El poco tiempo que nos queda

03

Ya no recordaba la última vez que vio su rostro..

Aquel hombre de dientes punteagudos y linda mirada a pesar de sus ojeras.

Bueno... tal vez no recordaba la última vez que lo vio o recibió una carta, pero recordaba cada detalle de el y sus sentimientos seguían intactos.

Talvez ya había pasado un año completo pero lo extrañaba como si hubieran pasado siglos completos.

Nada podía ir peor verdad?..

Cuando a sus oídos llegó cierta noticia supo que la suerte no existía.

Adolfo Hitler no había respetado el tratado de paz.
Y con el se llevaría a su pequeño escape a la felicidad.

Había luchado tanto tiempo para volver a ver esa sonrisa y ahora no sabía el futuro que tenían, buscaban un ganador a esa guerra.... y sólo podía ser uno.

Ahí fue cuando el ruso empezó a tomar licor sin control alguno, si antes tomaba una botella de vodka ahora se tomaría tres.

¿¡COMO NO ESTAR TRISTE!? Si le quitaban lo único que lo había hecho tan feliz, si algo le pasaba... si algo le pasaba a la Piraña esa.. no sabría que hacer, sería lo mismo que quitarle un pedazo del alma.

La guerra era más cruda.. más fría y más violenta, no había día en el que no haya un muerto.
Y no había día en el que dejará de pensar en el...

- Aveces sólo quisiera saber si me uso para esto o si estará pensando en mi como yo pienso en el en cada momento...

Su mirada siempre era una muy indescifrable, siempre estaba serio, muchos PENSABAN que siempre estaba molestó pero ahora era diferente, ahora mirar sus ojos era como ver los de una persona muriéndose lentamente tan triste era que llegaba a ser preocupante.

- Le a llegado una carta señor. - Hizo una reverencia.

- De quién? - contestó sin ganas, además de no dirigirle la mirada.

- Viene... desde Alemania N. señor urss.

Cuando escucho ese nombre la sostuvo y comenzó a leer.

Cada palabra escrita le hacía derramar lágrimas, de alegría y de tristeza, había esperado tanto este momento y estaba tan triste por lo que estaban viviendo ¿era justo a caso? ¿amarse era un pecado?...

"Guten tag¡! Aproveché que había un guardia distraído y mande esta carta, realmente quería saludarte y saber como estabas, se que no podrás responderme, nose si nos volveremos a ver, nose si esto terminará bien Unión... pero si esta llega a ser mi última carta... Yo quisiera decirte la verdad, siempre estuve muy enamorado de ti, cuando me mirabas a los ojos o me hablabas de como conquistarias la luna antes que cualquier otro país, me atrevo a confesarte que te amo, quisiera saber si fui correspondido, quizá nunca lo sepa pero quiero que tu lo sepas!.

Te amo.

Y que gane quien tenga que ganar.
Y me despido hasta que el destinó nos dejé encontrarnos... aunque muy en el fondo sepamos que no será así..

De tu mejor amigo... Gran tercer imperio.
Para ti mi querido Unión Soviética. "

No... realmente doleria un final, si terminaba... si todo terminaba... le estaría dejando un vacío peor que la misma muerte.