-Capítulo 8-

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Era el día de la boda de Bowser y Peach, algo había salido muy mal que hizo que Mario no pudiera ayudar a Peach ni salvarla y ahora esta se casaría con Bowser por obligación.

Ava la estaba pasando muy mal, primero que todo, la habían obligado a usar un vestido lila sin mangas junto con una diadema del mismo color para intentar ordenar su cabello pero eso ya era algo imposible, usando también unos zapatos con tacón color blanco, no podía negar que se veía un poco mejor después de haber estado usando la misma camisa, pantalón y suéter por casi más de un mes, pero a la chica no le gustaba mucho usar vestidos así, aunque claramente este no era su único problema, estaba muy lejos de serlo.

Entre los Koopas, la habían obligado a sentarse en primera fila del lugar donde sería la boda, justo al lado de lo que parecía ser una bomba gigante con vida, ella perfectamente habría tratado de escapar, pero algo la detuvo, el Koopa que era mago la había amenazado que en el instante en que ella intentara levantarse de esa silla y escapar, haría explotar la bomba a su lado sin piedad.

No tenía escapatoria, su único deseo en ese momento era que Luigi estuviera bien, o al menos mejor que ella.

El día era soleado e iluminaba todo el lugar, en el altar se encontraba nada más y nada menos que Bowser usando un moño blanco y un sombrero alto también de este color, su mirada era de malicia pero si prestabas atención, podrías percibir los nervios y emoción que sentía este.

Pobre de él.. -pensaba Ava al verlo-

Pero la chica también estaba preocupada por algo más, su hermana. Sería la primera vez que la vería, o al menos que recordara, gracias a las viejas fotos sabía que Peach tenía su cabello rubio y sus ojos celestes, pero Ava moría de ansias por verla aunque también le afectaba el hecho de que la vería casarse con alguien a quien no amaba.. ¡gran encuentro entre hermanas!

En sus pensamientos también rondaba alguien más aunque no lo conociera aún, Ava pensaba en el hermano de Luigi, Mario. Por lo que le había contado Luigi, Mario era alguien sumamente valiente y que no se dejaba vencer por nada y Ava sabía que era cierto. Pero entonces, qué había pasado? Bowser lo había vencido!? No, no sabía cómo pero Ava estaba segura de que no había sido así, ella sentía en su interior como si algo le dijera que Mario estaba realmente bien, pero eso no respondía su pregunta, dónde estaba?

Si alguien podía rescatarlos en ese momento, era Mario, pero qué pasaría si este no aparecía a tiempo? Quién los salvaría!? Bueno, Ava no estaba muy segura pero desde el instante en el que se había sentado en esa silla al lado de la bomba, había empezado a generar planes o ideas en su cabeza de lo que podría hacer.. Pero sus pensamientos fueron interrumpidos por el sonido de unas trompetas.

Todos los invitados se voltearon para ver a la prometida caminar hacia al altar, y ahí estaba Peach, su cabello era tan rubio y hermoso, perfectamente acomodado con una pequeña corona encima de este y atrás, su velo de novia, traía un vestido completamente blanco sin la parte de los hombros así como también llevaba guantes del mismo color. El vestido le quedaba realmente hermoso y le llegaba hasta sus pies, y ella sostenía un ramo de flores con sus dos manos, Ava se había quedado boquiabierta.

Era la chica más linda que jamás había visto, cómo podía ser su hermana?

Ava se sintió tan feliz de por fin verla, pero al mismo tiempo la hizo sentir muy mal, esto por ver el semblante triste de Peach, tenía que encontrar la forma de salir de ese lugar.

Peach se veía totalmente concentrada al caminar en medio de todo el lugar mientras se dirigía al altar intentando evitar las miradas de todos, pero Ava sintió su corazón detenerse unos segundos cuando la mirada de Peach se detuvo en ella.

"𝐓𝐢𝐦𝐢𝐝𝐨?" (Luigi y Tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora