Cat-astrofe | Minlix |

Extra: You are purrfect.

Era su quinto aniversario e iban a tener una cita. Era importante y ambos querían que sea lo más perfecto posible. El más afectado por el estrés de que todo saliera mal era Minho, después de meses pensándolo por fin le iba a pedir matrimonio y quería que todo saliera bien.

Iban a hacer algo simple, irían a un restaurante lindo pero no tan caro y de ahí saldrían a caminar; simple pero lindo.

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Tocó la puerta de la casa de Minho y escucho un : — "Ya voy." — desde dentro, estaba nervioso pero no lo iba a demostrar.

Minho salió y sus ojos se encontraron, como si hubiera sido la primera vez que se veían, los sonrojos no tardaron en aparecer.

— Entonces, ¿Nos vamos?

— Vamos.

Cualquiera que los viera pensaría que son dos adolescentes en su primera cita; nerviosos y en cierta forma tienen razón. Sólo que son dos adultos en su quinto aniversario y uno con planes de pedirle matrimonio al otro.

[♡]

Mientras caminaban sentían suaves roces de sus manos, hasta que finalmente Felix tomó la mano de Minho que tenía cara de preocupación, quería que todo saliera bien.

— ¿Pasa algo? — Felix lo saco de sus pensamientos.

— Nada, nada. Sólo estoy un poco distraído.

— ¿Seguro? Podemos volver si quie-

— No, no, no. Hay que hacer lo que teníamos planeado. Estoy bien si estoy contigo.

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Los nervios de Minho casi arruinaron la cita o al menos eso creía el, porque Felix le dijo una y mil veces: — "No importa si morimos aquí, si es contigo me va a gustar." — pero parecía que la cabeza de Minho no captaba el mensaje.

— Cielo, me estás asustando en serio. Decime qué pasa.

— ¿Prometes no huir y dejarme terminar?

— Esta bien.

— Hace meses que llevo pensando en esto, no sabía cómo decirlo u creí que hacerlo ahora era lo mejor. Los últimos cinco años solo me haz llenado de felicidad y te agradezco eso pero hay un problema.

— ¿Un... problema?

— No es tan grave realmente, ¿Me puedes prestar tus manos un momento?

Y con el corazón en la garganta, colocó sus manos sobre las de Minho.

— Mmm~ ¡Aquí! Este dedo está vacío, es un problema.

— ¿Qué?

Felix estaba más que confundido pero ver a su amado arrodillarse frente a el mientras sacaba una cajita con un hermoso anillo, su mente conectó todo.

— Tengo la solución al problema, sólo tienes que decir que sí.

— Eres un idiota, creí que me ibas a dejar.

— Nunca lo haría. ¿Qué dices? Soonie, Doongie y Dori necesitan otro papá.

— ¿En serio estás preguntando? Por supuesto que sí.

Y como la primera vez que unieron sus labios, Minho lo tomaba de la cintura mientras que Felix jugueteaba con su cabello. No importaba cuántas veces se hayan besado, siempre sentían las chispas y cosquilleos del primer beso.