CAPÍTULO XXI

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⚠️ADVERTENCIA⚠️

IMPORTANTE: Esta historia contiene lenguaje obsceno, escenas de violencia explícitas, contenido sexual para mayores de 18 y continuar leyendo será bajo tu responsabilidad. Sin embargo TODO es FICCIÓN, es parte de una imaginación loca, con pensamientos un tanto perversos que lo que quiere es entretener con las ideas locas que a una escritora se le ocurren.

Sin más que decir. DISFRUTEN.

AZAHEL CLARK

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De nuevo ha pasado, una vez más he cometido la estupidez de abalanzarme a ella para besarla. ¿Qué jodida mierda es lo qué me pasa? Me separó con brusquedad haciendo que se tambalee de forma que tiene que sostenerse de la cama. Le doy la espalda para que no vea lo que verdaderamente me ha afectado este beso una vez más.

— Te llevaré a tu casa si es lo que quieres — apenas y la miro por encima de mi hombro — Pero, no te voy a dejar sola ¿Entiendes?

— No tienes que cuidarme Azahael — una vez más dice mi nombre, pero está vez suena diferente, su tono de voz ha bajado y no se escucha tan agresiva — Solo dejame en la puerta y desaparece de allí.

No estoy de acuerdo con ella, a pesar de que tengo en mi poder a Vasílien, sé que cuando se enteren de todo esto vendrán por ella, quieren terminar lo que ese miserable le ha hecho y no puedo aceptarlo.

— Crowell está vivo — intento cambiar de tema, para que se olvide que la voy a dejar sola. Además, se cuanto le interesa que lo mencione — Lo tengo encadenado y escondido, para torturarlo ¿Te gustaría ir a verlo? — me vuelvo hacía ella y a pesar de que lo que digo parece que la ha emocionado, sigo viendo ese brillo en su mirada.

— Tienes que saber que si lo tengo al frente, voy a matarlo — asegura con tanta determinación — No me importa lo que le has hecho, ni cuantas descargas eléctricas le has metido por el culo — apretó los labios, pero no puedo evitar reirme con esté último comentario.

— Aún, no le he metido nada por el culo a nadie — la miro fijamente y creo ver como quiere formar una pequeña sonrisa en sus labios.

— Es bueno saberlo — es lo único que dice y relaja los hombros sentándose sobre la cama.

Tomo un poco de aire y pienso si dejarla sola en la habitación para hablar con Louis, o enviarle un mensaje para aclararle que todo está bien. Pero, ella parece cerrar los ojos como si estuviera verdaderamente cansada y de algún modo la entiendo. No hablamos del beso, ella no lo menciona y parece que ha hecho como si no hubiera pasado. Una parte de mí lo agradece, ya que he sido yo quien ha tenido la osadía de besarla una vez más en contra de su voluntad. Pero, esa otra parte de mí, la arrogante por supuesto, se cuestiona que ninguna mujer se ha resistido a sus besos entregándose a mí en un segundo.

Sin embargo, estoy hablando de Emma Dalton, la chica que aparentemente tiene una doble vida, no le tiembla la voz al decirme que quiere matar a un ruso mafioso como lo es Crowell, si no que ha tenido una puta mala experiencia con la basura de Vasíliev.

— Puedes salir que no voy a escaparme — dice con los ojos cerrados, cuando se percata de mi impaciencia — Por favor dile al imbécil de tú amigo, que la próxima vez que me hable así o me toque, lo mato — ahora no ocultó la sonrisa y dudo antes de irme, pero veo las posibilidades que tiene de escapar de aquí.

— Si te sirve de algo, estamos en un piso muy alto — le aclaro — Si saltas, seguramente te volverás mierda.

— Lo tendré en cuenta — ahora es ella quien me regala una sonrisa traviesa y que no oculta para nada.

Salgo de la habitación, no sin antes darle un último vistazo a la mujer que descansa sobre la cama, con los ojos cerrados y aparentemente tranquila. Cierro la puerta una vez que salgo y como no confío en ella, le paso llave es pura mentira que estamos en un piso alto, la verdad es que la he traído a mi casa luego de que el médico la revisará y me dijera absolutamente todo lo que sucedió. Aparto esos pensamientos, porqué lo único que me provoca ahora mismo es ir a ver a ese hijo de perra y que me explique qué demonios estaba pensando.

— ¿Se ha calmado tu novia? — dice Louis, sacándome de mis pensamientos.

— Si, esta descanzando — me paso las manos por el cabello — Y no es mi novia, ya deja de joder con eso.

— Por Dios, tienes que ver la cara de imbécil que pones cada vez que se habla de ella — bufa — Acéptalo de una vez amigo, esa chica te está cambiando.

— Ella, no me está cambiando Miller — me le acerco apretando mis manos en puños — Ahora dime donde mierda está Vasíliev.

— Lo tengo en la otra habitación — sigo de largo y me toma del brazo cuando ve que sacó el arma de mi bolsillo.

— Azahel, las cosas no pueden pasar de esta manera — me suelto de su agarre con brusquedad, no puedo creer que me esté diciendo semejante tontería — Si los rusos se enteran, vendrán por ti.

Quiero reirme de lo que dice, sabe perfectamente el problema que tengo con esos hijos de perra. Pero, ninguno han venido por mí porque saben perfectamente quien soy y de lo que soy capaz.

— ¿De verdad crees que vendrán por mí? — preguntó con ironía — Por favor Louis, no creo que seas tan estupido como para no darte cuenta que una vez muerto Vasíliev, es a mí a quien le deben total respeto — levanta las cejas como si le costará creerse lo que digo.

— No es seguro que lo mates amigo — lo ignoro y sigo directo a la habitación donde está metido

— Tu no sabes lo que tengo pensado hacerle a ese hijo de perra.

— ¡Ya tienes a Crowell, déjalo así! — me grita y no puedo evitar voltearme y agarrarlo por el cuello de su camisa.

— Te lo voy a decir una sola vez — le gruño en la cara — Yo hago lo que me sale de los cojones Louis y Crowell está muerto desde hace tiempo.

— Azahel...

— Y no te preocupes por la rata miserable de Vasíliev — apretó más el agarre que tengo en su camisa sacudiendolo — Un hijo de perra como él, que ha abusado de una chica, no se merece absolutamente nada mejor que un disparo en la frente.

Me mira como si no pudiera creer lo que digo y aunque ya sospechaba lo que había sucedido, él no estuvo allí cuando el doctor me contó absolutamente todo lo que Emma tenía encima.

— Ammigo, yo no sabía...

— Entonces callate la boca y no digas nada — lo suelto de mala gana.

— No sabía que ella te importaba tanto — lo fulmino con la mirada.

— No sabes muchas cosas sobre ella amigo — sigo de largo para buscar al hombre que sí o sí entenderá, que no puede volver a tocarla en su puta vida. 


• ────✾ ─── •

♡¡Holiwis! ♡ 

Aquí estamos nuevamente con Azahel. 

{RECUERDEN QUE ESTO ES UN BORRADOR}

Disfruten. 

Con mucho cariño. 

Besos. 

Nailu P.

♡

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