Lo quiero para mi

Tres

-¿Estas seguro de que puedo estar aquí?-Izuku estaba al volante del auto de Bakugo, el cual había conducido ya que el rubio aun no podía hacer movimientos bruscos con su hombro y brazo-aun me siento algo nervioso por haber conducido, no es algo que haga yo-el rubio puso los ojos en blanco-¿Qué? Mi chofer lo hace por mi

-Mi madre esta celebrando que cerro un buen trato con una empresa, o algo así. No preste mucha atención, insistió que viniera -señalo su corbata-acomódala, la deje algo torcida, sabe que prácticamente me he vuelto un inútil...por lo menos hasta que me recupere del todo-suspira agotado-

-alguien que salvo la vida de mi padre no puede ser un inútil, alguien que me dio una de las mejores cogidas de mi vida tampoco puede ser un inútil-ese comentario le hizo soltar una carcajada al rubio-vamos-al bajar notaron otros autos-¡me dijiste que seria una reunión intima!

-no te mentí-tomo su bastón para ayudarse, con la bota ortopédica se le dificultaba estar en pie-solo seremos mi madre, nosotros, mis tíos y su nuevo socio...me dijeron que es un viejo amargado

Caminaron a la puerta, no esperaron a que nadie les abriera pues Bakugo tenia las llaves. Al entrar una bestia rubia de ojos verdes se lanzo sobre el hijo de la dueña de la casa haciéndolo caer al suelo mientras ladraba animadamente y le lamia el rostro. Izuku se asusto al ver al enorme perro Pitbull pero se relajo cuando vio reír a su acompañante, de hecho se sorprendió bastante, no era un hombre que derrochara simpatía con las personas.

-hijo -la señora Katsuki se acerco para ayudarlo- Amira, ya déjalo

-mamá ella me puede besuquear todo lo que quiera-con ayuda de su madre se paro-Izuku me acompañara esta noche, espero que no te moleste

-no puedo molestarme con el joven que ayuda al idiota de mi hijo-Izuku se rio para si mismo al ver la cara que había puesto-tus tíos están aquí con tu primo

-¿vi su auto afuera, pero de quienes son los otros autos que vi?

Pasaron a la sala donde el hermano de su madre junto con su esposa estaban, aunque no estaban solos. Un hombre bastante alto y corpulento también se encontraba conversando con ellos, su cabello rojo y ojos azules hacían que su rostro se viera mas intimidante de lo que talvez era, el joven a su lado claramente era su hijo, era su viva imagen pero con un simple detalle, solo uno de sus ojos eran azules, y la mitad de su cabello estaba teñido de un tono claro, su expresión era de aburrimiento. Estaba claro que solo estaba ahí por obligación.

-tíos -Bakugo se acerco a ellos, su tía preocupada le dio un fuerte abrazo- tía, tranquila estoy bien

-¿Cómo dices eso muchacho?-dice su tío- mira como estas, podría haberte pasado algo peor-dejo de hablar y miro al joven de cabello verde junto a el- y este jovencito ¿es tu omega? Bakugo ¿Cómo no nos diste las buenas noticias? Ya estábamos pensando en arreglarte un matrimonio con tu primo

-no, el no es...el solo me esta ayudando mientras me recupero...un gusto soy Bakugo -quiso zafarse de la incomoda charla con sus tíos así que saludo al pelirrojo que había estado ignorando-¿usted es el nuevo socio de mi madre?

-así es jovencito-su fuerte mano apretó la del rubio-soy Enji Todoroki, es un gusto, y este es mi hijo menor, Shoto -Shoto sin decir palabra le estrecho la mano y luego a Izuku- también vino mi hijo mayor, debe estar en el jardín, no es muy sociable-le sonrió-

Luego de que ambos conversaran con los invitados, decidieron alejarse un poco, increíblemente Shoto no se les unió, ambos pensaron que por ser joven también querría unírseles, pero se notaba bastante cómodo conversando con los demás.

-me encantan los jardines grandes, sobre todo si tienen arboles de cerezos y ¿ahí que hay?

-es nuestro jardín de invierno, si queremos estar afuera de la casa pero hace frio, podemos estar ahí cómodamente, creo que el jardinero se olvido de cerrar la puerta, acompáñame-Izuku lo tomo de su brazo y camino a su lado. Al entrar un fuerte aroma invadió las fosas nasales de ambos- pero que...-un gruñido los hizo guardar silencio, al adentrarse mas pudieron ver a alguien de cabello oscuro y con pircings sentado en uno de los sillones mientras su acompañante estaba de rodillas llenándose la boca a modo de festín-maldición ¿pero que mierda es esto? ¡Maldito pervertido suelta a mi primo! Yuuri, aléjate de el ¿estas bien? -lo tomo del brazo levantándolo- maldición estas en celo ¡Y tu te aprovechaste!

-no...Bakugo, el no me obligo a nada...yo se lo pedí...lo necesito-apretó el brazo de su primo-por favor, mis padres me estresan demasiado, necesito liberar estrés

El vio a su joven primo y luego miro al otro moreno con mala cara. Conocía esa necesidad de querer liberar estrés a través de una buena cogida, la había tenido estas ultimas semanas con Izuku, pero no había mucho que pudiera hacer por culpa de sus lesiones por eso prefería comportarse y empastillarse con supresores para no saltar sobre su acompañante. Tomo su billetera y de ella saco una tira de cinco preservativos- lo embarazas y te juro que te mato, y tu estúpido-miro a su primo- cierra mejor la puerta ¿quieres que los demás te vean?

-eres el mejor -tomo los preservativos y abrió uno de los paquetes, sin esperar que su primo y acompañante salieran, se inclino para colocárselo con la boca a quien estaba sentado

-que habilidad-dijo Izuku pero Bakugo le cubrió los ojos, lo tomo de la cintura y lo saco de ahí. Hey yo quería ver el show-se rio-tienes una familia interesante...siempre llevas preservativos contigo eh

-claro que si, nunca se sabe cuando se presentara una buena oportunidad, y como te dije, no quiero niños

-pensaba usarlos conmigo-le dijo coqueto-¿tienes miedo de que tenga a tus hijos?

-que horror, no tendremos hijos ya te lo dije- se quedaron en el jardín conversando y compartiendo un cigarro que el rubio había tomado de su bolcillo, ambos preferían llenarse de ese aroma para no sentir el exceso de feromonas que circulaba en el aire.