No era un día muy diferente a los demás, Adhara acostada sobre el regazo de Remus en el sofá de la sala común mientras ambos compartían un cigarrillo.
Remus podía ver cada facción de ella y aunque lo tratara de evitar, le recordaba demasiado a Barty e incluso la forma en la que agarraba el cigarro y daba pequeñas caladas, le recordaba a él. Haciendo que su pecho tuviera un pequeño vacío o un pequeño sentimiento de culpa acompañado de ira.
– ¿Puedes dejar de hacer eso? – la voz de Remus salió desesperante y con un tono un poco molesto
Sirius que se encontraba en el sofá de a lado lo miro con el ceño fruncido y dejo el libro que estaba leyendo a un lado, poniendo toda su atención en aquel par.
– ¿Hacer qué? – los ojos azules de Adhara miraron hacia arriba inocentemente, por un momento el corazón de Remus se detuvo, era como si Barty lo estuviera mirando y no pudo evitarlo, no quería ser grosero y mucho menos con ella pero ¿Por qué demonios se deben parecer demasiado?, él sabia muy bien que de eso se trataba ser el mellizo de alguien pero ¿Por qué tenían que ser exactamente igual en todo? en su forma de fumar, en la forma en la que miraban a las personas cuando los tomaban desprevenidos, en la forma en la que solo se le formaba un hoyuelo en la mejilla derecha cuando sonreían e incluso la forma en la que se reían. Para Remus eso era demasiado, se levanto bruscamente del asiento, empujando muy fuertemente a la castaña sin importarle que ella pudiera caer pero gracias a Merlín, ella fue rápida y aunque estuviera un poco desconcertada por el compartimiento de su amigo ya se encontraba sentada en el extremo del sofá.
– ¡¿QUÉ DEMONIOS TE SUCEDE?! – Sirius se levantó rápidamente de su asiento para dirigirse hacia la castaña y ponerse en cuclillas para revisarla, algo que Remus no se había percatado era que el cigarro había salido volando y accidentalmente había quemado la mejilla de su amiga
– Adhy... lo siento.. yo...– el sentimiento de culpa invadió el cuerpo de Remus, trato de acercase pero Sirius le dedico una mirada fría
– Moony – Adhara le regalo una sonrisa, tal vez el pasar tanto tiempo con James era la razón del porque ella sabia como tranquilizar a las personas con un simple gesto – No pasa nada, estaré bien
– Esta a milímetros de tu ojo – Sirius sonaba preocupado mientras examinaba el pequeño punto rojizo
– Estaré bien – dio gran énfasis en la ultima palabra mientras le regalaba al peli negro una mirada de advertencia
La pequeña Crouch, desde el segundo año estaba al tanto del pequeño problema peludo de su amigo y no le había importado para nada e incluso lo trataba de apoyar en lo que podía, como cuidarlo en la enfermería cuando Madame Pomfrey tenía que atender a otros estudiantes, pero sobre todo trataba de apoyarlo emocionalmente, sabía muy bien que su temperamento podía cambiar dependiendo las fases lunares así que aquel arranque que tuvo él, se lo adjudico a la luna.
Solo basto un pequeño hechizo para que el punto rojo desapareciera de la piel pálida de Adhara, dejando solo una pequeña mancha como si fuera una peca o un lunar. – Las ramas me advirtieron sobre este horrible hábito – la castaña trato de bromear para apaciguar el ambiente que se encontraba un poco tenso, eso funciono un poco pero la atmósfera de tensión se rompió completamente cuando la risa de James invadió la pequeña sala, su cabello estaba alborotado y su frente sudada, al parecer había regresado de una práctica de quidditch junto a Marlne pero ambos notaron lo que ninguno de los otros presentes se había percatado, la mano de Sirius sobre la de Adhara.
