MAL QUERER - KOOKV

CAPITULO 4 - DE AQUI NO SALES

Jungkook se sentía perdido, se sentía enfermo, pero en su cabeza todo tenía sentido, todo tenía una justificación, él estaba actuando como un buen esposo, porque quería proteger a su amado y que así ambos fueran felices juntos, hasta que la muerte los separe.

Jeon mantuvo encuentros casuales con mujeres porque creía no merecer tener a Taehyung de esa forma, no después de haberle lastimado tanto.

Antes de llegar a casa, intentaba maquillar el olor de los perfumes dulces para que su esposo no lo notara, pero a había veces en las que el alcohol le dormía, así que Taehyung terminó por enterarse que mientras el estaba encerrado por amor, su esposo lo engañaba y aún así, Jungkook no lo veía suficiente.

Taehyung se empezaba a molestar, ¿Acaso su esposo no veía lo que él estaba sufriendo?

— Jungkook... — El castaño estaba en la puerta del estudio de su esposo, mirándolo aún con cariño, con amor, su esposo le miró, ahí estaba la diferencia, el ya no lo veía con amor como en otras veces, sino con superioridad, pues Jungkook sabía que Taehyung dependía de él y solo de él — Kook... — vio su mirada volverse cálida, de un momento a otro —

Jeon odiaba que Taehyung le habrala tan frío

— Dime, cariño — El mayor cerró su laptop para prestarle atención a su esposo —

— Quisiera saber si puedo salir a... — Ni Siquiera lo dejó terminar —

— No — quiso volver a abrir la laptop —

— ¿Siquiera me dejas decirte a donde? —

— No vas a salir solo — cruzó sus brazos sobre su pecho, su mentón arriba y sus ojos oscuros a veces hacían sentir al menor algo insignificante —

— Quiero ir a una cafetería Kookie... —

— Para eso tenemos gente que puede hacerlo, dime que se te antoja y te lo harán —

— No se tratara de eso, puedo ir con tus guardias si eso te pone da calma, no llevaré mi teléfono y también puedes escoger la ropa que quieras que me ponga, pero déjame ir — sus ojos se cristalizaron, no podía creer que rogaba por un permiso —

— Enserio quieres ir ¿Verdad? — Jungkook bufo con una sonrisa al ver a Taehyung asentir — Bien... — Se levanto y tomo a su esposo de la mano para guiarlo a su recámara — Quítate eso, traeré tu ropa —

Taehyung sentía un poco felicidad, iba a poder salir "solo" y eso para él, ya era un logro.

— Ten —  aventó a la cama un ligero suéter de cuello de tortuga blanco, un cárdigan café y un pantalón ligeramente holgado — ¿Es tu estilo? — Taehyung asintió — Cámbiate y vienes al estudio, quiero verte ¿ok? —

Su esposo dejó la habitación y dejó al castaño en ropa interior, esperando a ser cubierto, fue humillante para él, ¿acaso era un estupido muñeco?, pero estaba tan dispuesto a todo con tal de no hacer enojar a su esposo. Taehyung se vistió, peinó ligeramente su cabello, colocó sus lentes y sobre el cuello de tortuga colocó un ligero collar que creía le daba un toque al conjunto, bajo a el estudio, ahí ya lo estaba esperando Dong Chul junto con otros guardias que no sabía sus nombres, pues eran rotados constantemente.

— Bien... — el pelinegro le hizo señas que pasará — ¿Dónde está la cafetería? — le extendió un papel para que anotara la dirección—

— Es acá — escribió —

— Cerca de tu oficina, eh... — Taehyung asintió — Bien, llévenlo y tú — señaló a Dong Chul — Te doy permiso de estar literalmente cerca de él, solo no te excedas — le amenazó, el hombre asintió y reverencio ligeramente — Los quiero aquí antes de las siete, mi Tae y yo debemos cenar — Los guardias salieron para preparar los carros y Jungkook acompañó a la salida a su esposo —