el trío de sombras

Intriga

En el ministerio de magia las cosas no iban bien.

Nadie podía explicarse como había desaparecido la mitad del edificio.

Verán, parecía un día de lo más común, brujas y magos conversaban, mucho papeleo se efectuaba y un par de hechizos nuevos eran probados en los cuartos más reconditos del imponente lugar, cuando de repente la mitad derecha del edificio ya no estaba.

"Puf" ni siquiera una advertencia, no quedaba nada.

Ciertos renombrados aurores cuyos nombres estoy segura conocen, revisaban el terreno vacío que sobraba a falta de una mejor pista.

Un hombre de cabello azabache y cicatriz de rayo se pasó la mano por el pelo, suspirando.

"-No tengo ni la menor idea de lo que está ocurriendo.- Su pelirrojo compañero paró de mordisquear una dona para mirarlo desconcertado.

-Tal vez uno de los hechizos nuevos falló- El moreno negó con la cabeza.

-Ya envié a Jones a preguntar, ninguno de esos encantamientos podría haber tenido una reacción parecida.

-Entonces,- su mejor amigo le dedicó una sonrisa ladina- supongo que nos hemos encontrado con un misterio.

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Océane estaba nerviosa puesto que no tenía nada que decirle al muchacho.

Ella misma no comprendía que mosco le había picado como para ir a hablar con el "bad boy" consagrado de la escuela.

Respiró, tenía que admitir que tanto el chico como sus amigos la aterraban.

"-Yooo... Me preguntaba si tuuu... ¿querias hacer el proyecto de historia de la magia conmigo?- La muchacha se abofeteó mentalmente, ¿Que clase de escusa era esa? 

El pelinegro no sonrió pero ocurrió algo igual o más sorprendente.

"-Claro,-dijo con un encogimiento de hombros- no tengo nada que perder." 

Y así, sin más, se fue.

La muchacha se quedó parada, los ojos como platos y el corazón latiendo como si hubiera corrido un maratón.

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El pobre ruiseñor sentía ganas de gritar.

Observar a los aurores recorrer el sitio donde una parte del ministerio había sido divertido, hasta que Yellow y Orange habían comenzado a pelearse.

Dentro de su cabeza.

Blue no alcanzaba a comprender porque todos los miembros de la organización sentián la necesidad de usar ese estúpido hechizo pero estaba mas que molesto.

"-¡CALLENSE YA!-"Gritó tan alto como el hecho de que estuvieran escondidos se lo permitía.

Y los tres, un ruiseñor y dos lagartijas, retomaron la observación.

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Bueno, al parecer estoy más que inspirada, ¿dos actualizaciones en dos días?¡Están de suerte!

Volviendo al capítulo, no estoy orgullosa de este trabajo pero quiero actualizar lo más que pueda antes de las vacaciones de verano porque no creo que pueda actualizar mucho durante esos dos meses.

Besos :*

Tamo.