🍃Cap.18 Segundo enfrentamiento🍃

858 58 7
                                    

POV _________

Me estaba despidiendo de Sanemi, dentro de unos minutos él tendría que irse a trabajar, y yo me quedaría recogiendo un poco la casa, aunque Sanemi no quiere que haga el más mínimo esfuerzo, ya que dice que hago demasiado trabajo cargando a nuestro hijo en mi vientre, y no quiere que me sobrepase porque dice que puede pasarnos algo al bebé o a mí.

Sí, es algo sobreprotector, pero lo entiendo, es padre primerizo, y lo único que quiere es cuidarnos al bebé y a mí, y por eso lo amo, a pesar de su cara de amargado, es el hombre más dulce que he conocido.

—Ya tengo que irme, —habló tomando su maletín y acercándose a mí para besarme —la próxima semana pediré días libres para poder cuidar al bebé y a ti, —puso la mano libre que tenía en mi vientre —falta poco para que se cumplan nueve meses y en cualquier momento puede nacer nuestro hijo, si te sientes mal o pasá algo no dudes en llamarme

—Sí, lo sé, todos los días me lo dices, pero tranquilo, nuestro hijo y yo estaremos bien. —puse mis manos en sus mejillas y deposité un beso en sus labios —Te amo

—Yo también te amo, preciosa, —volvió a poner su mano en mi vientre —y a ti también. —dijo dirigiéndose al bebé, por lo que ladee una sonrisa —Nos vemos en la tarde, adiós —y salió de la casa

(...)

Acababan de tocar el timbre de la entrada de la casa, lo cual se me hizo extraño, ya que habían pasado como unas 4 horas desde que Sanemi se fue, y si algo se le hubiera olvidado desde hace rato se habría regresado, por lo que supuse que era un vendedor.

Así que fui a abrir la puerta, sin embargo, no era un vendedor...

—Giyu. ¿Qué haces aquí?

—________, —volteó a ver mi vientre y después me miró, otra vez —¿puedo pasar?

—No, no puedes, no eres bienvenido en esta casa

—Tenemos que hablar

—No es así, no tenemos nada que hablar

—Por favor, ________, solo serán cinco minutos, no te quitaré más tiempo —dudé en responder pero al final accedí

—Solo tienes cinco minutos —dije haciéndome a un lado para que pudiera entrar a la casa

—Gracias... —entró y volvió a verme mientras cerraba la puerta —Así que... Estás embarazada

—Sí, a diferencia de ti, Sanemi quiso seguir intentando tener un hijo conmigo y aquí está —mencioné mirando mi vientre y acariciándolo

—Ya veo. Pues, me alegra mucho por ti que por fin hayas quedado embarazada aunque no sea de mí

—Si no quedé embarazada de ti, fue porque tú así lo quisiste y en vez de seguir intentándolo decidiste mejor estar con otra mujer que es completamente seguro que puede tener un hijo

—Lo sé, —agachó su mirada mirando al piso y después levantó la mirada —y no sabes cuánto me arrepiento de eso

—¿A qué te refieres? —pregunté por su rara confesión

—Pensé que con Shinobu sería feliz teniendo un hijo, pero después de todo este tiempo que hemos estado separados, he llegado a la conclusión de que contigo lo tenía todo; eras una buena esposa, siempre fuiste cariñosa conmigo a pesar de que yo era cortante contigo, siempre estuviste apoyándome en todo, eras lo mejor que tenía y aún así te traté de la peor manera posible

—Me alegra que te estés dando cuenta del gran dolor que hiciste que padeciera, y si lo que buscas es que te perdone, te perdono

—Gracias... Entonces, ya que me perdonaste, ya podemos estar juntos

—¿Disculpa?

—Voy a volver, cariño —se acercó a mí con intenciones de besarme pero rápidamente lo empujé

—¿Qué mierdas te pasa?, ¿Acaso no ves que estoy casada y estoy esperando un hijo de Sanemi? —cuestioné mirándolo completamente enojada

—Lo sé, pero como ya me perdonaste eso significa que volveremos a estar juntos

—No te equivoques, que yo te haya perdonado no significa que tú y yo estaremos juntos. Soy feliz al lado de Sanemi, me da mi lugar como su esposa y vamos a tener un hijo juntos

—He cambiado por ti, cariño, puedes divorciarte de Shinazugawa, y si volvemos te daré el lugar que mereces, y aunque ese bebé no sea mío, lo trataré cómo si fuera mi hijo, solo por ti, para que estemos juntos

—Eres un imbécil de verdad, ¿cómo te atreves a pedirme que me divorcie de Sanemi?, ¿No estás escuchando que soy feliz con él?, Y este bebé que estoy esperando ya tiene padre y es Sanemi, además, ¿qué pasa con Shinobu?, ¿Vas a dejarla sola con tu hijo?

—Las cosas con ella no están funcionando, en cambio, contigo nuestro matrimonio funcionaba a la perfección

—Tú mismo lo has dicho, funcionaba, porque tú y yo ya no somos absolutamente nada, y si solo viniste a eso, vete de mi casa

—_________, escúchame... —calló sus palabras puesto que lo interrumpí

—¡Que te vayas de mi casa!, —exclamé señalando la puerta pero en ese momento sentí un gran dolor en mi vientre —Agh —agarré mi vientre sintiendo el dolor cada vez más fuerte, hasta que sentí como un líquido escurría por mis piernas, y vi el líquido transparente esparciendose en el piso

Espera...

¿Dolor en mi vientre? Contracciones 

¿Líquido transparente? La fuente

Voy a dar a luz. Pero se supone que el parto sería hasta la próxima semana

—________, ¿qué está pasando? —preguntó Giyu, mirándome aterrorizado

—La fuente... —hice una pausa para respirar —La fuente se rompió, el bebé ya va a nacer, —Giyu no reaccionó y solo se quedó tieso en su lugar —¡Reacciona! Llévame al hospital —pareció reaccionar, y acató mis indicaciones, ayudándome a salir de la casa con mi bolso en la mano y mi celular, y ayudándome a entrar a su carro

Comencé a marcarle a Sanemi, esperando que no estuviera muy ocupado y pudiera contestar.

________, ¿Qué pasa?

—Sanemi, rompí fuente, el bebé viene en camino

... No te muevas, voy a la casa para que vayamos al hospital

—No, ya voy de camino al hospital, ahí te veo

—¿Quién te está llevando? lo escuché en su voz un tanto desconcertado

—Eh, es una larga historia, solo ve a la casa por las cosas del bebé

Está bien, ahí te veo —y colgó la llamada

SEGUNDA OPORTUNIDAD-Sanemi x tú Donde viven las historias. Descúbrelo ahora