ᴇxᴏᴛɪᴄ ᴍᴜᴛᴀᴛɪᴏ

Resiliencia

El sol se asomaba tímidamente por el horizonte, tiñendo de naranja y rosa las nubes del alba.

 Sin embargo, para Tooru, su despertar no tenía nada de apacible. Un dolor punzante le martilleaba la cabeza, como un eco persistente de las lágrimas que había derramado la noche anterior. La sola idea de volver a la escuela le provocaba náuseas y un nudo opresivo en el estómago. 

Se levantó de la cama con pesadez, sus piernas temblorosas como si llevaran un peso invisible. Se miró en el espejo y vio el reflejo de una niña derrotada, con la mirada apagada y las ojeras pronunciadas.

Se lavó la cara con agua fría, tratando de borrar las huellas de su llanto. Todavía con el corazón encogido por el dolor, le pidió a su hermana, si podía maquillarla para ocultar su rostro hinchado y enrojecido. Le ofreció una disculpa sincera por su comportamiento de la noche anterior

Un poco de rímel y brillo en sus labios le devolvieron un toque de vida a su rostro. Tomó una respiración profunda. Era momento de comenzar un nuevo día y estaba decidido a afrontarlo con valentía.

Al salir de casa, se encontró con una sorpresa inesperada. Issei, con una sonrisa radiante, la esperaba en la puerta. 

"¿Qué haces aquí?", preguntó, aún sorprendida. 

"Vengo a buscarte. A partir de ahora, te acompañaré todos los días a la escuela. No permitiré que esas chicas te hagan daño nunca más".

Se conmovió por el gesto de bondad de su amigo. Ella siempre había sido la valiente y con el sentido de justicia, mientras que Matsukawa no estaba muy interesado en lo que le pasaba alrededor, el cambio que sufrió pudo determinar que no conocía tan bien a su amigo como hubiera imaginado y en ese momento, más que nunca, necesitaba su apoyo. Le agradeció con un abrazo.

Caminaron juntos hacia la escuela, conversando y riendo como si nada malo hubiera pasado. La presencia de Issei le daba a Tooru una sensación de seguridad y protección que no había sentido en mucho tiempo. Era como si un escudo invisible la rodeara, protegiéndola de las miradas y los comentarios hirientes de sus compañeros.

El día transcurrió con una calma inusual. No sintió las miradas acusadoras ni los comentarios hirientes. Matsukawa, la acompañó en todo momento, incluso durante el almuerzo, cuando la invitó a almorzar con sus amigos.

Tooru se sentía un poco incómodo al principio, pero compartir nuevamente con sus amigos la hicieron sentir a gusto. Iwa-chan, en particular, la miraba con una mezcla de curiosidad y algo que no podía descifrar. 

En un momento dado, sus miradas se encontraron y ambos se sonrojaron al instante. Inmediatamente desviaron la mirada, sintiendo una extraña sensación de nerviosismo.

Hanamaki, por otro lado,  la observaba con disgusto. El día anterior, había visto cómo Issei la llevaba en brazos fuera de la escuela y no regresaron en todo el día. Cuando le preguntó por qué no había asistido a clases, este simplemente le dijo que se sentía mal y no quiso dar más explicaciones.

Hanamaki quería confiar en su amigo, pero algo en su interior le hacía dudar. Verlos juntos de esa manera solo alimentaba sus inseguridades. Deseaba tener el valor de enfrentar y aclarar la situación, pero no sabía cómo hacerlo sin parecer celoso o posesivo. Al fin y al cabo, no eran novios, solo amigos.

El almuerzo transcurrió entre conversaciones animadas y risas. Disfrutaba de la compañía de sus amigos.

Sin embargo, en el fondo de su mente, no podía evitar pensar en la mirada intensa de Iwaizumi y en la actitud distante de Hanamaki. 

Al final del almuerzo, el grupo se separo para ir a sus respectivas clases. Mientras caminaban, Tooru no pudo evitar preguntarle a Matsukawa sobre Iwaizumi y Hanamaki.

"¿Qué opinan ellos de mí?", preguntó con timidez.

Issei sonrió y la miró a los ojos. 

"No sabría decirte de Iwaizumi, esta distante desde que no ha visto a Oikawa", dijo. "Tal vez quiera saber más sobre ti pero no tiene el valor de acercarse. Y Hanamaki... bueno, él es un poco celoso, pero creo que solo necesita tiempo para adaptarse".

Tooru se sintió un poco aliviada por las palabras de Matsukawa. Tal vez las cosas no eran tan malas como pensaba. Quizás, con un poco de tiempo y paciencia, podría ganarse la confianza de Iwaizumi y Hanamaki.

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Hanamaki e Iwaizumi caminaron en silencio por los pasillos de la escuela, cada uno con sus propios pensamientos. Finalmente, Hanamaki decidió romper el hielo.

"Oye, Iwaizumi", dijo con voz baja. "¿Qué piensas sobre Chie-san? ¿No crees que Matsukawa está actuando raro? Nunca se había preocupado tanto por una chica, ni siquiera se despegaba de nuestro lado. Todo está raro desde que se fue Oikawa".

Iwaizumi frunció el ceño, pensativo. "Sí, me he dado cuenta", respondió. "Matsukawa siempre ha sido un tipo despreocupado, pero últimamente parece estar muy pendiente de Chie-san. No sé si es solo por compasión o si hay algo más".

Hanamaki se quedó callado por un momento, como si estuviera sopesando sus palabras. "No sé", dijo finalmente. "Pero no me gusta la forma en que Matsukawa la mira. Hay algo en su mirada que no me cuadra".

Iwaizumi asintió con la cabeza, de acuerdo con las palabras de Hanamaki. "Lo sé", dijo. "Es como si estuviera guardando un secreto".

Los dos amigos continuaron su camino en silencio, cada uno perdido en sus pensamientos. La actitud inusual de Matsukawa hacia Oikawa Chie los intrigaba y los preocupaba. No podían evitar preguntarse qué estaba pasando en la mente de su amigo.

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Después de mucho tiempo actualizaciooon💕