ONLY YOU |Draco Malfoy|

015

Elise estaba lista tenía un vestido hermoso negro, con unas medias nylon y tacones hermosos, por el frío iba acompañado con un saco.

—Te queda hermoso.—opinó Draco.—sin duda el mejor regalo que te he dado.

—Viendo la marca, ¿como cuánto costó?—preguntó la chica.

—Eso no importa, cara mia.—admiro el rubio.—vamos.

Ambos salieron y caminaron por un tiempo en el Callejón Knockturn, hasta que entraron por fin a Borgin y Burkes.

Ahí se encontraban Narcissa, Bellatrix, Fenrir Greyback y un hombre con una capucha negra que cubría su rostro. Elise le pareció raro esto pero aún siguió, sabía porque estaba ahí y en lo que se iba a convertir después de esto.

Todos estos participantes incluido el hombre y Draco, rodearon un viejo caldero y, en el centro de encontraba la joven Eli. Como Elise extendió su brazo izquierdo, el caldero explotó una luz y rápidamente el grupo se dispersó. La marca tenebrosa ya se encontraba plasmada en el brazo de la chica.

—Déjame ver.—dijo Bellatrix tomando a la fuerza el brazo de esta y sonriendo al ver la marca.—Eres mortifaga.—río.—¡Elise Dragon es mortifaga!

Otros hombres que al parecer estaban escondidos aparecieron y comenzaron a reír.

En ese momento el hombre que estaba con capucha, se quitó tal capucha y dejó ver su rostro. El corazón de Elise se paró por un momento, y en lo que las miradas de ambos conectaron su corazón volvió a latir.

Con solo una mirada, el le podía decir todo a ella, era de familia, eran hermanos.

—Cyrus.—susurró Elise.

En ese momento Cyrus salió de ahí, con su hermana persiguiéndolo, los demás ni siquiera sabían dado cuenta que habían salido estaban tan ocupados festejando.

—Elise.—Draco intento detener a la chica lo cual no logro.

—¡Cyrus! ¡Cyrus!—grito Elise afuera de Borgin y Burkes.

—¡Por Merlin! ¡Elise! ¡¿Que acabas de hacer?!—gritó su hermano desesperado.

—¿Tú eres mortifago? ¿Por esto desapareciste?—eran las preguntas que vagaban en la mente de Eli.

—Si, lo soy. Pero ¿por qué mierda tú lo eres ahora?—pregunto.—¿Quien te obligo? ¿Fue el?—preguntó mirando a Draco que estaba detrás de ella.

—No, Cyrus. Nadie la obligó.—contestó Narcissa atrás de Draco.

—¿Pero ustedes le dieron la idea?—pregunto y se contesto a si mismo viendo la mirada de Narcissa.—No puedes volver a casa.—dijo Cyrus.

—Lo se.—contestó.

—Vive conmigo y desaparece.—ordenó el hermano en lo que se iba.

Elise solo podía mirar a Draco con odio, por eso Narcissa entro nuevamente.

—¿Tú sabías?—pregunto la castaña.

—Moon...

—¡¿Tu sabías?!—volvió a preguntar, Draco bajo su mirada y asintió.—Bien. ¡El es mi hermano! ¡Estuve meses pensando si estaba vivo o no! Y no se te ocurrió decírmelo.—grito la chica.

—Elise...

—¡El es mi hermano!—su voz se entrecortó y las lágrimas comenzaron a salir, encogió sus piernas y lloraba en el suelo al saber todo esto.

—Elise, perdóname.—dijo Draco abrazándola en el suelo.

—¿Por que no me dijiste?—pregunto la chica entre llantos.