Si ya era difícil estar con alguien en una casa que no era la suya, en la que solamente pensaba mientras miraba a lo lejos, si, tenía casi todas las comodidades que necesitaba y vivía con la persona que ahora mismo más amaba en el mundo, aún así, eso no quitaba que cada vez se sintiera más ahogada y destrozada creyendo que su mundo se estaba viniendo abajo por todas las decisiones precipitadas que tomó en un momento en el que solamente pensaba en una cosa, estar con Mina para toda la vida sin importar qué.
Todo el tiempo pensamos en ello cuando tenemos una decisión y las personas no nos entienden o apoyan, tendemos a explotar y decir que nosotros tomaremos la decisión que creemos que no vas a ayudar pero claro estamos dentro de ese circulo de oscuridad que nos ahoga y engaña haciéndonos creer que queremos seguir en el mismo sitio, mientras que las personas que están fuera de el piensan mejor y quieren que entremos en razón.
Apenas tenían dieciocho años era obvio que no iban a poder estar tan preparadas para una vida en la que estaban acostumbradas a muchas cosas y esas ya no están porque decidieron que lo mejor que podían hacer era escaparse e irse a un lugar que ni siquiera saben exactamente como se llama en donde sus padres ya no pueden hacer nada porque son mayores de edad, dos chicas que acababan de cumplir la mayoría y ahora creían qje podían con todo. Esas fueron las palabras de sus padres y ahora se da cuenta el por qué las dijeron, tenía la absoluta razón de todo, ellas no iban a lograr pasar mucho tiempo, bueno, Mina si que creía que podía pasar, luchaba todos los días para traer algo de dinero y hacerla sonreír con cualquier cosa.
Pero ella...
No hacía nada más que estar viendo por la ventana porque ni la televisión la entretenía tanto, lo único que pasaba por su cabeza eran las lágrimas de su madre, los gritos de su padre, Mina completamente pálida jalandola del brazo para salir de ese lugar luego los padres de Mina que hicieron hasta lo imposible por impedirle que se fuera, era la heredera y debía tomar el cargo de su padre en poco años, ahora se encontraba viviendo en una casa que daba mucho que desear, en donde seguramente años atrás antes de conocer a Chaeyoung en su vida pensó que saldría de esa gran mansión.
Aunque no era mucho de hablar de temas que la hicieran ver "débil" antes la sociedad, Chaeyoung se sentía muy culpable por todo lo que pasó, Mina también se sentía culpable por lo que pasó, eran dos almas que cargaban con la misma pena y por más que estaban una frente a la otra actuaban como si ninguna la tuviera pero sospechando que la otra también la tiene, al no decir nada era imposible que alguna se enterará de algo sobre ese tema, así que lo vivían y superaban de distinta manera.
Chaeyoung lo hacía de una forma que obviamente su novia no estaría de acuerdo, bueno nadie, porque era más peligroso de lo que ella llegaba a pensar en el momento de hacerlo, cuando la hojilla rozaba su piel y sentía ese frío sabía que sus penas se ahogarian en su roja sangre y que escurrían como aquel líquido en sus brazos cayendo a borbotones en el lavabo el cual lavaba todos los días por eso mismo, cualquier mancha o lo que fuera, Mina se daría cuenta y comenzaría un gran problema que preferiría evitar.
Suspiró y miró el reojo.
Hace algunos años le había prometido a alguien que no haría eso otra vez porque si eso pasaba estaría en serios problemas nuevamente, no es la primera vez que lo hace, que descarga la rabia en ella misma y rasga su piel aliviando aquel enojo que yace en su adolorido corazón, este latió con mucha fuerza y sintió que se iba a desmayar, iba a pasar lo mismo que hace unos días atrás en donde lo había hecho por última vez ya que por alguna razón Myoui habló de ello y se veía realmente afectada.
Pero la necesidad de hacerlo, de sentir dolor y castigarse a si misma estaba saliendo cada vez más, como si la estuviera ahogando, como si ese algo no pertenece a ella.
Solo está buscando una forma de soltar todo el dolor que tiene porque el llorar nunca le ha ayudado lo suficiente siempre la deja con un hueco en el pecho que no la ha dejado vivir bien, por eso es que a elegido el dolor ante todo.
