Love across dimensions [GoYuu~KakaNaru]

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Comunicado oficial de los altos mandos de la hechicería.

1. Se confirma que Suguru Geto sigue con vida. Se pone en efecto nuevamente la orden de su ejecución.

2. Se designa a Satoru Gojo como cómplice del autor intelectual del incidente de Shibuya, y se exilia permanentemente del mundo de la hechicería. De igual manera se determina que cualquier intento de liberarlo de su prisión se designa como un acto criminal.

3. Se autoriza la pena de muerte para Masamichi Yaga de instigar a Satoru Gojo y Suguru Geto a perpetrar el incidente de Shibuya.

4. Se cancela la posposición de la ejecución de Yuuji Itadori y se ordena que se lleve a cabo de inmediato.

5. Se asigna al hechicero de grado especial Yūta Okkotsu como verdugo de la ejecución de Yuuji Itadori.

Esas fueron las órdenes que dieron los altos mandos para todo aquel que tratara de ayudar a Gojo sensei a salir del sello. Ahora entendía muy bien la aberración que sentía el albino cuando se refería a esas personas.

Serían tachados de criminales si intentaban romper el sello aunque pensándolo bien. ¿Qué más daba? ¿Había algo más que perder? El mundo que conocía había dejado de existir, ahora era un peligro acercarse a la gente que apreciaba. En cuanto los altos mandos se dieran cuenta que seguía con vida enviarían a alguien más a hacer el trabajo.

Yuuta Okkotsu. Un alfa de segundo año y del que había escuchado hablar por Panda y Maki había sido enviado para ejecutarlo.

Para el mundo de la hechicería, Itadori Yuuji recipiente del rey de las maldiciones Ryomen Sukuna había sido ejecutado.

Yuuta le explicó que matarlo era necesario y que fue una orden a la que no pudo oponerse de lo contrario Inumaki, su omega pagaría las consecuencias. Pero gracias a su ritual inverso pudo reanimarlo.

Sonrió cuando recordó a Yuuta contándole que Gojo había hecho un viaje a Kenia para pedirle protección en caso de faltar. "Alfa bobo" pensó con una lágrima escurriendo por su mejilla.

¿Acaso él intuía ya esa situación?

Por supuesto. Le recriminó su subconsciente. De alguna manera buscarían deshacerse de él y más ahora que Gojo estaba sellado y no había ningún impedimento para que eso sucediese.

Trató de enderezarse en el pequeño futón. El pecho aún dolía un poco pero nada que no pudiera soportar.

-¡Yuuji! - gritó Choso acercándose al pelirosa - no te muevas, aunque usaron un ritual inverso todavía estás muy débil. Has estado inconsciente durante tres días, tómatelo con calma.

- Estoy bien - replicó a quien se había denominado como su hermano mayor.

- ¿Cómo te sientes Itadori? - preguntó Megumi a su amigo.

Estaban en lo que parecía los escombros de un departamento abandonado. Un lugar perfecto para esconderse.

- Estoy bien, ya se los dije -

- De ser así entonces hay que hacer un plan - mencionó Yuuta acercándose a los otros tres - Los viejos no tardarán en darse cuenta que Itadori sigue con vida, necesitamos movernos. Mis contactos dicen que tienen el reverso del cubo donde Gojo sensei está sellado y está en la escuela.

-¿Que hay de Suguru Geto?- preguntó Megumi.

- Debido al incidente que provocó en Shibuya Geto ahora es buscado, hay maldiciones por todo el país, no hay suficientes hechiceros y aún así los altos mandos no permitirán que saquen a Gojo del sello, si alguien intenta hacerlo será tratado como un criminal, no importa que sea un estudiante.