herencia inesperada ★ kooktae au

10

No tardó ni un minuto cuando escuchó toques leves en su puerta.

—entra, sabes que puedes pasar a mi cueva— se sentó en cabecera esperando a que el chico hiciera lo mismo a su lado.

—papá Leo-...

—Sí, sí, te educó muy bien— rodó los ojos. —Pero donde hay confianza, no hay que tener tanta ceremonia.

Taehyung abrió la laptop y lo miró.

—¿confianza?

—Sí— Tae parpadeó repetidas veces. Le resultaba adorable pero tenía entendido que era algo que no entendía. —es cuando... eh...— hizo un mohín. No sabía explicar cosas. —no tienes miedo de ser juzgado por la persona en que confías. Simplemente, le dices esto y no te va a juzgar, haces esto y no te va a juzgar, le dices que irás a hacer esto y por más que sepa que puede pasar algo malo, no te va a juzgar. Te respetará, estará para escucharte y lo más importante— le sonrió. —te apoyará y confiara en ti también.

Taehyung asintió, sus hombros bajaron un poco y su mirada se había vuelto un poco menos iluminada de ánimo.

—papá Leo no confiaba en mí... siempre que yo quería salir a comprarme algo yo solo... no me dejaba. Tampoco me escuchaba del todo, solo lo que quería oír. También no le gustaba que hablara con chicos en sus fiestas de trabajo— hizo una mueca, empezando a teclear en el aparato. —y yo nunca confíe en él para contarle sobre mí. Aún así, cuando empezó a enfermar y agonizar frente a mis ojos, tuve la suficiente confianza en el decirle todo— cerró los ojos. —luego al día siguiente, ya era huérfano otra vez.

Jungkook quería llorar. Pero no lo haría, sabía que quién más quería hacerlo era su menor. Así que pasó su brazo por su costado y lo atrajo a su lado.

—¿confías en mamá?

—Hum... un poco— ladeó un poco la cabeza. —Es muy rara como para contarle sobre muchas cosas.

—entendible, pero puedes confiar en ella— rió. —parece una madre irresponsable, pero es porque ella aparenta serlo. Porque a mis ojos, en la mejor mamá del mundo. Me ha escuchado y aconsejado por 17 años, me ha enseñado y me ha dejado ser yo mismo. Por eso, si quieres hablar de algo con ella, hazlo. Ella es buena, lo juro— levantó su mano derecha.

—¿confías en mí?— preguntó al azar. Dejando a Jungkook un tanto nervioso.

Es cierto que confía en él, le dice todo lo que debe y no debería decir. Pero hay una cosa que lo viene incomodando (o no) y eso no se lo ha dicho.

—lo hago...

—oye, titubeaste.

—no— imitó su manera de decirlo. —Pero si no me crees, te puedo decir que lo haré pronto.

—Hum, fingiré que te creo.

—¿y tú confías en mí?

—no— Jungkook rió. —No es cierto, sí lo hago, pero... no estoy preparado para decirte una cosa.

—esperaré y no me voy a enfadar si se lo dices a mamá primero— tomó una de sus muñecas y vio que las marcas había cesado un poco. Las besó todas con una sonrisa que dejó quieto a Tae. —bien, bebé ¡pon el juego!

Taehyung se pegó más a su costado y dio inicio al juego.