UNEXPECTED

CAPITULO 2

*

Aunque Verónica pueda que tenga razón es algo que no me interesa, si existiran personas totalmente iguales físicamente pero con su propio estilo.

Y digo que no me interesa por qué hace un mes exactamente salí de una relación tóxica, es así por sus celos y créanme que hasta con mis amigas por qué pensaba que ellas me presentaban hombres, ¿Que loco no?

Cuando ellas quieren que sea yo quien les presente a esos niños de papi y mami, egocéntricos lo digo por que su padre es así, un señor muy guapo, elegante con porte, con unas facciones muy bien proporcionadas, la verdad parecen talladas por un Dios griego.

- ¿Ese es tu carro?

- am, si ¿Por qué?

- Entiendo, quedaste en el primer lugar este semestre, otra vez - añade Verónica tomando de su bebida.

- ¿Un BMW? Eso fue lo que pediste?

- Si Alice, no iba a pedir un Ferrari - abri la puerta de mi auto y tire mi maleta adentro - ¿Que no está bonito? - dije sin tanto ánimo.

- Bromeas cierto, es hermoso, pero si hubieras pedido al menos un Mercedes - Alice rodea mi auto

- Es que no, desde lo que me pasó una vez, decidí que mejor no, ¿Te imaginas estrellar un Mercedes? Ese si me dolería en el alma.

Mis amigas ponen cara sería entre cerrando los ojos, y dicen al unísono - Creída de mierda.

Reímos*

- Buenas tardes señoritas, La rubia, la pelo negro, y la castaña, bienvenidas a Starbucks¿la misma orden de siempre?

Reimos - Hola Max, por supuesto - casi siempre que salimos de la escuela venimos aquí, así que ya conocen nuestra orden hasta cuando alguna falta a clase nos preguntan aquí por ella.

- Entonces¿Que van a hacer esta semana que viene de descanso?

- Me encantaría ser la asistente de tu papá - dice Alice con una voz suave y recarga su cabeza en su mano para mirar hacia la nada como si hablara de un sueño.

- Y yo también, me daría por bien servida si soy la que limpia los pisos de esa empresa

- Definitivamente están locas.

- Si ya sabemos, no harás eso por nosotras, pero al menos déjanos soñar - dice Alice haciendo sonar tu bebida.

- A ver, enserio ¿por qué dices que no lo harás? Es para nosotras no te estamos diciendo que te los cojas o te cases con el.

- Si niñas lo se, solo que saben que odio la gente super creída.

- Y que tal ¿no lo sean?

- Si, Vero tiene razón

- hablo por su padre, ok - digo

- Si pero qué tal ellos no sean así.

- Mira rubia, trata de hacerlo por nosotras, y si lo haces haré tu tarea por un mes - habla una Alice ilusionada me habla de esa manera por qué sabe que le voy a decir que no .

Pienso por unos minutos, claramente es algo que no quiero hacer pero siempre he hecho lo que esté a mi alcance por ver a mis amigas felices - Está bien, tratare.

- ¡Si! - las dos gritaron dando un salto de sus sillas haciendo que todos nos vieran de forma rara.

- Megan te amo - Alice me besa toda la cara desesperadamente - solo háblale y miras la forma de presentarme, así sea en la madrugada allá llegó.

- Ok, a esa hora no creo que pase, ya estás muy loca amiga, yo duermo no soy un búho.

Después de dejar a mis amigas cada una en su casa, me dirijo a la mía me encanta manejar con música y bailar en el asiento.

Voy a cruzar el semáforo cuando escucho un ruido horrible y siento que chocó, salgo de el auto y veo la farola totalmente dañada y una parte de mi auto hundida, me van a matar, mi papá me va a matar un día con este auto y ya lo que hice.

Me cojo mi cara de la desesperación, hasta que veo que un rolls Royce es quien me chocó, y ese si está intacto.

- Se puede saber ¿Que estaba pensando pedazo de imbécil? Mire como me dejó mi auto, no sabe manejar, no entiende que cuando el semáforo está en rojo es para que pare.

Aparece un chico, alto, cabello negro, una piel hermosa, bien vestido de traje, sus trenzas hacia atrás y lentes de sol oscuros, hasta aquí puedo oler su caro perfume.

- ¿Se puede calmar? No es para tanto niña, ¿Se golpeó? ¿Está herida? No cierto.

- Mire idiota - señale el golpe en mi auto - Esto lo paga usted.

- ¿Yo?

- Si, si tiene ese auto pues divinamente puede pagar el daño que ocasionó el que tiene para el whisky tiene para el hielo.

- Puedo pasar en rojo niña, hasta la policía sabe eso, por qué crees que no han llegado - Mira hacia los lados, su tono de voz de superioridad me está colmando la paciencia cada vez más.

Este se cree el presidente, o que.

- No me importa baboso, me pagas el arreglo del auto - Me acercó más y es muy lindo, a decir verdad es muy guapo pero esa cara se me hace familiar, nunca lo había visto pero siento que si.

- Pues si tienes un BMW, debes tener para el hielo también.

- No lo hice yo, fuiste tú tarado imprudente, así que me pagas esto - estire mi mano haciéndole entender que me diera dinero.

- Aquí no tengo dinero - saca una tarjeta blanca y me la da - Ve a esta dirección, pregunta por Austin mi asistente, el te dará el dinero para tu arreglito.

Le arrebató la tarjeta y me subo rápido en mi auto y lo miro mal para al final mostrarle mi dedo del medio.

Besos 💋