dead alive ★ nomin

01

la casa de renjun estaba repleta de adolescentes borrachos, algunos tambaleándose u otros casi teniendo sexo en el sillón mientras el ruido de la música aturdía el lugar.

"esta mierda está buena" tosió jaemin aspirando el humo del cigarro de marihuana con su máscara subida hasta la frente.

"te vas a morir si sigues mezclando tequila y hierba"

"déjame mark, es halloween"

"sí es halloween, pero luego yo y los chicos somos los que se tienen que devolver con un imbécil disfrazado de michael myers en calidad de bulto" se quejó mark.

"dile eso también a haechan, se está vomitando encima"

jaemin señaló al pobre chico de piel morena quien hacía su mayor esfuerzo por no manchar su disfraz del joker, lamentablemente perdiendo la batalla.

mark miró a jaemin con decepción mientras se acariciaba su ceño fruncido.

"joder no, esta noche no quería cuidar a mi novio sin resistencia" el chico de cabello negro y mullet se dirigió hasta donghyuck para asistirlo y sacarlo de ahí para llevárselo al baño.

entre risas renjun y chenle llegaron hasta donde estaba jaemin. chenle de un zarpazo le quitó la hierba de los dedos a jaemin para darle una calada, jaemin soltó un "¡oye!" y chasqueó la lengua en molestia.

"que mezquino"

"es mi hierba, yo la compré, ve a conseguirte la tuya"

"los amigos comparten"

renjun se apoyó en el hombro de jaemin y chenle le pasó el cigarro a él.

"oye ren, ¿iremos a ver esa mierda del fantasma del auditorio?" preguntó chenle.

"no jodan, ¿en serio se creen ese cuento?"
gritó jaemin para que se escuchara entre la ensordecedora música y se burló, achinando más sus ojos de lo que ya estaban por el efecto de la hierba.

jaemin había oído toda su vida, o desde que entró a esa escuela sobre el supuesto fantasma del auditorio, teóricamente se trataba de un chico que se suicidó allí en los años 90, y según dicen se le podía invocar cada halloween. jaemin nunca creyó del todo en aquella leyenda, pero siendo sincero con él mismo de todas formas le causaba ansiedad. jaemin no lo admitiría, pero era muy miedoso. como secretario del consejo estudiantil muchas veces se tuvo que quedar a cerrar reuniones en el auditorio, por lo que tenía que dejar el lugar bajo llave y sin ningún alumno adentro. las veces que le tocó hacer eso, lo hizo con cautela y siempre a la defensiva de que algo pudiese pasar. se sentía observado y solamente quería ya terminar e irse de allí lo más rápido posible, casi siempre luego de cerrar la puerta no hacía nada más que apresurar su paso casi corriendo para volver a donde estaba. pues el ambiente lúgubre del viejo auditorio tampoco ayudaba.

"¿la niña tiene miedo y no quiere ir? que marica eres jaemin"
dijo renjun con una sonrisa burlona.

"claro que no idiota, ni un crío se asustaría por algo así, no soy como ustedes que creen en pendejadas" jaemin sacó un vasito de tequila de la mesa y se empinó un último shot.

"taeyong hyung se quedará cuidando mi casa, así que jaemin ve a descongelar a jisung, parece que se está yendo en pálida como haechan"

mark, quién era el más lúcido de los 6 conducía el auto rumbo hacia la escuela. esta no quedaba muy lejos y menos si era en auto, por lo que dentro de unos diez minutos estuvieron en su destino.

jaemin tenía las llaves del auditorio, más no del portón de entrada de la institución, por lo que tuvieron que entrar por la parte trasera y saltarse la reja. hacía mucho frío, el viento solpaba con violencia y hacía rechinar los árboles. la única iluminación que tenían era la luz de la luna. simplemente un escenario digno de una noche de brujas.

luego de caminar un poco hacia adentro dieron con el auditorio, jaemin sin más abrió la puerta, molestando los oídos de todos con el chirrido por la falta de aceite en la bisagra.

una vez prendidas las luces de adentro los chicos se sentaron en un círculo, uno al lado del otro.

