(BL) Personajes Masculinos x malereader

Yandere Simulator | Mujo Kina.

—¿Viste al nuevo enfermero, Hoshiko? Es muy guapo.—Habló Musume.

—¡Sí, lo sé!.

¿Cómo puedo explicar esto? Hace dos años habías llegado a la Akademi como una chica dulce, inocente y todo esa mierda. Te cambiaron de escuela por que sufrías bullying, llegando aquí decidiste confiar en esa frase 'si no puedes contra ellos, úneteles' .

El primer día pasaste desapercibido, buscando información sobre las chicas populares y bullies para comenzar a juntarte con ellas.
El día siguiente comenzaste a socializar y a hacer favores, primero compraste una soda; luego buscaste un sostén (sí, leíste bien); luego buscaste un llavero en un laberinto y el resto del día te la pasaste haciéndole las tareas a desconocidos para tener una buena reputación. Cuando pasó una semana estabas lista, llegaste con la piel bronceada, cabello teñido de rubio con mechones morados y azules. Estabas arreglando tu uniforme cuando Musume Ronshaku se te acercó.

—Oyeee, Hola—Sonrió—así que eres la nueva, bonito cabello por cierto. ¿Cómo te llamas?.

—Hola, soy (d/n), ¿y tú?—(deadname).

—Soy Ronshaku, Musume Ronshaku. Me preguntaba si querías venir con nosotras a la hora del aseo, creo que encajarías perfectamente con mi grupo de amigas y yo.

—Claro, nos vemos luego.

—Nos vemos luego, preciosa.

Eran bastante agradables, se apoyaban y, aunque pareciera mentira, eran muy leales entre ellas sin hablar mal la una de la otra. Después de unos meses comenzaste a darte cuenta de algo importante: ya no te sentías bien contigo mismo. Tu cuerpo te incomodaba y no te gustaba para nada lo que simulabas ser, querías cambiar, querías ser un hombre.
Cuando se los confesaste, te pusiste a llorar avergonzado, cuatro de ellas te abrazaron mientras Hana aún seguía confundida con esa gran revelación, asqueada diría yo; después de un tiempo comenzó a acostumbrarse, tratándote con los pronombres adecuados.

—Oye (t/n), ¿piensas cortarte el cabello?.

—Sí, pero aún no sé cual corte hacerme.

—¡Nosotras podemos ayudarte!—Kokoro se levantó emocionada y las demás asintieron.

—Está bien, pero si me llegan a hacer un desastre las mato.

Habían conseguido unas tijeras de la enfermería, te llevaron al baño a la hora del aseo y comenzaron. No tardaron mucho, cuando te dieron un espejo estabas impresionado, hicieron un trabajo increíble.

—Que guapo te ves, (t/n)—Dijo Kashiko.

—Muchas gracias chicas, de verdad. No se que sería de mí sin ustedes.

—No hay de que niño, te apreciamos demasiado, así que pensamos en ayudarte con algo una vez.

Al año siguiente, comenzando un nuevo ciclo escolar, ya llevabas un uniforme masculino, cabello que te llegaba al hombro apenas. Estabas feliz, después de unos meses en testosterona ya tenias un tono de voz con el que te sentías cómodo.

—¡(t/n)!—tus amigas corrieron en grupo hacia ti, ahora eras mucho mas alto que ellas así que levantaban la vista para saludarte.

—Las extrañé tanto..