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Advertencia:

— La personalidad de los personajes pueden llegar a no ser canon como la historia de estos.

— Mal vocabulario.

— ¿Sin sentido?

Pasado totalmente distinto al del anime.


Dolor e inocencia.

Sabía de su miserable vida, aun así hacia la vida miserable a los demás para así destruir aquella felicidad que él no pudo tener.

No lo iba a negar, aquel pilar del viento se sintio atraído únicamente a los hombres aunque aquello cambio cuando su padre lo castigo de las formas más violentas y sangrientas... Haciendo que su mente logrará cambiar pero, no a un lado positivo, sino uno negativo.

— ¿Bien?

El peliblanco solamente observó al azabache que al parecer solo estaba atentamente con su serpiente y la pilar del amor que se encontraba presente, al observar que no había tenido ninguna atención de ambos, solo disimulo una pequeña tos.

— Se que están totalmente enamorados y que se nota a distancia pero necesito que me pongan cuidado.

El rubor en la mejilla de los otros dos pilares no tardó mucho en hacerse presente, mientras aquel peliblanco los miraba, no sabía que decir al respecto ante aquello pero sólo necesitaba procesar las situaciones.

— Par de tortolos... Mejor iré con Kocho, ustedes sigan con lo suyo.

Se levantó para así empezar a caminar a la dirección donde habitaba aquella pilar del insecto, esperaba que no se encontrará en una misión,  pues necesitaba hablar con alguien acerca de todo lo que estaba sucediendo.

Por cada paso que daba podía escuchar sus gritos cuando era azotado y más los gritos de su madre tratando de detenerlo solo por haberle hecho una simple pregunta, que quería olvidar completamente.

Al caminar pudo observar como el pilar de la llama salia de la finca de agua quedando demasiado confundido ¿Cuanto tiempo había durado en ello? Pero le pareció más extraño que la expresión de energía y alegría que lo caracterizaba, no lo poseía.

¡Rengoku!

El recién nombrado, levanto su mirada para así observar al peliblanco, no duró mucho en que aquella actitud cambiará de instante pues ahora se observaba con una sonrisa en su rostro y con una buena energía.

— ¡Shinazugawa! ¿Como te encuentras? ¿Y qué haces por estos lugares?

El pilar de la llama se acercó a aquel para después hacerse a un lado esperando una claridad respuesta ante eso, no quería que aquel pilar estuviera cerca de la finca de agua por lo que debería mantenerlo alejado.

Por cada pétalo. Sanegiyu - HanahakiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora