Unidos por las cadenas {Sinbad y Tú}

Capítulo 7...Orgullo

¡Hola mis Magis! :3

Aquí les dejo:

*~*~*~Unidos por las cadenas~*~*~*

Capítulo 7...Orgullo

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Dos semanas pasaron tras el incidente con Naya y los tigres de Maurenia. Tn__ se había recuperado un poco, o al menos lo suficiente para ayudar con cosas simples que no causaran que sus heridas se abrieran. La niña la seguía ayudando en lo que podía evitando causarle más problemas, y si se quedaba al cuidado de Kyle, Madani y Altrum, procuraba estar siempre cerca de ellos manteniéndose ella misma en su campo de visión. Y así continuó la rutina, aunque con esos leves cambios.

El día de hoy, los nuevos esclavos llegaron y no paraban de llorar, algunos clamando por sus padres. Fátima los miraba con el ceño fruncido, estaba a nada de perder la paciencia.

Unos esclavos que trabajaban bajo sus órdenes intentaban calmar a los pequeños, pero ellos seguían llorando colmando la paciencia del peligris, quien se acercó con su látigo dispuesto a hacer el trabajo él mismo. Pero apenas alzó el brazo, sintió una mano retenerlo por la muñeca. Al voltear a ver quién osaba hacer tal cosa, se encontró con la vacía mirada de Sinbad.

—¿Podrías...dejar que me encargue de ellos?—Pide el pelimorado con calma.

El de ojos oscuros frunció más el ceño dejando escapar un leve gruñido.

—Haz lo que te dé la gana—Responde zafándose de su agarre con brusquedad para luego alejarse.

—Escuchen, ustedes ahora son esclavos—Comienza a decir el ambarino teniendo la atención de los pequeños—Los esclavos son propiedades, y al igual que los objetos, pueden ser vendidos y comprados, por lo que ya no tienen derechos humanos.

Los niños lo miraban muy asustados aun con algunas lágrimas brotando de sus ojos. Desearían no entenderlo, pero lo hacían y estaban muy asustados.

—Es por eso que deben ser buenos niños y mantenerse tranquilos. Si pueden hacer eso, no habrá razón alguna para azotarlos, y si dejan sus cuerpos sin marcas, pueden ser comprados por alguien de un buen lugar—Continúa con una leve sonrisa—Puede que también llamen la atención de mi maestra, la señorita Maader. No quieren que los lastimen más de lo que ya lo han hecho ¿O sí?

Los pequeños negaron con la cabeza y se calmaron. No querían que siguieran haciéndoles daño con esos horribles látigos. Agacharon la cabeza y siguieron caminando hacia donde los guiaban en completo silencio.

—Esos esclavos serán enviados a la subasta, sería más sencillo si solo los azotamos—Comenta Fátima cruzando los brazos.

—Te equivocas. Es precisamente porque serán enviados a la subasta que no deben ser azotados—Comenta Sinbad—Si les causas cicatrices, su valor en el mercado baja. No debemos dañar la mercancía de la señorita Maader basándonos solo en nuestro juicio.

Además de eso, si creaban esclavos que pensaran por sí mismos en vez de que obedezcan solo cuando son azotados, tendrían un valor más alto y serían más fáciles de controlar. No le gustaba del todo esa forma de pensar, pero al menos los niños no sufrirían más de lo que deberían, y eso dejaba a Tn__ un poco más tranquila, lo que a su vez dejaba tranquilo a Sinbad.

—¡¿Acaso estás diciendo que la forma en que hago las cosas está mal?!—Cuestiona Fátima furioso tomándolo del cuello de su vestimenta.

—Solo estoy diciendo la verdad—Contesta Sinbad manteniendo la calma.