Capítulo II.

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💮 Capítulo II. 💮
El famoso Tutor Choi.


Sencillamente, no podía creerlo.

Frunció el ceño, -en automático-, en el momento justo en el que su cerebro logro procesar el dígito de una sola cifra, que adornaba el filo de la portada de su ensayo sobre retórica.

¿Otra vez? ¿Era en serio? ¿Es qué de verdad podía echarlo a perder aun más? ¿Cuántas malas notas llevaba ya en su "récord" académico? ¿Tres?

Si continuaba de esa forma, solo iba a terminar afectando muchísimo más a su promedio. Más de lo que ya estaba para ese momento, lo cual era mucho que decir.

Suspiró pesado, ya no sabía que más carajos hacer para subir sus notas, lo había intentado técnicamente todo y nada había servido. Absolutamente nada.

Había estudiado, cosa que no había hecho en su vida por voluntad propia, también había estado repasando los temas y sus notas, a diario. Hacia las preguntas necesarias, para sacarse todas esas dudas que le surgían en clases, pero nada funcionaba. Todo era un esfuerzo sin frutos.

Había estado bastante seguro de haber hecho un muy buen ensayo, el más genial de todos los tiempos. No por nada se había pasado todo el maldito fin de semana pegado a la PC investigando, para poder entregar un trabajo “decente”, que se encontrará fundamentado y bien redactado, pero ni siquiera con eso había logrado, darle gusto alguno al odioso señor Jung.

Su profesor de filosofía.

En vano se había perdido la fiesta que Mark había dado en su casa, por su reciente victoria del sábado. Había sido el único de todo el equipo, que no había estado presente. A pesar de ser el Capitán, algo imperdonable, a decir verdad.

Definitivamente su tercer año en la universidad estaba siendo un asco, en todo el sentido de la palabra y apenas llevaba tres meses de haber iniciado el nuevo curso.

No quería ni imaginarse, como sería el resto del año si las cosas seguían igual, llegado ese momento.

Para su suerte, su padre, aún no se había enterado de sus bochornosas notas, aunque sabía de ante mano, que sólo era cuestión de tiempo para que el hombre se enterara de todo ello.

Lo cual, no iba a ser nada, pero nada bueno, para él claro estaba. El solo hecho de imaginar la reprimenda que iba a recibir por ello, le hacia doler el estómago.

Su padre era un hombre de temer y no quería, meterse en problemas con esté. Era muy joven como para morir, tenía planes y una copa, que ganar por delante.

Lee TaeMin, tenía apenas tan sólo veintiún años. Estaba justo a la mitad de su tercer año como universitario y estudiaba Psicología. Era un chico relativamente popular y encabezaba el top de los mejores jugadores que tenía la 'SNU'.

Tenía en sus manos el “título” del primer novato en haber ingresado al campo de juego, estando aún en su período de selección y en su primer año. Algo que claramente, iba en contra de las reglas establecidas por rectoría, las cuales estipulaban que sin importar el motivo, los estudiantes de primer año, no podían obtener de forma oficial un papel titular en el equipo.

Una cláusula que todos ignoraban de forma olímpica desde su admisión, como el Scrum Half del equipo hacía ya dos veranos atrás.

Había sido, -de hecho-, todo un suceso histórico, pues si bien, el plan original era que solo fungiera, como un 'suplente', -al menos durante los primeros seis meses-, al final de la temporada fuerte y tras el corroborar de primera mano, los resultados de su capacidad estratégica y dominio en el campo. El entrenador Kim, había decidido darle la posición de forma oficial.

I'll love you [2min]. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora