ONLY YOU |Draco Malfoy|

006

Llegando a Hogwarts a Elise, estaba en el carruaje con Luna, cuando se encontraron con Harry, Hermione, Ron y Neville.

—¿Que es eso?—pregunto Harry viendo a la nada.

—¿Que cosa?—respondió Ron.

—Lo que tira del carruaje.—contestó Harry.

—Nada tira del carruaje.—aclaró Hermione.—se mueve solo, igual que siempre.

Harry se acerco un poco más a carruaje y ahí es cuando el y Luna conversarían.

—No estás loco, yo también los veo. Estás tan cuerdo como yo.—dijo Luna al ver a Harry.

Los chicos se sentarían en el carruaje.

—Les presento a la Lunátic...—Hermione iba a decir algo ofensivo pero corrigió lo que iba a decir al ver como Elise la miraba.—a Luna Lovegood. Que lindo collar.

—Es un amuleto. Para alejar a los nargles.—contestó Luna.

—¿Tú también los ves?—pregunto Harry a Elise.

—No, pero se como se ven.—respondió.

(...)

—Buenas noches, niños.—saludo Dumbledore.—Tenemos dos cambios de personal este año. Por favor, reciban de nuevo a la profesora Grubbly-Plank quien estará a cargo de las Criaturas Mágicas mientras el profesor Hagrid está ausente.—informó.—Y recibamos a la nueva maestra de Defensa Contra las Artea Oscuras, la maestra Dolores Umbridge.

Antes de que Dumbledore pudiera decir algo más, la nueva profesora se levanto y comenzó hablar.

—Gracias, señor director, por sus amables palabras de bienvenida. Y que hermoso es ver su brillantes y felices rostros sonriéndome. Estoy segura de que todos seremos muy buenos amigos.—dijo Umbridge.

—Si, claro.—susurraron los gemelos Weasley.

—El Ministerio siempre ha considerado que la educación de jóvenes brujos y hechiceros es de vital importancia. Aunque cada director ha aportado algo nuevo a este histórico colegio, el progreso solo por progresar puede continuar.—después de estas palabras los estudiantes pudieron comer en paz.

Luego de las palabras que Dolores dijo, se entendió que el Ministerio estaba interfiriendo en Hogwarts.

Mientras Elise pasaba por los pasillos, los gemelos Weasley se metieron en su camino.

—Hoy en la noche, vamos hacer la posición.—dijo Fred de un lado de la chica.

—¿Nos quieres acompañar?—pregunto George.

—No existe tal posición, y no creo que la puedan crear. Así que, suerte.—dijo la chica dándose la vuelta quedando frente a ellos. Elise daria un brinco al sentí como unas manos acariciaban sus hombros.

—Me la prestan un momento.—dijo una voz masculina que enseguida Elise supo quien era, Draco.

—Toda tuya.—dijeron ambos y se fueron.

Los amantes fueron por otro lugar un poco alejado de los estudiantes para que Draco le pudiera decir algo.

—Ten una cita conmigo.—dijo el rubio mientras caminaban.—Mañana en la noche o hoy. Lo más pronto posible.

—¿Por que tan apurado?—pregunto Elise sonriendo.

—Solo ven. Mañana nos vemos, hoy descansa.—ordeno el rubio.—Oh, y ven con falda.—susurro en el oído de la chica para luego marcharse.

La chica sonrió y ambos fueron a sus habitaciones, ambos pensando en el otro y en lo que podría ser esa cita. Su primera cita.

(...)