Cuando Black se dio cuenta en donde se encontraba la mirada de su amigo, rápidamente quito su mano de la de ella como si le estuviera quemando, se incorporo y aun con los nervios corriendo en sus venas trato de acomodarse la camisa. – ¿Fue buena practica? – soltó inocentemente mientras buscaba la mirada de su mejor amigo pero fue en vano, él lo estaba evitando
– Si Slytherin no nos patea el culo en el siguiente partido, James lo hará – era obvio que la rubia se había percatado de la tensión que estaba creciendo entre los dos azabaches – ¿Qué sucedió? puedo tocar la tensión en el ambiente – la sonrisa de ambas chicas se cruzaron y la rubia le regalo un pequeño guiño de ojo a su amiga – Barty te esta buscando
Remus pudo sentir como algo en su pecho se alborotaba al igual que como los nervios recorría cada parte de su ser, una pequeña sensación de alivio invadió todo su cuerpo pero aquello solo duro cuestión de segundos, todo eso se desvaneció y la ira con la tristeza invadió otra vez su cuerpo
Al parecer ninguno de los presentes se había percatado de la pequeña sonrisa que se le había escapado a Remus cuando Marlne había dicho aquellas palabras excepto Adhara que con una sonrisa se levanto del sofá y tomo la mano de su amigo – ¿Me acompañas? – Remus frunció el ceño, se maldijo mil veces por ser tan obvio y negó levemente
– ¿Oh vamos Moony!, lo más seguro es que este el idiota del pequeño Black
– Adhy, no es por ofender pero tu hermano me da miedo – se excuso el castaño mientras levantaba ligeramente los hombros haciendo que su amiga frunciera el ceño y lo mirara dudosamente
– ¿Miedo? – Marlne soltó con una peculiar sonrisa – A mí me parece muy atractivo – soltó algunas risitas nerviosas mientras jugaba con un mechón de su cabello rubio
– ¡Por Merlín! es como decir que Adhy es atractiva – todos los presentes se quedaron callados ante aquel comentario de Black, antes de que el ambiente se tornara una vez mas hostil e incomodo, Remus tosió levemente y acepto la invitación de su amiga.
Ninguno había dicho nada desde que salieron de la sala común y a unos cuantos metros ahí estaba, Barty, recargado en uno de los barandales con ambas manos metidas en las bolsas de su pantalón mirando despectivamente a cualquier alumno de Gryffindor. Remus sostuvo un suspiro, no quería ser más obvio pero antes de dar un paso más, la castaña se detuvo y copio la misma posición de su mellizo para mirar a su amigo a los ojos y con una sonrisa traviesa en sus labios soltó – ¿Cuándo planeabas decirme? – Remus sintió como su corazón latía mas rápido y los nervios invadían todo su cuerpo,
– ¿Qué debo decirte? – Adhara soltó una pequeña risa y volvió a su postura normal
– Sobre los cigarrillos, tu eres el que le vendes los cigarrillos a Barty – Remus sintió un gran alivio en toda su caja torácica y le regalo una sonrisa a su amiga
– Cuando tu le digas a Sirius
– ¿Qué vendes cigarrillos? – Lupin negó levemente con la cabeza para mirarla con el ceño fruncido
– Estas enamorada de él
Ahora la que sentía el pánico en todo su cuerpo era ella y Remus lo sabía, podía escuchar como su corazón comenzaba a latir mas rápido, como el movimiento de sus pulmones eran más lentos al igual que el de su sangre
– No estoy enamorada de él
Ninguno pudo seguir la conversación porque cierto chico castaño había caminado hacia ellos con una sonrisa burlona y coqueta en su rostro.
⟿⟿⟿
– ¡Maldición Sirius!
Sirius jamás había visto tan molesto a su amigo en todo el tiempo en el que se llevaban conociendo, aventaba cada prenda que se encontraba en su cama al suelo mientras que repetidas veces se pasaba la mano por su cabello y acomodaba repetidas veces sus lentes.
– Lo siento, solo es demasiado extraño – aquellas palabras hicieron que el azabache se detuviera en seco para mirar a su mejor amigo – No creo que Adhy sienta algo por mi
– ¡Claro que siente algo por ti! ¡la conozco es mi mejor amiga!
– James – Sirius no podía mirar a su amigo mientras aquellas palabras iban a salir de boca – No importa que Adhy sienta algo por mi porque yo no siento nada por ella y lo sabes
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Doomed love (Sirius Black) (Regulus Black)
Fanfiction"Se odian mutuamente" "No, no lo hacen. No realmente" © All Rights Reserved