I'll love you [2min].

Capítulo IV.

💮 Capítulo IV. 💮
Un pequeño acuerdo.

—MinHo— Kim YooBin, llamó al alto, haciéndole salir de su ensoñación. El tutor, le sonrió apenado y sacudió la cabeza, como si buscará sacarse las ideas que no necesitaba de la cabeza, en ese momento.

—Ah, lo siento— se disculpó un tanto avergonzado —No la escuché. ¿Qué me decía?— preguntó. La madre de JongHyun le observó con curiosidad y sonrió, tenuemente.

—¿Dónde tienes la cabeza?— quiso saber, pues no era muy usual que el moreno se encontrará distraído —Te decía que, si gustas más lasaña, aún queda bastante.

—Oh, no, no…— el alto sonrió y negó con la cabeza, para posteriormente negarse de la manera más amable posible —Así está muy bien. Gracias señora Kim.

—¿Estás seguro cariño? Porque por lo regular, te comes de dos o tres platos.

—Sí, sí, seguro— MinHo asintió y se llevó la diestra al estómago —Creo que ya he comido suficiente al menos por hoy.

—Oh, ¿te sientes mal?— el hermano mayor de Jjong, -Kim JunSu-, quien era una persona muy atenta con todo el mundo, no pudo evitar mirarlo con curiosidad.

Era extraño que MinHo rechazará la famosísima lasaña de la señora Kim, cuando usualmente era esté quien se devoraba la mayoría del refractario y por quien, su madre se aseguraba de cocinar un par de raciones extra.

—¿Eh?— MinHo negó —No, no, no. Estoy bien.

—De acuerdo, esta bien— la señora Kim, lo dejo pasar, poco convencida. Su instinto materno que solía abarcar no solamente a sus hijos, le dictaba que había algo distinto, en MinHo. Un ‘algo’ qué ni JongHyun, pudo ignorar.

Pues si bien el que MinHo pospusiera la cena el día anterior, por un asunto “importante” del que por cierto, no le había querido decir gran cosa, -lo que no era muy común, pero tampoco era extraño, debido a que por lo regular, estaba involucrado en toda clase de eventos-, le había parecido, peculiar. El hecho de que se negará a repetir plato lo había tomado completamente por sorpresa.

—¿Comiste después de las tutorías?

—Oh, no. No tuve tiempo. Terminé y vine rápidamente hacía aquí.

—Ah. Cierto— JunSu dejó de lado su plato y enfocó toda su atención, otra vez en Choi —Ahora que hablas de ello. JongHyun me dijo que le estas dando tutorías a un capitán, ¿es eso cierto?

—Sí, es cierto— el nombrado asintió aunque sin demasiado interés en ello —Empecé ayer— agregó, sin poder evitar hacer una mueca disconforme.

Aún no superaba el hecho de que Lee diera por terminadas las tutorías por su cuenta propia. Por suerte o mala suerte, -eso todavía, no lo decidía-, al final del día y contra todo pronóstico, ese asunto se había arreglado.

KiBum y los demás, habían sido muy claros con su petición y había sido algo imposible ignorarles, teniendo en cuenta que habían ido a buscarle por cuenta propia, específicamente, para agradecerle y más tarde, para suplicar.

Algo tan extraño como sorprendente, si le preguntaban.

MinHo, sabía reconocer a los buenos amigos y en especial, a las acciones sinceras.

Apelar a ellas, le era casi imposible, razón por la que había ido a buscar al capitán para tratar de convencerle de retractarse, aunque claro, si algún día alguien le preguntaba sobre “eso”, él iba negarlo hasta la muerte.