¿Amigos?

Lindo Dia

Mi alarma de mi celular suena. Estiro mis brazos, dando un pequeño giro y caigo al piso. No recordaba que estaba acostada en el sofá. Me quede un rato en el piso viendo la tele apagada.

Me levanto rápidamente y doy camino al baño. Tomo un baño, cepillo mis dientes y salgo para cambiarme. Un vestido color azul claro, suelto y que me llegaba hasta las rodillas y unas zapatillas del mismo color.

Bajo las escaleras

–Buenos días

Dije mientras me sentaba en la mesa

–Buenos días querida.

Desayune y salí para no llegar tarde a el instituto. En medio del camino me detuve y mire al cielo. Me cayo una gota en la nariz. ¡Genial!.

Me quites las zapatillas y las entre en la mochila para empezar a correr hasta el instituto o hasta un lugar donde pueda esperar a que pase la lluvia. Llegue al instituto super, super tarde por ende me dejaron fuera de clase. Estaba sentada en el pasillo, por suerte no me había mojado tanto, qué lindo día no?

–Hey, veo que también te dejaron fuera banana.

–Si

Suspire al recordar la tontería que había hecho anoche.

–Oye.–dijo sentándose junto a mi en el piso.–Una pregunta.

–¿Si?

–¿Yo te gusto?

Dijo y subió sus ojos hasta encontrarse con los míos. Baje rápidamente mi rostro ya que sentía como ardía.

–¿Qué clase de pregunta es esa?

Salió una risa nerviosa.

–Se por un pajarito que, te pusiste celosa tras verme con Cara aquel día.

Celos, celos, celos. Pajarito llamado Jade...

–No me puse celosa... Me enoje porque ella es una perra, me dejo el labio partido y...

–Solo la ayude, estaba mojandose en la parada de autobús, llorando.–Me interrumpio.–Basta de celos.

El acaricio mi cabello mojado y coloco un mechón detrás de mi oreja. Baje la cabeza para evitar mirarlo a la cara. Soy una estúpida y el no debería de ser tan bueno conmigo. El se acerco para darme un beso en la frente ¿Por qué? Después de lo de anoche ¿Por qué no me trataba como mierda?

–Tu si me gustas.

Dijo Adan de repente. Lo mire a los ojos sorprendida.

–Ya pueden entrar a clases.

Dijo el viejo ese arruinado el momento. Entramos y nos sentamos junto a Jade. Adan no dijo ni una palabra y yo menos.

Al salir de clases, Jade corrió y decidió que no la lleváramos porque prefería "caminar" era obvio que quería dejarnos solos.

Adan y yo caminamos hasta el auto y empece a saltar en los charquitos de agua. Di un salto tan fuerte que le salpico algo de lodo a Adan. Lo mire sorprendida y se miró la camiseta, luego me miró y susurro "será mejor que empieces a correr" me reí y él empezó a correrme por todo el estacionamiento hasta que me alcanzo.

–¡Te tengo!

Me sujeto la muñeca.

–Sueltame, no fue a propósito.

Dije y el me tomó de ambas manos y me acorraló hasta que mi espalda choco el auto.

–Hmm, te suelto si me das un beso.

Lo mire con los ojos abiertos. Tragué saliva, y él soltó su agarre para aferrar ambas manos en mis caderas.
Cerre los ojos ante su caricia, sus labios se estamparon con los míos, me besaba lentamente haciéndome estremecer. Mi corazón latía con fuerzas. No lo podía creer.

Tome su cuello profundizando el beso, el pasa su manos por mi cintura hasta llegar a mi trasero y dar un ligero apretón. Suspire entre sus labios.

¡Por fin me beso! Era lo que tanto esperaba y por fin se dio pero... Jessse.

Sus manos atraparon mi rostro y despegó nuestros labios y junto su frente con la mía. Sonrío y corrió hasta la puerta del piloto y subió al auto, yo hice lo mismo.

Me dejó en casa y al bajarme le sonreí y agite mi mano en forma de despedida.

–Mamaaa

Grite al entrar a casa y me sorprendí al escuchar la voz de mamá.

–Estoy en la cocinaa

Grito igual y fui hasta allá. Asome mi cabeza y la vi sentada en frente tenía muchos papeles

–Estoy trabajando en un caso de divorcio.–dice mirando sus papeles.–Padre abusivo no se puede quedar con la custodia pero madre tampoco es perfecta, no sé que hacer. Le ofrecerle a la chica quedarse en casa...

No me sorprende mamá tiene un gran corazón en estos temas.

–Sabes que por mi no hay problema mamá.

–Gracias por ser tan comprensiva.

Me sonrió. Le acaricie el cabello.–¿Como es su nombre? ¿Es de mi edad?

–Mañana la conocerás. Ahora a cenar  que esta tarde.

La verdad estaba temprano todavía, pero ya que estaba muy cansada subí a mi habitación le deje un enorme texto a Jade de todo lo que había pasado y me dormí.