Conexiones

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Al abrir la puerta todo furioso me di cuenta que era Sara, se me cayó la cara de vergüenza al verla.

- Ostras, perdón, ese comentario no iba para ti. - Le dije para aclarar el asunto. -

- No pasa nada, entiendo, ese tal chico Hugo es un pesado, se cree que me voy a fijar en él. - Me dijo Sara riéndose. - 

- Sí, sí, eso le he dicho yo. Perdón, que no he dicho nada, puedes pasar a mi habitación. - Le dije amablemente. - 

- Perdona por como estaba antes, es que... - Yo le estaba intentado aclarar lo que me pasaba en el pasillo, cuando me deja con la palabra en el boca. - 

- Sí, ya sé, lo ví todo, cuando te tiraron agua y todo eso..., la verdad es que no entiendo por qué te hacen eso, si tú eres una personas muy amable. - Me dijo mientras que me sonrojaba. - 

- Eso me digo a mí mismo, pero bueno... Si no te molesta me gustaría dormir ya, porque estoy cansado del viaje y también me quiero levantar temprano mañana para visitar la ciudad. 

- Sí no te preocupes, yo me voy, nos vemos mañana.

- ¡Nos vemos! - Me levanté y le acompañé a la puerta. - 

Cuando Sara salió de la habitación me puse a saltar en la cama, muy contento, pero la alegría se fue rápido porque tenía sueño y acabé rendido.


6 de Octubre

Me levanté a las 9:00 am porque quería bajar a desayunar rápido e irme a visitar París e ir a algún parque a leer.

Cogí el ascensor, porque no tenía muchas ganas de bajar las escaleras, y me encontré a un chico alto, musculoso que daba mucho miedo. Lo miré de reojo y el me miró de arriba a bajo pero sin disimular. Gracias a dios ya estábamos en el primer piso donde estaba el bufet comí una tostada rápidamente y me fui al parque a leer. Mientras que caminaba no paraba de pensar en Sara, ya que no la había visto pero decidí no darle muchas vueltas a la cabeza y empecé a buscar un parque bonito, porque sí, no sabía todavía a donde ir.

Llegué a mi destino, fui a los Jardines de Luxemburgo en París, obviamente, entré ahí ya que era las entradas gratuitas y porque era muy relajado, me sorprendió porque allí suele ir mucha gente pero ese día no había mucha gente. Estuve caminando 5 minutos para encontrar un sitio con césped o con un banco, en todos lados había mucho césped y muchos bancos, pero quería leer en un lado donde no se escuchara nada, solo los pajaritos. 

Llegué al sitio ideal, cuando me da por mirar y veo que al fondo había a una pareja muy romántica con comportamientos muy románticos y de aparentar de que les va muy bien en su relación, decidí no ser tan cotilla y concentrarme en leer que para eso había ido a ese jardín.

30 minutos después... 

Llevaba media hora leyendo y me daba cuenta de que la pareja se iba acercando un poco más a mí pero ellos seguían a su rollo, disfrutando, y se tumbaron al lado mío a seguir con lo suyo, solo nos separaba un árbol, es decir que no estaban al lado mío exactamente si no que yo estaba a la derecha del árbol y ellos a la izquierda, y pues yo me sentía bastante incómodo así que decidí apartarme un poco más, cuando estaba recogiendo mis cosas para mudarme de sitio me doy cuenta que el chico que estaba con la chica era el mismo que me encontré en el ascensor, el que me daba miedo, así que eso me motivó más a mudarme de sitio y no molestar porque me daba miedo, no sé por qué, ¿vale?

Pasaron otros 30 minutos cuando me da por mirar y ví como la pareja se levantaba del césped, eché el ojo y la chica, (según yo la novia del chico que da miedo) me resultaba muy familiar, se giró un poco y sí era  ella.

- Mi amor, ¿vamos a una cafetería?- Dijo la chica-

- ¡Claro!, vamos a disfrutar- Dijo el chico que daba mucho miedo-

Justo en ese momento se me puso la cara blanca, mejor dicho, me puse casi a llorar de la tristeza, sentía como si me hubiesen pegado, no entendía por qué, así que decidí hacer lo que no debía, pero necesitaba confirmar mi teoría de que Sara y ese tal chico son novios, y sí, fui y los seguí de manera muy disimulada.

1 HORA caminando tanto yo como ellos y llegaron a la cafetería, bueno llegaron no, llegamos. Fueron a la cafetería Cafe Procope, muy bonita la verdad, me senté en una mesa lejana a ellos pero estaba en un ángulo perfecto para ver sus comportamientos.

Pidieron comida y estuvieron 10 minutos charlando y llegó el momento... pasaron los 10 minutos y empezó la ''magia'' empezaron a darse cariños a un extremo alto y ya confirmé mi teoría, Sara y ese chico están juntos, me levanté de la mesa medio enfadado y me fui al hotel ya no me apetecía visitar nada más.

Llegué al hotel, mejor dicho, a mi habitación y me tumbé en la cama a reflexionar, me dio por pensar en la situación que acababa de vivir y me pregunté a mí mismo, ¿Jack, te gusta Sara?, y pues me respondí a mí mismo, y me di cuenta de que sentía cosas por Sara, pero no lo entendía porque no la conocía mucho pero sentí algo fuerte por ella. Como siempre, otro fracaso más en el amor.

Estuve pensando por mucho tiempo si decirle a Sara de quedar en algún restaurante y preguntarle si ese chico era su novio pero ya se adelantó ella...

Eran las 22:00 de la noche cuando alguien tocó mi puerta, abrí y era Sara, me quedé muy en shock.

- Hola Sara- Le dije cabizbajo y triste- ¿Cómo estás?-

- ¡Hola Jack! ¿Estás bien?- Me dijo muy contenta-

- Sí, estoy bien- Obviamente le mentí-

- Bueno, te quería preguntar si quieres venir a mi habitación ya que te tengo que decir algo- Me sorprendí bastante.-

- Perdón, Sara, no me encuentro bien- Le dije de manera insegura-

- Por favor, hazlo por mí- Así que no me tocó otra que decirle que sí.-

Como su habitación estaba al lado tardé 30 segundos en entrar. Entré y allí estaba él, el mismo chico con el que estaba en el parque... 

Un cuento perfectoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora