Un amor sin fin-geminifourth (Pausada)

22

Cuando Fourth escucho los gritos nocturnos de los árboles, no pudo evitar retorcerse del miedo. Su cuerpo se sentía como si se hubiera sumergido en la piel de un lobo feroz y aterrador. Hubo un pequeño momento en que sintieron que se habían alejado demasiado. 

"¿Que ha pasado?" 

"Solo me duele un poco el pecho" Gemini se cubrió la boca "No me mires así"

"Lo siento, pero no tenías que cargarme tanto tiempo" Frunció el ceño al ver la mancha residual de rojo en los labios de la persona frente a él. 

"¿Te duele algo?"

"Eso debería preguntarte yo"

Ambos se quedaron en silencio, mirándose con preocupación genuina. A los pocos segundos, una silueta apareció a su lado. Una brillante espada se asomó en la oscuridad.

"Príncipe, esa persona... unos sujetos se lo llevaron" Gemini comenzó a reír toscamente, Fourth pensó que estaba volviéndose loco de nuevo. 

 "Lo suponía, esta fue su manera de encontrarnos" Fourth miro hacia un lado y se dio cuenta entonces, que su preciado anillo no estaba en su lugar, el vendito accesorio que lo identificaba como príncipe de Chiangmai. ¡Demonios, lo habían atrapado!

"¿Y ahora? ¿Qué hacemos? No podemos volver a la capital, si el emperador te ve, morirás" Gemini esperaba que algo como esto pasara, desde la llegada de ese sujeto, pero de alguna manera estaba tranquilo, sobre todo quería ver a Fourth regresar a casa. 

Este no era su mundo, nunca pudo notar potencial en Fourth cuando se trataba de peleas o trucos malvados para manipular a los demás. 

"Yo merezco morir en cualquier momento, no me preocupa" 

"¡Oye, tu-!"

"El anillo que se llevó da a entender que estamos varados en este lugar, pero ¿Y si pensaran lo contrario?" Fourth estaba un poco confundido ante estas palabras. "Si quieres que te diga todo, tienes que darme algo a cambio"

Fourth se sonrojo al notar como Gemini lo barría con la mirada. Bajo la cabeza y resignado, tuvo que guardar su curiosidad.

"Jajaja, regresemos, busquemos un hotel por ahora" 

{...}

"Termine ganándome un gran tesoro, dormiré junto a un bello ángel" Fourth sabía que se estaba burlando, pero no le quedo más elección que elegir esta habitación, porque en la otra Pat roncaría toda la noche. 

"Voy al baño, idiota, deja de mirarme" Al verlo levantarse, Gemini solo se lamio los labios gustoso, lo único que lo separaba de esa persona era una cortina usada como puerta de baño. 

La silueta maravillosa de Fourth a través de la cortina fue algo que nunca espero encontrar. 

Literalmente, Fourth se estaba quitando la prenda exterior, deslizando su ropa como si despegara una fina tela para revelar esa carne tierna y apetitosa. 

"Sin duda es... la tortura mas grande de este mundo" Mirarlo a través de la tela, fue un cosquilleo único que nunca había sentido. 

"¿Quieres tanto que te explique eso?"

"Claro que si"

El hombre como el mismo sol retiro la cortina y miro fijamente a Gemini.