𝐒𝗎𝗂 𝐆𝖾́𝗇𝖾𝗋𝗂𝗌 || 𝐂𝗁𝖺𝗋𝗅𝖾𝗌 𝐋𝖾𝖼𝗅𝖾𝗋𝖼

𝐄𝐱𝐭𝐫𝐚 𝟎𝟒

Ruth.

Mi embarazo había estado avanzando más rápido de lo que creía que sería los primeros meses fueron de muchas náuseas después llegamos a los antojos y por último a las falsas alarmas de que daría a luz. Durante estos meses habían estado junto a nosotros mi mamá y Pascale quienes se turnaban para estar en casa, había dejado de ir a las carreras de Charles cuando el embarazo avanzó más así que ahora lo veía muy poco y si hablabamos también era poco por las diferencias de horarios pero aun así nunca dejaba pasar un día, siempre tenía su mensaje en mi bandeja de entrada en mi teléfono. También tuve algunas visitas como la de Gemma, tías por parte de mi mamá y algunas amigas tanto de mamá como de Pascale, había dejado de frecuentar a viejas amigas pues no sentía que encajaba del todo con ellas la qué nunca me dejo fue Gemma cada día estaba en cada ayudando a Owen con sus tareas o simplemente pasando el rato con nosotras.

—¿Segura que no quieres que te ayude a subir las escaleras?.—pregunto por sexta vez Gemma y yo negué.

—Si puedo subir solo aparte tendrás que bajar de nuevo y yo ya no bajare quiero dormir un rato necesito descansar.

—Bien, pero aquí me quedaré hasta que vea que subiste con bien las escaleras y debiste hacerle caso a Charles pudieron acondicionar una habitación de aquí abajo pero no eres demasiado terca y estas sube y baje escaleras.

—Suenas igual que mamá siempre me dice lo mismo pero ya les dije que así estoy bien me gusta mi habitación.

—Es que es más cansado que estés subiendo y bajando escaleras Ruth pero eres demasiado terca como para escucharlos, si necesitas algo mandame algún mensaje estaré con Owen ayudándolo con su tarea, ¿okey?.

—Esta bien, solo quiero descansar un rato.

Sonreí de lado antes de comenzar a subir las escaleras, coloque una de mis manos en mi espalda baja mientras que con la otra me agarraba de la barandilla de las escaleras.

—¿Segura que quieres subir?.—pregunto Gemma y yo deje salir un suspiro

—Si, si quiero subir así que deja de hacer esa pregunta.

—Bien ya dejare de hacerla.

Hice una pequeña mueca al sentir un pequeño dolor pero no le di mucha importancia pues había tenido algunas contracciones qué sólo nos llevaron a una falsa alarma, poco a poco logre subir las escaleras por completo solte un suspiro y me quede quieta por algunos segundos tratando de tranquilizar mi respiración la cual se había agitado al subir las escaleras. Di algunos pasos más cuando volví a sentir esa pequeña molestia lo cual hizo qué me recargara en una de las paredes más cercanas tome algunas respiraciones como me lo había indicado la doctora cuando paso el dolor seguí con el camino hasta la habitación haciendo algunas paradas por la pequeña molestia sabía que debí hacerle caso a Gemma y quedarme abajo pero siempre me gusto llevarle la contraria y ahora estoy aquí sufriendo las consecuencias.

Encendí mi teléfono y llame a Gemma quien no dudo en responder.

—¿Necesitas que te suba algo?.

—No, pero si necesito que subas creo que esta vez no es una falsa alarma las contracciones ya son seguidas y no dudo que en algún momento mi fuente se rompa.—hable agitadamente.

No recibí alguna respuesta de su parte solo se escuchaban sus pasos y poco a poco se acercaba hasta donde yo estaba al verme se acercó.

—¿Has tomado el tiempo?.—negue—. Por dios Ruth, bueno solo apóyate en mi y esperemos que esa fuente no se rompa antes de que bajemos de nuevo las escaleras pero siento que eso pasara.

—Solo callate Gemma solo me estas poniendo más nerviosa de lo que ya estoy.

—Lo siento.

Me apoye en ella y comenzamos a caminar de nuevo hacia las escaleras mientras que ella intentaba llamar a su novio.