Valkiria de la ciencia ▫️| Nikola Tesla

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Los prodigios son las personas que siempre están solas.

Nikola Tesla.

Los brazos detrás de su espalda, ese traje tan limpio y pulcro. Esos lentes extraños colgados en su cuello, junto a ese cabello tan ordenado, cepillado y castaño.

Todo eso, junto con esa sonrisa característica en su rostro mientras servía el té, hacia que el corazón de la Valkiria bailará como bailarina en una caja musical. Era completamente extraño, pero ese humano era... Curioso por naturaleza. Atraía toda la atención de la femenina.

— Y díganme ¿Cómo se llama? — Se sentó elegante, tomando su taza de té.

— Am... — Se puso incómoda — Ya... Ya le había dicho mi nombre, señor.

— ¿Enserio?... — Tomó un sorbo de su té — Mis disculpas... ¿Puede volver a repetirlo?. Estaba haciendo unos cálculos mientras me hablaba al final de encontrarla — Serén solo podrían brillarle los ojos.

— Bueno. — Miró la taza de té — Serén... Mi... Mi nombre es Serén

El castaño solo dejo la taza de té sonriendo, ya había hecho su trabajo en medio del silencio corto que había causado al no contestar. Al final la mujer frente a el solo tenía la mirada baja, el rojo de su rostro le hacía preguntar qué pasaba en su mente.

— Madam... Soy Nikola Tesla — Se levanto de su asiento.

Serén le dió una mirada toda extraña, apenas dió un sorbo a su líquido y abandonó el cómodo asiento para irse caminando hacia el anterior escritorio, donde con la mirada de la Valkiria detrás de su espalda, saco de uno de los tantos cajones un pequeño pedazo de papel que hizo que la femenina se sorprendiera.

— Usted... ¿Es la que hizo esto no? — Se acerco a ella — Tengo que decir que es muy artístico... ¿Arte astral?

— Co... Contemporáneo... — Habló apenas al tener al científico a su lado.

El castaño abrió la boca, no era bueno en cosas de artes y artesanías. Pero al parecer la mujer delante suyo, si. La notó muy distinta comparado con las mujeres de su época. De hecho Serén tenía rasgos pequeños e casi invisibles de la Valkiria que lo eligió para la pelea que se prepara.

— Bueno... Esto es encantador, mis perdones porque me equivoque en su maravillosa obra de arte — Nikola dejo el papel en la mesa — Quiera preguntarle otra cosa... Si me lo permite.

— La Valkiria afirmó, dejando la taza de té — Si... No hay problema.

Pero lo que no contaba, era que el científico tomarás sus manos, dejando ver la diferencia entre sus delicados dedos entre los de el, haciendo que la Valkiria se sonroje abriendo la boca. No esperaba tal acción del masculino, sus piernas comenzaron a temblar debajo de su largo vestido, aparto la mirada evitando ver los castaños ojos de Nikola.

— Me permitiría... ¿Trabajar con su cuerpo? — Serén se levantó de su asiento — ¿Está bien?

El corazón de la semidiosa no dejaba de tener una corrida con su sangre, no le parecía una persona vulgar o indecente, el "Trabajar con su cuerpo" se refería a trabajar con los poderes de la Valkiria en la ciencia. Sin embargo, jamás creyó que lo diría de esa manera.

La de ojos verdes desvió la mirada, ahora se arrepentirá de decir esto. Pero, se siente inútil por primera vez en su vida, siendo una Valkiria. Una media Valkiria, no puede hacer el Volund como lo hacen sus hermanas... Apretó sus manos con el vestido e hizo una reverencia hacia el humano.

— Mis disculpas... No puedo ayudarlo... Soy una persona inútil en su trabajo — Se apuntó con su mano, observándolo — Como ya vio, ¡Yo soy una Valkiria! Pero no puedo hacer el Volund como las demás!

Nikola estaba sereno, frente a ella observaba las cortas lágrimas que amenazaban a la dama salir de sus ojos, pero ¿Importaba lo que decía? ¿Tanto puede tener una mujer, con solo decir esas palabras? ¿Inútil?... No! No lo era.

Y lo demuestra el masculino, al avanzar hacia ella y poner sus manos en los hombros cubiertos de la mujer que lo vio extrañada, Nikola sonrió. Ahora se preguntaba la Valkiria. Este sentimiento que siente ella ¿Lo siente el? ¿Puede sentir su corazón latiendo rápido, al solo verla? ¿Tiene la misma curiosidad como ella lo tiene?.

— Dama... Usted no es inútil... Que no pueda hacer ese tipo de acciones como de sus hermanas, no significa nada — Dijo con los ojos cerrados sonriendo.

Serén comenzaba a tener el rostro rojo, y con temor apoyo su mano en el pecho del humano, sintiendo los latidos del corazón. Esta abrió los ojos, notando como estos latidos estaban acelerados como los de ella.

La mano del científico tomo la misma delicada mano de la Valkiria, ese... Esa curiosidad... Comenzaba a tener otro nombre... Porque estas acciones que hacen el junto a ella... Se sienten como esos cuentos románticos que leía de pequeña ¿Romeo y Julieta?

— Si... Si joven Tesla... Lo ayudaré — Sonrío mirándolo a los ojos — Todo por la ciencia!

— ¡Todo por la Ciencia! — Dijo el científico sonriendo.