Decisiones dificiles

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Alex se sintió aturdido mientras se alejaba de Megan. ¿Por qué siempre tenía que meterse en situaciones complicadas? Sabía que Megan tenía sus propios problemas y no quería hacerle daño.

Lucas lo vio caminar hacia la salida y lo siguió. "¿Qué pasa, hermano?" preguntó Lucas. "¿Por qué te vas?"

"Lo siento, Lucas", respondió Alex. "No debería haberme metido en eso. Megan tiene sus propios problemas y no quiero hacerle daño".

"¿Qué estás diciendo?" preguntó Lucas. "Megan es fuerte, puede manejar esto. No te preocupes tanto".

"Lo sé, pero me siento mal", respondió Alex. "No quiero ser parte de sus problemas".

Lucas lo detuvo y lo miró a los ojos. "Escucha, hermano. Megan es una gran chica, pero si no te sientes cómodo con esto, entonces tienes que hacer lo que es mejor para ti. Pero recuerda, a veces tomar decisiones difíciles es lo que te lleva a donde necesitas estar".

Alex reflexionó sobre las palabras de Lucas mientras caminaba hacia su casa. Sabía que tenía que tomar una decisión, pero ¿cuál sería la correcta?

Al llegar a casa, se sentó en su cama y reflexionó sobre lo que acababa de suceder. Sabía que Megan era una persona increíble, pero también sabía que tenía que ser honesto consigo mismo. Decidió que lo mejor era hablar con Megan y aclarar las cosas.

Al día siguiente, Alex se acercó a Megan y le dijo que necesitaba hablar con ella. Se encontraron en un café local y Alex le explicó cómo se sentía. Le dijo que no quería ser una carga para ella y que si ella tenía problemas, quería ayudarla, pero no quería ser parte de ellos.

Megan escuchó con atención y le agradeció a Alex por su honestidad. Le explicó que tenía problemas en su pasado que aún la afectaban y que estaba trabajando en superarlos. Pero también le dijo que valoraba su amistad y no quería perderla.

Megan se encontraba sentada en la terraza de su departamento, mirando hacia el horizonte. La brisa suave de la tarde soplaba en su cabello y la hacía sentir un poco más tranquila. Sin embargo, por dentro, su corazón latía a mil por hora.

Hacía unos días, Alex le había confesado que le gustaba. Aunque ella sentía algo por él también, no estaba segura de estar lista para una relación. No después de todo lo que había pasado en su pasado.

Megan suspiró y tomó su teléfono para enviar un mensaje a Alex.

Megan: Hola Alex, ¿puedo verte hoy?

Alex: Claro, ¿dónde nos encontramos?

Megan: ¿Te parece bien si nos vemos en el parque central a las 5?

Alex: Perfecto, allí estaré.

Megan cerró los ojos y respiró profundamente. Sabía que tenía que ser honesta con Alex y contarle sobre su pasado, pero no sabía cómo empezar.

A las 5 en punto, Alex llegó al parque central y vio a Megan sentada en un banco, con una expresión seria en su rostro.

Alex: Hola, ¿estás bien?

Megan: Sí, solo necesitaba verte y hablar contigo.

Alex: Claro, ¿qué pasa?

Megan: Alex, yo también siento algo por ti, pero hay algo que necesito contarte antes de que empecemos una relación.

Alex: ¿Qué pasa? Puedes confiar en mí.

Megan: Verás, hace unos años fui víctima de abuso sexual. Me ha costado mucho superarlo y aunque he hecho terapia, todavía me cuesta confiar en los hombres y estar en una relación.

Alex: Oh, Megan, lo siento mucho. No tenía idea. Te agradezco que me hayas contado.

Megan: No quiero que pienses que no me importas, porque sí me importas. Pero necesito que entiendas que puede que necesite tiempo para superar mis miedos y confiar en ti completamente.

Alex: Claro, entiendo completamente. Solo quiero que sepas que estaré aquí para apoyarte en lo que necesites. Y si necesitas tiempo, lo tendré en cuenta.

Megan: Gracias, Alex. Significa mucho para mí.

Después de la cena, Alex y Megan caminaron por el parque. A pesar de que la noche estaba fresca, Megan se sentía cálida al lado de Alex.

"Gracias por esta noche, Alex. Me encantó", dijo Megan con una sonrisa tímida.

"Me alegro de que te haya gustado", respondió Alex con una sonrisa. "Megan, quiero que sepas que me gusta mucho estar contigo y que me encantaría seguir viéndote".

Megan bajó la mirada y se mordió el labio. "Yo también quiero verte más, Alex. Pero... tengo que decirte algo".

Alex notó la expresión de preocupación en el rostro de Megan. "¿Qué pasa, Megan? Puedes decirme cualquier cosa".

Megan suspiró profundamente. "Tengo algunos traumas del pasado que aún me afectan. Y a veces me siento insegura y asustada".

Alex tomó su mano y la apretó con suavidad. "Megan, entiendo que tengas miedo. Pero quiero que sepas que siempre estaré aquí para apoyarte y protegerte. No tienes que enfrentar nada sola".

Megan sonrió tímidamente y se acercó a Alex. "Gracias, Alex. Eres una persona increíble".

Entonces, Megan se detuvo y se acercó a Alex, dándole su primer beso. Alex respondió con pasión y ternura, sintiendo que el corazón le latía con fuerza.

"Te quiero, Megan", susurró Alex.

"Te quiero también, Alex", respondió Megan con una sonrisa.

Los dos se abrazaron, sintiendo que estaban en el lugar correcto en el momento correcto. Y juntos, se prometieron apoyarse y cuidarse el uno al otro sin importar qué decisiones difíciles tuvieran que enfrentar en el futuro.

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⏰ Última actualización: Apr 12, 2023 ⏰

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