"¿trajeron los materiales?" consultó haechan.

"yo traje las velas, chenle trajo el papel y el lápiz y jaemin el encendedor" contestó jisung.

chenle puso los materiales a disposición, estiró el papel y comenzó a trazar una especie de tablero de ouija para forjar uno casero. jaemin encendió las velas y apagó las luces.

un escalofrío recorrió el cuerpo de jaemin al ver el lugar solamente alumbrado con la tenue luz de las velas.
jaemin jamás lo admitiría en voz alta pero estaba cagado hasta las patas, ni siquiera podía creer que estuviera a punto de hacer esa estupidez y todo solo para no quedar como un miedoso frente a sus amigos. aún así no había vuelta atrás, ya estaban allí así que sería mejor solo repetirse a sí mismo que no pasaría nada. los chicos verían que el fantasma no era real y todos podrían irse de vuelta a casa sanos y salvos.

pobre jaemin iluso.

fue renjun quien llamó la atención de todos para dar inicio al ritual.

"bien, todos pongan sus manos sobre el papel y cierren sus ojos" explicó brevemente.

los dientes de jaemin temblaban por el nerviosismo.

lo que jaemin no sabía es que él sería el único que cerraría sus ojos con la mano puesta sobre la improvisada ouija, el resto de sus amigos tenían otros planes que, aparentemente, no lo incluían. mark le hizo una silenciosa seña a chenle para que hablara mientras todos los demás comenzaban a alejarse con pasos silenciosos.

"bien, jaemin ahora debes repetir en voz alta 'muéstrate ante mí' sin parar hasta que yo te diga"

"¡¿por qué yo?!"

"porque tu no le temes a nada ¿verdad? tu dijiste que esto no era real así que supongo que debes demostrarlo" jaemin bufó pero no se quejó más y comenzó a recitar la frase. sentía su corazón golpear fuertemente contra su pecho y del miedo que tenía se le había bajado completamente el efecto de la hierba y el alcohol, estaba completamente lúcido y sobrio cuando sintió un fuerte viento golpearlo, lo cual no tenía sentido ya que todo estaba completamente cerrado. tragó grueso mientras seguía repitiendo lo que chenle le había dicho sin parar, quizás solo se trataba de una mala jugada de su propia mente, de sus nervios. debía dejar de ser un llorón y solo seguir hasta el final para acabar con esto de una vez y demostrarles que él tenía razón.

o eso pensó hasta que sintió el viento soplar ferozmente, revolviendo su cabello y apagando las velas en el proceso, sin pensarlo abrió los ojos de par en par y miró frenéticamente a su alrededor solo para confirmar que se encontraba solo ahí. sintió sus ojos picar pero se negó a soltar siquiera una lágrima por esa bola de estúpidos que presumían ser sus amigos, jaemin nunca se imaginó que ellos le iban a gastar una broma así.

"¿ho-hola?" soltó jaemin a la nada con su voz trepidante. nadie respondió y así pasaron unos minutos, en silencio antes de que jaemin decidiera retirarse del lugar.

jaemin suspiró aliviado.

de mala gana se puso de pie para marcharse y fue ahí cuando lo vio justo frente a sus ojos; un chico alto y pálido con el cabello desordenado y los ojos más negros que la noche misma. vestía un sweater verde a rayas, unos jeans y un par de converse. jaemin estaba petrificado en su sitio, no conocía a ese hombre, no iba a su escuela y era imposible que pudiera estar ahí antes que ellos llegaran, así que eso solo significaba que...

"t-tú... ¿q-quien eres tú?..." balbuceó aún sin salir de su estado de shock.

el chico solo le mostró una enorme sonrisa socarrona.

"buh"

y jaemin lo vio todo oscuro de repente.