Mensaje #7

22 5 0
                                    

— ¡Hola, soy Yerin! En este
momento no puedo responder,
¡pero déjame un mensaje! bye, bye.

     Beep.

— ¿Te acuerdas de nuestro primer beso?

>> Era nuestra primera cita, había ido a la feria y querías subirte a esa estaba noria.

>> Le tengo pánico a las alturas, aunque eso no lo supiste hasta ese momento, me quería hacer la valiente sólo para impresionarte, lo admito, creo que te diste cuenta.

>> Y obviamente, esa estúpida rueda gigante tenía que parar con nosotras en aquel punto más alto.

>> Yerin, a mí me da pánico hasta asomarme desde la ventana de mi oficina en la empresa, el cual no está muy alto... casi me da un infarto ese día.

>> Comencé a hiperventilar y tú dejaste de reírte de mí para en serio preocuparte, me pediste que cerrara los ojos y que intentara respirar profundamente varias veces, hasta que tomaste mi rostro y juntaste nuestros labios.

>> Extraño tus labios.

>> Como si fueran mágicos (aunque estoy segura que esos hermosos y suaves labios podían hacer magia, lo comprobé poco después), la estúpida rueda volvió a girar.

>> Continué el beso hasta que estábamos en la tierra, te separaste para mirarme como si hubieras hecho la mejor travesura de tu vida, estaba sonriendo y muy ruborizada

>> Hermosa, muy, muy, hermosa.

>> Y no me malinterpretes, Ye, siempre fuiste y serás hermosa, pero asintiendo y con tus mejillas rosadas eran mucho más improvisado.

>> Supe con ese beso que había vivido nada igual, porque en serio, jamás tuve el beso como ese... sentí que encajaba perfectamente a tus labios.

>> Amo tus labios, Yerin.

>> También te amo a ti.

>> ¿Puedes volver con esos besos de nuevo?

Voicemail | SinRinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora