Seis

4 2 2
                                    

La comida del día anterior le había caído como patada al hígado, en este momento se encontraba en su casa demasiado intranquilo. Una parte de el que no conocía estaba comenzando a surgir, su lado FBI, por casi dos horas había estado revisando a fondo cada contacto que el omega seguía en las redes sociales solo para poder dar con el sujeto de la noche anterior.
Talvez si le hubiera hecho caso a su madre en el mismo instante que le sugirió que se acercara como una persona normal y simplemente preguntara, ahora no se sentiría con un humor de mierda. No encontró al sujeto que buscaba, talvez la foto de perfil era diferente, pero le agrado encontrar a su escritor favorito al cual obviamente seguía, que buen gusto tenia el omega. Al pensar en el omega de cabello verde se le escapo una sonrisa, era un niño rico mal criado el cual preferiría morir antes que vestir sencillo pero para el rubio eso no era problema.
- Si me sigo estresando me saldrán arrugas-suspiro tomando su celular decidido a escribirle aunque su impaciencia causo que apretara el botón de llamar, ya era tarde para colgar cuando una vocecita alegre le respondió-
-creo que te llame con la mente
-¿en serio?
-mira por tu ventana-el rubio se acerco al balcón del segundo piso de su casa y vio al chofer de Izuku estacionando afuera de su casa-decidí pasar a molestarte-decía mientras bajaba del auto
-supongo que tendré que cocinar para ti también-dijo en un tono serio aunque por dentro se sentía feliz de tenerlo para el-¿tienes la copia de la llave aun? Entra entonces
Un momento después el aroma del omega lo invadió, y eso que apenas había cruzado la puerta.
-maldición Izuku-tapo su nariz algo sonrojado- no hagas eso ¿intentas seducirme?
-¿no esta funcionando?-dijo mientras se acercaba y se arrojaba a sus brazos para darle un abrazo restregando su rostro en ese enorme pecho- te extrañe rubio tetón
-que no me digas así maldita sea-pero en lugar de sonar enojado soltó una gran carcajada, sabia que incluso lo tenia agendado así en su celular-no se te ocurra decirme así en publico maldito niño rico-le dio una nalgada que provoco un gemido del omega, Bakugo no se dejo provocar por eso, decidió castigarlo dejándolo sin atención- tengo que preparar la comida
-eres malo
-yo no soy quien estaba en una cita con un idiota de cabello blanco ayer-sus celos ganaron y lo habían dejado al descubierto-em…ayer fui a comer con mi madre, te vimos con un albino-su mirada estaba apagada, ni siquiera sonaba arrogante como hacia unos minutos atrás-¿te están cortejando?
-¿Qué? No que asco-soltó una risita-Tenko es mi primo, por parte de mi padre-Bakugo se sentó en el sofá entonces Izuku aprovecho y se sentó en su regazo-trabajamos en la misma empresa así que a veces comemos juntos-apoyo sus pequeñas manos en los hombros del alfa notando lo tenso que estaba, entonces comenzó a masajear esa zona-nadie esta cortejándome, el alfa que quiero que me corteje es un poco idiota y me respeta demasiado, desearía que me deje como trapo de piso y me reclame como suyo-se sonrojo y nuevamente solo un poco de sus feromonas- ¿Por qué no estas cortejándome estúpido? ¿no tienes huevos para hacerlo?-el rubio lo miro sorprendido pero se rio-no te rías-le dio un golpecito-lo digo en serio, eres el alfa. Me cogiste, hazte cargo
-discúlpame pero quien se aprovecho de mi fuiste tu-su sonrisa se borro y soltó un suspiro-no me siento preparado para estar en una relación en este momento, cuando este preparado lo hare, te cortejare
-cuando tu estés preparado, probablemente yo este interesado en alguien mas-se paro de sus piernas con mal humor-lo siento, te hice perder el tiempo y también estoy perdiendo el mío-tomo su bufanda-disfruta tu comida
-Izuku por favor-tomo su mano-hablemos
-no tengo nada que hablar, quieres tu tiempo, lo tendrás pero no me hagas una escena si alguien se interesa en mi y me da la oportunidad de quererlo y cuidarlo-se acomodo su abrigo- me hubiera quedado en casa escribiendo
-creí que corregías-lo miro extrañado-
-es la misma mierda
El omega no cambiaria de parecer así que el rubio tomo su abrigo y lo siguió metiéndose en el auto de él sin permiso.
-¿Qué haces? Bájate, me iré a comer con mi padre, el si me consiente y me cumple todos los caprichos
-bueno entonces yo comeré con ustedes dos-tomo la mano del omega-conduce por favor-el chofer solo asintió con la cabeza y luego de unos minutos llegaron al banco central.
- cuanta seguridad-dijo sorprendido mirando a los uniformados-
-si, desde que eso paso mi padre prefirió evitar otro ataque como ese y contrato a personas recomendadas por tu jefe, al parecer son muy eficientes…Hey me gustaría que me cuentes mas-no se animaba a continuar hablando-del porque estas tan reacio a estar en una relación-unos tacones comenzaron a sonar mas cerca de ellos, una voz los interrumpió, y una gran mano tomo la pequeña del omega apretándola con fuerza-
-¿Bakugo?-esta le sonrió-que gusto verte
-¿Qué haces fuera de tu puesto de trabajo? Deberías estar atendiendo las citas de mi padre-Izuku y Ochaco no habían tenido el mejor comienzo y sumando que el omega era muy resentido, le mostraría quien manda ahí, y le haría ver que ella no pertenece a ese mundo-esta incompetente es la nueva administradora
-Ochaco-no pudo decir mas porque el rubio ensucio los bonitos zapatos de diseñador de Izuku con su vomito-
-mierda, Bakugo ¿Qué sucede? Inútil-mirando a la joven- ve a traer algo para limpiar, y tráele algo de beber ¡rápido!   
Un rato después ambos estaban en una de las oficinas, el omega le había conseguido algunas pastillas para el mal estar y un poco de comida por si la presión le hubiese bajado, el alfa estaba acostado en el largo sofá de cuero bordo.
-¿comiste algo que te callo mal?
-no, no es el caso-sus ojos y frente estaban cubiertos por un paño húmedo que el omega le había puesto por si debía bajar su temperatura, quería ser precavido con todo-esa chica
-la inútil ¿si, que sucede?
-ella… es mi ex, la razón por la cual no quiero nada con nadie ahora-la sangre del omega se helo, no sabia como reaccionar, no quería ponerse mal así que prefirió escucharlo-
-cuéntame.
      

Lo quiero para miDonde viven las historias. Descúbrelo ahora