Unidos por las cadenas {Sinbad y Tú}

Capítulo 5...Los esclavos más valiosos

¡Hola mis Magis! :3

Aquí les dejo:

*~*~*~Unidos por las cadenas~*~*~*

Capítulo 5...Los esclavos más valiosos

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No quería reírse, en serio, pero la situación era demasiado buena como para no hacerlo.

Fátima seguía enseñándole a Sinbad como hacer su trabajo. El pelimorado hacía casi todo lo que el otro le decía, pero era demasiado torpe y siempre se caía de boca a causa de las cadenas.

A Tn__ le dolía el estómago por reírse tanto. Aunque también le dolía cuando Sinbad se lastimaba. Pero su risa por el sufrimiento del otro era más fuerte que su empatía en ese momento.

—Te estás divirtiendo mucho con esto ¿No es cierto?—Cuestiona el peligris mirándola con cara de pocos amigos.

—¿Y para qué te digo que no?—Responde para luego volver a reír irritándolo todavía más.

—¿Sabes qué? Llévate a este inútil a almorzar y regresen después—Empuja a Sinbad hacia ella.

La chica lo atrapó, pero perdió el equilibrio y ambos terminaron cayendo al suelo.

—Ya no es tan divertido ¿Cierto?—Se burla Fátima señalándola.

—No, sigue siendo divertido verte correr por todas partes como desquiciado—Dice Tn__ antes de volver a reír.

Fátima gruñó apretando los puños y los dientes, algún día se vengaría por esto.

La chica se incorporó y ayudó a Sinbad a levantarse, luego ambos salieron de camino al comedor.

—"Ha pasado mucho desde la última vez que me reí tan seguido"—Piensa limpiándose las lágrimas de los ojos.

Han pasado ya tres días desde que Fátima comenzó el entrenamiento con Sinbad, y ella ha asistido a todos ellos para poder cuidarlo y evitar que el estropajo lo mate. Lo bueno de eso es que reía de forma constante viendo como aquel tonto perseguía a Sinbad por todos lados levantándolo y gritándole. En serio adoraba verlo perder la cabeza por algo tan simple.

Llegaron al comedor y pidió la comida para ambos. Una vez terminado su almuerzo, fueron a terminar unas tareas que le quedaban a ella antes de regresar con Fátima...y las risas.

Una vez más el peligris se encontraba discutiendo con Sinbad por ser lento y torpe. Y desde luego, Tn__ seguía riendo a más no poder.

En un punto Fátima se hartó y le dio una tarea tan simple que hasta un perro podría hacerla. Su deber era llevar a unos esclavos a la parte de atrás de la bodega, y así lo hizo.

Viendo este logro, el peligris le siguió indicando a dónde llevar a otros esclavos, hasta que después de un rato el ambarino regresó con una niña en brazos. Tn__ se acercó a ver lo que sucedía y notó que la pequeña tenía mucha fiebre.

—¿Darle tratamiento? ¿Qué tonterías estás diciendo?—Cuestiona Fátima incrédulo.

—Es una niña pequeña, Fátima. Su fiebre es muy alta—Dice la chica recibiendo a la pequeña en brazos.

—¿Y eso qué? Solo es mercancía inútil—Se acerca a ella para intentar quitársela.

—¡Déjala! Yo me encargaré de ella—La abraza de manera protectora.

—¡¿Acaso eres estúpida?! ¡La señorita Maader no te dejará hacerlo!

—¡Si lo hará!

—¡¿Y por qué crees que ella-?!