2. Condiciones.

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Luka:

Seoul, Corea del Sur (19:00hrs):

Tomé una calada de mi cigarro, llené mis pulmones de nicotina y lo expulsé. El humo se mezcló con el aire, me encuentro en las afueras de mi agencia organizando todos mis planes e ideas. Hoy será la noche que hablaré con la directiva de la industria a la cuál pertenezco.

Los pasos de Park se sintieron a través del césped, mi cuerpo se encontraba recostado en la fría pared de cemento.

—¡¿Estás loco?! ¡Alguien podría verte!— me quitó el cigarro y lo apagó con sus pies.

—Como sea, ya lo había terminado de todas formas.— me encogí de hombros.

Fumar es algo que hago desde los diecisiete años, es la única manera que he tenido para drenar tanto estrés (ni mi medicamento recetado es tan eficaz como el cigarrillo). Es parte mí el hacerlo, nada ni nadie cambiaría ese hábito.

—No me mires de esa forma, en un futuro tus pulmones me lo van a agradecer.— inquirió.— y tu futura novia también lo hará.

—Sigues con eso.— voltee los ojos.

—Ay vamos, escribes canciones de amor, corazones rotos, infidelidades y nunca te has enamorado. Me imagino que el día en que lo estés; querrás escribir cinco álbumes enteros.— se burló.

—Si lo dices por Kim Hye-Min ya te he dicho que...— suspiré agotado.

—No amigo, olvida lo de ayer. Hoy te hablo en serio, no puedes pasar toda tu vida como un bad boy encapotado y pensar que serás por siempre un lobo solitario.

—Creo que ya he sido claro en que...

—Nunca tendrás pareja ya que nadie es digna para ti y no quieres que alguien lleve a todos tus supuestos demonios por ti, lo sé. Me lo recuerdas todos los días.— me interrumpió.— Ya te veré un día, cuando menos lo esperes y sin avisar... Llegará esa chica que creará un buen impacto en ti, gobernará todos tus pensamientos y...

Sacudí la cabeza negando su palabrería.

—¿Ya tienes todo listo?— ahora soy yo quién lo interrumpe cambiando de tema.

Suspiró derrotado a la vez que asintió.

—¿Estás seguro de tu decisión?— tomó su celular nuevo.—. Aún tenemos tiempo para cancelar.

—Nunca estuve tan seguro.— sacudí mi traje y acomodé el cuello de mi saco.—. Andando, quiero terminar este asunto para ir lo antes posible.

Park resopló agotado e hizo una llamada para avisar de que ya estábamos aquí.

—Nos esperan en el gran salón.— hizo una seña para que entremos al lugar.

Di un último vistazo al gran anuncio que hay en el edificio de la agencia, era una foto mía posando para la marca Calvin Klein para que promocionara sus nuevas prendas. Tuvieron suerte de que ese día estuviese de buenas y que saliera tan guapo como de costumbre en las tomas.

Dentro de unas horas este lugar estará atestado de fanáticos, apenas se anuncie mi noticia las personas vendrán a hacer huelgas... No solo aquí frente a la agencia, si no en todo el mundo.

Caminamos hacia el ascensor, me encontraba tranquilo y seguro de mí mismo pero en cambio Park, era un manojo de nervios y su respiración agitada ya me tenía harto.

Oprimió el botón que nos llevaría al gran salón, al abrirse las puertas nos topamos con toda la directiva y a mi equipo de abogados.

—Señor Luka.— todos bajaron la cabeza en forma de saludo cuando di paso fuera del elevador con Park.

Conociendo A Una Estrella©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora