Una Latina en China

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Los rostros de Leng Shi, su amigos y Zhuang Hai estaban pálidos, el miedo Los recorría por completo, sabían que habían metido la pata hasta el fondo cuando vieron la expresión oscura en los ojos azules del hombre que estaba frente a ellos.

Lu Xin, por otro lado, estaba tranquila, ellos habían querido hacerle daño, y ella les iba a pagar con la misma moneda, no por nada fue una latina hecha y derecha en su vida pasada.

La razón por la que cortó la parte en la que Zhuang Hai hablaba de ayudar a dañarla, es porque quería divertirse y vengarse por el alma original, iba a hacerla sufrir por cada una de las maldades que le hizo a la niña.

"Parece que no debemos ser los únicos en estar presentes" habló Li Jiwei, estaba furioso, ellos querían lastimar a su niña, a si gente, les cobraría hasta que lloraran.

"La policía debería estar presente" dijo el señor Wei por primera vez.

"No! E..esto es un malentendido, esta editado, ¡deben demandar a quien puso el video!" estalló Leng Shi, estaba perdida, si alguien se enteraba de esto, estaría perdida si su padre se enteraba, y aun peor si el Elder Li lo sabía.

"Asi es!! Debo demandar a quien hackeó la cámara! -estalló el amigo de Leng Shi.

En ese momento, Lu Xin sonrió, y al segundo siguiente la puerta se abrió de un estruendo, y una mujer de unos 40 entró seguida de un hombre joven de unos 21 años, bastante guapo.

" Guan Xong Bastardo!! ¿Te atreves a engañarme?" habló la mujer furiosa y le dio una cachetada al hombre, el joven a su lado no parecía sorprendido.

"Esposa perdona, todo fue por esa zorra que me engañó, esposa no era mi intención" lloró el llamado Guan Xong de forma miserable, pero la mujer lo miró con asco.

"¿Cual de ustedes envió el video?" preguntó Madame Guan mirando a todos, sus ojos se abrieron al ver a Li Jiwei, y aun mas cuando vio que la niña a su lado levantaba la mano.

"Fui yo señora Guan, no podía dejar que un...poca cosa como el la engañara, y de paso quería vengarme" dijo ella sonriendo inocente, la señora Guan no pudo evitar sonreir, la niña le caía muy bien.

Guan Xing miró a la chica que estaba hablando con su madre, la palabra hermosa se le quedaba corta, tenía una elegancia y un porte único, y sus ojos dorados eran muy llamativos.

Pero sintió un escalofrío, y al alzar la mirada se encontró con unos ojos azules que lo miraban como si se hubiera robado su comida, lo miraba como un león al que le hubieran entrado al territorio.

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Li Jiwei miró al mocoso que se interesó en la niña, ¿quien se creia que era? Le faltaba mucho para poder llegar a su nivel y poder siquiera hablar con ella.

"Señora Guan, creo que usted se puede encargar de su esposo, y espero un castigo despiadado" dijo Jiwei pero sonó mas como amenaza que como pedido.

"No se preocupe, sus acciones tendrán consecuencias" dijo ella muy seria, se despidió de todos y ordenó a los guardaespaldas que lo sacaran arrastrando.

El lugar se quedó en silencio, uno muy incomodo, Lu Xin les sonrió a ambas mujeres, quienes tuvieron un escalofrío al verla, y antes de que pudieran hablar, alguien mas entró.

"¡Hija poco filial!" gritó un hombre abofeteando a Leng Shi, quien miró al hombre con incredulidad y miedo, su padre nunca la había abofeteado.

"Papá, ¿porque me pegas?" gritó incrédula y llorando.