Durante estos largos años de su vida sea el culpable de diversas cosas las cuales no tienen nada que ver con ella y tal vez esa es la razón por la que se castiga ya que no puedo hacer nada para poder solucionarlas, al principio fue con sus padres el hecho de darse cuenta que sentía cosas por una mujer le rompió el corazón de pedazos porque sabía que estos eran católicos y no estaban de acuerdo con ello además de que la criaron en base a las tantas creencias que tenía y una hija homosexual no era una de ellas.
Esa fue la primera vez que lo hizo al ver la hojilla que utilizaba a su padre para afeitarse la agarró pensando que sí va a ser lo único que ahogaría sus penas y la llevaría a un mundo donde todo sería mejor, fue así los primeros segundos recuerda que la cortada no fue muy profunda pero tampoco muy superficial lo suficiente como para que una gota de sangre saliera de esta al verla se hipnotizó por el hermoso color rojo que tenía, claro solo quita que se sintió mal por ella pero aún así lo hizo un par de veces más no fue en sus muñecas más bien esos muslos porque ahí sabía que nadie la iba a ver, lamentablemente ninguna de las personas a su alrededor se dio cuenta.
Al pasar los años cambiaba de método una y otra vez y de lugar porque no quería ser descubierta cuando todo comenzó fue un simple descubrimiento que se convirtió en una de las razones por las que no dice lo que siente sino más bien se corta para olvidarlo de una manera u otra lo hace aunque no tiene mucho sentido porque al cabo de unos minutos vuelve a recordarlo todo y viene tres mil veces peor porque siente vergüenza, lástima y dolor por sí misma ya que ya está tentando contra la muerte.
Siempre se ha echado la culpa de ello pero a veces se pone a pensar que debido a su familia es que nunca ha podido decir lo que siente ya que esto se burlaban y utilizaban la biblia como una especie de atajo para hacerle saber de que todo lo que dijera esto tenía que seguirlo al pie de la letra y que si sentía mal debía leerla para que pasara cuando no era así es más se sentía peor por los escritos de la misma.
Nunca en toda su larga vida ha podido explicarle a la gente lo que siente y es por eso que creen que es como un depredador que no duda ni un segundo en atacar porque no quiere que la vean como algo débil cuando en realidad es un dulce conejito que lo único que quiere es sentirse protegida.
Se miraba el espejo las ojeras y el color pálido de su piel hacia un contraste que le hacía sentir mal porque ya no lucía así antes el rubio de su cabello parecía más opaco de lo normal en sus manos igual de pálidas que su rostro hacía saber que las cosas no iban bien, es como si toda la sangre que tenía en el cuerpo le hacía sentir viva se drenó por alguna parte y se convirtió en lo que es ahora un fantasma que lucha día a día por no caer en las garras de la muerte aunque en el fondo es lo que más desea pero no quiere dejar a Mina sola porque sabe que está a pesar de que tiene mucha fuerza mental no podrá aguantar su despedida.
Así que con un gran pesar y dolor dejó la hojilla en el mismo sitio igual que la dejaba siempre lamentándose por no haber sido lo suficientemente capaz para quitarse la vida considerándose débil ya que una parte de ella le tiene miedo al más allá y mirándose nuevamente al espejo con odio y desprecio se hizo saber con una simple mirada de sí misma que ella nunca iba a valer la pena no lo suficiente como para poder salir adelante de todo lo que le estaba pasando pero así es la vida se tiene que conformar con ella porque si no es preferible que ya no siga en ella.
— Buenas noches mi amor —Se escuchó la puerta crujir de fondo dibujo una sonrisa fingida en su rostro y aguantándose las lágrimas que estaban amenazando con salir se dispuso a ir a saludar a la única persona que la mantenía en este plano terrenal.
— Buenas noches bebé —Le dio un abrazo y al poco tiempo un suave beso a la comisura de los labios la pelinegra sonrió debido a ese acto tan tierno y sutil que era el motor de su vida, Mina también se sentía cansada lo suficiente como para desplomarse en la cama y no despertarse nunca más aún así le demostraba Chaeyoung una cara de la vida que nadie más se lo demostraba y esa es la razón por la que siente que debe seguir luchando ya que por su novia lo da todo.
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safe & sound ; 𝗺𝗶𝗰𝗵𝗮𝗲𝗻𝗴
Fanfic𝐌𝐈𝐂𝐇𝐀𝐄𝐍𝐆 ┊ No todo en las relaciones son momentos buenos, Mina pensaba que si hasta que encontró a Chaeyoung en la bañera llena de sangre y a punto de dejarse llevar por el dolor abundante en su pecho. En ese preciso momento juró que siempre...