma, Sapnap estaba dispuesto a estar con George.

Porque de todas maneras, los anillos de oro no eran su estilo, solamente la mano de George combinaba perfectamente con la suya.