T3: Capítulo 50: ¡El Festival Cultural de acerca!

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Aviso: Habrá contenido sugestivo referenciando lo ocurrido en el capítulo 48, pero nada explicito.

Ah, y desde ahora les aviso que los siguientes capítulos serán un tanto... musicales. 

Disfruten.

...

Habían pasado 2 semanas desde la redada y decir que las cosas estaban tranquilas era bienvenido. El único inconveniente era el castigo de detención que tuvieron que tomar Izuku y Katsuki después de clases.

No era mucho, solo estudios extras y tareas de limpieza en algunos lugares de la academia. Después de dos horas de arduo trabajo del día, eran permitidos en regresar a los dormitorios una vez que Aizawa estaba satisfecho con sus trabajos.

Esto lo hacían en todos los días de la semana y era obvio que Aizawa no se los iba a dejar fácil, asegurándose de que ambos pasarán por el mismo infierno de trabajo. ¿La recompensa de soportar el castigo? Bueno, el solo hecho de volver a los dormitorios era suficiente para ambos estudiantes exhaustos.

Ah y por cierto, no podían usar su KI, solo puro esfuerzo físico. Pero al menos tenían los fines de semanas libres.

Cuando regresaban, inmediatamente ambos se daban un baño y se cambiaban de ropa para después comer. Pero por alguna razón Katsuki se iba de los dormitorios antes de la cena grupal, llevándose la comida junto a su bulto de la escuela.

Cuando le preguntaban, solo contestaba: "¡Tengo cosas importantes que hacer, dejen de joderme!"

Cabe decir que todos les hacían caso y ni Iida lo cuestionó nunca debido a que estaba traumatizado después de la explosión verbal dirigida hacia el días atrás.

Incluso Izuku no sabía del porqué o a dónde se iba su amigo, pero al menos sabía que no se iba de la academia y regresaba tarde por las noches, sabía esto gracias a que una noche lo presencio regresar al edificio.

Hablando de Izuku...

Dos semanas antes, por la tarde después del día de la redada:

Dando un gemido desorientado, Izuku bostezo despertándose. Se sentía... cómodo y seguro, abrazando a alguien muy familiar, solo que esta vez era más sueve y... expuesta.

Sentía que su cabello estaba siendo acariciado gentilmente. La sensación agradable hizo que lentamente abrió los ojos, dándose cuenta que estaba de costado y que su barbilla y nariz estaba entre medio de dos suaves masas.

"Hola cariño..."

Izuku miro hacia la dirección de aquella dulce voz, viendo que Ochako le estaba sonriendo gentilmente, aun con su sonrojo salvaje en sus mejillas.

El chico se dio cuenta de que estaba acurrucado en sus pechos... y los dos estaban completamente desnudos, cubiertos por la sabana.

Un sonrojo le llegó también en sus mejillas, recordando la noche de pasión que tuvieron... pero a la vez se sentía muy feliz.

Sonrió por encima de su suave piel.

"...Hola amor." Murmuro entre sus pechos para después moverse hacia arriba y besarla dulcemente en los labios. "¿Do...Dormiste bien?"

Asintió, aun acariciándolo. "Como un bebe. ¿Y tu?"

"Igual. Mucho mejor que los otros días atrás..."

Sonrió aliviada. "Me alegro."

Un momento de silencio paso entre ellos, los sucesos de la noche anterior repitiéndose en sus pensamientos de los dos. Cada toque... sonido... palabras...

El Poder Oculto: KIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora